CAPITULO 51

13.8K 775 31
                                    

Siento algo húmedo y tibio en mi nariz, luego en mi mejilla y por ultimo en mis labios. Abro los ojos y pulgoso literalmente me está lavando mi cara con su lengua. Lo tomo entre mis brazos y comienza a jugar con mis dedos, lo lava luego los muerde y así por un rato.

De repente caigo en la cuenta que lo último que recuerdo es que iba en el auto con cristian rumbo a la cuidad. ¿Dónde estoy? Me levanto de la cama dejando a mi bebe jugando en la cama. Cuando abro la puerta pulgoso se baja de la cama y sale como alma que lleva el diablo. Salgo detrás de el pero no lo puedo alcanzar ¿Cómo puede correr de esa manera con la pata mala? La sangre abandona mi cuerpo cuando lo veo bajar las escaleras como un loco.

-pulgoso... ven- grito. Bajo las escalera y no me percato que una señora iba con una pila de ropa a no sé dónde. Choco con ella y ambas caemos al suelo. ¡ay!, mi trasero! Me di un fuerte golpe. Oh por dios. Busco entre toda la ropa hasta que encuentro a la mujer con la que choque. Ella me mira y se larga a reír. Yo la miro atónita.

-niña... se que de vez en cuando hay que usar el suelo para sentarse, pero ¿de esta manera no crees que es doloroso?-me dice con una gran sonrisa

-lo siento, no la vi- digo apenada

De la nada una toalla se mueve sola. Tanto la señora como yo nos sorprendemos pero cuando logro ver algo negro con blanco, se de quien se trata. Muy despacio me acerco, tomo la toalla dejando en evidencia a pulgoso. Baja su torso y deja su colita en alto y me ladra. Y después sale corriendo rumbo a una puerta que esta junta.

Me levanto y ayudo a la señora, que no tengo ni la menor idea de cómo se llama, la ayudo a ordenar la ropa y ella sigue su camino. Es hora de buscar a mi pequeño fugitivo. Me acerco a la puerta y por el pequeño espacio que queda logro ver a cristian jugando con pulgoso. Un sonrisa se forma en mis labios. Se ve tan tierno y mi corazón se acelera.

-oye pequeño, dejaste a mama sola. ¿quieres jugar?- y pulgoso mueve su colita- ahora entiendo porque Ana te quiere tanto, eres muy tierno-

-señora grey ¿la puedo ayudar?- salto por el medio susto que me acabo de llevar.

-Taylor, me asustaste-

-lo siento Sra. grey, no era mi intención-

-Ana solo Ana, solo tengo casi 18 años, no me hagas sentir vieja- una sonrisa express aparece en sus labios.

-está bien Ana ¿Qué hace aquí? ¿Necesitas algo?-

-si la verdad necesito comida para cachorro, pulgoso no tienes muchas cosas, más bien tiene una, la manta de polar. ¿No hay algún lugar cerca donde le pueda comprar algunas cosas?-

-si claro, pero debe informarle al sr grey que va a salir- justo cuando voy a contestar sale cristian con pulgoso en sus brazos.

-¿salir? ¿A dónde?- pregunta

-con su permiso sr grey- Taylor se retira

-adelante- dice- y ¿adonde ibas a salir?-

-quiero comprarle cosas a mi bebe- digo apuntado a pulgoso

-está bien pero voy contigo- lo miro asombrada- es mi bebe también- dice acariciando a pulgoso.

Media hora después estamos en un gran centro comercial, tengo a pulgoso bien agarrado ya que no quiero que se escape y le pase algo. Entramos a una shopping pet y me enamoro de cada cosa que veo. Cristian se ríe de mi, sobre todo cuando escojo capitas para él. La niña que nos atiende nos muestra distintos arnés que le pueden quedar, escojo 3 uno rojo, uno azul y uno negro con patitas blancas. Llevamos platos, comida, ropa y muchos juguetes.

Cuando vamos llegando a la salida del centro comercial, varios hombre con cámara, micrófonos y no sé qué cosas más nos acorralan con preguntas como ¿sr grey quien es la señorita? ¿su nueva conquista? ¿están comprometidos? ¿están casados? ¿Qué paso con leila? ¿supo que leila está embarazada? ¿el hijo es suyo? ¿se va ha hacer cargo? Cristian me atrae hacia él y me protege de esos hombres, llegamos al auto y entramos en el. Me acomodo y me acurruco en el pecho de cristian y pulgoso en el mío. ¿Quién es leila y qué relación tiene con cristian?

