Flames of passion

Cap 47

—Eso es una mierda—Parker niega mientras tomo de mi cerveza—. Pero todos sabemos que Christopher nunca ha estado en una relación con nadie, no es nuevo que te haya rechazado.

—Vaya, gracias—ruedo los ojos haciéndolo reír—. En el fondo me lo esperaba, pero no sabía que...—llevo una de mis manos a mi pecho. «No sabía que iba a doler tanto»

Duele, sin duda, pero me niego a llorar. Me niego a llorar por un hombre que hizo todo lo que pudo para herirme. No.

—El rechazo siempre duele—acaricia mi espalda—. Pero si me permites darte un consejo; no le des la satisfacción a Christopher de ver que te afecta. Sigue con tu vida como si nada hubiera pasado, pronto se te va a olvidar.

—No creo que se me olvide—río—. Creo que lo mejor es hacer la misión y cuando la terminemos con éxito podré pedir de nuevo un traslado. Quizás esta vez me vaya a Miami, me va bien el calor y el sol.

—También es una opción—ríe—. Ve a Miami, busca otra persona que si pueda ofrecerte lo que quieres y mereces. Sigue adelante, Adeline, eres una mujer demasiado hermosa para estancarte por el rechazo de un imbécil como Christopher Morgan.

Tiene razón.

—¿Qué hay de ti y James?—pregunto—. ¿Vas a dar un paso adelante algún día?

A Parker le gustó, o le gusta, Rachel James, y eso no fue una sorpresa muy grande para mi. Es decir, la mujer es hermosa y amable, es encantadora. Además de ser una muy buena soldado.

—No, no lo creo—niega, tomando de su trago—. Hay cosas que hay que simplemente dejar quietas, Adeline.

—Es tu decisión—me encojo de hombros—. Tú sabrás tus razones, pero ¿qué es lo peor que puede pasar? Si te rechaza puedes simplemente seguir con tu vida y ya está.

—No uses mis consejos contra mi—me señala en advertencia y río

Mi celular suena con una llamada e inevitablemente una sonrisa se forma en mis labios al ver el nombre de Liam en la pantalla.

—Hola, tú—saludo

—Hola, muñeca—una risa de bebé suena en el fondo—. Si, ese es un perrito bonito—ríe—. Lo siento por eso, ¿cómo estás?

—Yo bien, y tú con tu hijo, por como puedo oír—río—. Lamento no llamar seguido, Londres es difícil últimamente, apenas llegué del tratamiento y...

—No tienes que explicar, muñeca, lo entiendo—suspira—. Solo quería avisarte que viajaré a Londres por trabajo, quizás podríamos vernos para tomar un café o algo.

—Dios, me encantaría—suspiro—. No sabes cuánto necesito el abrazo de un amigo en este momento, Liam.

—Vas a tenerlo pronto, muñeca, ¿qué pasó?

—Hmhm...—muerdo mi labio—. Digamos que solo es un poco caótico. ¿Cuándo llegas? Puedes quedarte en mi casa.

—Oh, eso si es una sorpresa—ríe—. ¿Te gustaría conocer a una vieja amiga de papá, pequeño?

—¿Nita?—escucho la tierna voz de un niño y murmuro un "aw" que hace reír a Parker mientras niega

—Si, es muy bonita—ríe Liam—. Mi hijo es un coqueto, discúlpalo. Pero aceptaré tu oferta. Nos vemos en... dos días.

—Por supuesto, te veo en dos días—sonrío, sintiéndome más relajada que cuando salí del apartamento de Christopher esta mañana

—Di: adiós—le pide a su hijo, que dice algo como "ayos" que me hace reír—. Adiós, muñeca, nos vemos pronto.