El camino se hace corto, subimos al ascensor y cuando llegamos dejo a pulgoso en el suelo, corre en dirección a la señora de antes, se sienta y espera hasta que se da cuenta que la señora se sienta en uno de los piso de la cocina y que esta concentrada leyendo una revista y lanza tres ladridos, la pobre señora del susto se va de espalda, cayendo al suelo otra vez.

-GAIL!!!- grita cristian. así que Gail es su nombre

Cristian corre a su lado y la ayuda a pararse, no soy capaz de mirarla a los ojos. Tomo a pulgoso y lo reto diciendo perro malo. De la nada Gail su larga a reír y cristian y yo nos miramos sin comprender.

-señor ¿Cuánto tiempo se van a quedar?- dice indicándonos.

-mmm... 3 días- responde

-bueno, tendré que busca un pantalón con protección para mi trasero. En menos de 2 horas me han tumbado 2 veces- cristian me mira pidiendo una explicación.

-lo siento, otra vez- digo mientras Gail se pone de pie y me mira.

-tranquila, ese cachorro es un loco igual que la dueña- dice mientras acaricia a la bestia que tengo por perro- voy a terminar de preparar la cena- y se va.

-nena... me debes una explicación- le cuento lo que paso antes y el se reí- sabes preciosa eres más peligrosa de lo que pensé. Ahora necesito que me acompañes al despacho y si puedes llevar a esa mini bestia te lo agradecería- me besa y entra al despacho. 

Entro al despacho y mi corazón se acelera. Hay muchas flores, miles de flores. En el suelo con pétalos blancos está escrito "perdóname, por favor". Mira a cristian, y en sus ojos puedo ver una chispa que nunca antes había visto. Se acerca a mí y me quita a pulgoso, le coloca una capita roja y escrito con negro "perdona a papa", una pequeña sonrisa se escapa de mi boca.

-nena, yo... yo quiero pedirte perdón por lo que dije. Eso no era lo que sentía realmente, está enojado y frustrado. Te adoro más que nada en este mundo y te amo como nunca pensé. Eres mi todo anastasia. Pero también tengo responsabilidades y no quiero compartirte. Quiero que estés conmigo, siempre. Y la verdad tu terquedad no me ayuda. Sé que la hacienda y mi empresa nos traerá problemas pero sé que juntos lo solucionaremos. Ana ¿me perdonas?-

¿Cómo este hombre puede amarme de esa manera? Si solo le traigo problemas. Es hora de bajar las barreras y rendirte al amor Ana, aunque sea de a poco. Pequeña él te ama y te lo demuestra, ríndete al amor de una vez por todas, sigue el consejo de tu abuelo, el es tu felicidad, lucha por el me dice mi subconsciente.

-si te perdono pero nunca más me hagas sentir así, nunca más- digo mientras una lagrimas se escapan de mis ojos.

-no nena... no llores- me besa- y nunca más te hará daño, lo prometo- me vuelve a besar y nos dejamos llevar. Sentimos unos ruidos raros y cuando nos separamos pulgoso está jugando con unos pétalos de rosa. Salta, corre, choca y ladra.

-por lo menos a nuestro bebe no le afecta nuestras peleas- digo

-si pero lo malo es que nos interrumpe-me rio-bueno señora grey en nuestro cuarto hay una sorpresa para usted. Las espero en una hora en la sala. Y pulgoso se queda conmigo- salgo rumbo a la habitación donde estaba durmiendo. ¿Qué tendrá pensado hacer? Cuando entro no puedo creer lo que mis ojos ven.

BUENOS CHICAS DEJO OTRO CAPITULO... MAÑANA SE VIENE LA MARATÓN... POR SI TIENEN DUDAS EL CAPITULO 50 CORRESPONDÍA AL DÍA JUEVES PERO POR UN PROBLEMA LO SUBÍ EL VIERNES... POR ESO HAY DOS CAPÍTULOS PARA HOY 

ESPERO QUE LES GUSTE... Y ESPERO SUS COMENTARIOS Y VOTOS

ESTO ES SOLO UNA PARTE DE LA SORPRESA EN LA MARATÓN APARECERÁ LA OTRA PARTE ¿QUE SERA?

DEDICO ESTE CAPITULO A

YocastaSantiago 

vianmartinez

SandraStephaniie

paoovalladares 

Grey-Steele: Juntos Por El Destino (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora