La princesa consorte más fuerte del Interestelar

Capítulo 87: Con la ganancia viene la pérdida

La emoción de sentirse como una persona renacida después de que pasó la catástrofe disminuyó y Su Zihan recuperó gradualmente la compostura y notó que algo andaba mal.

Esto es simplemente anticientífico. Estaban justo en el camino de la bestia rinoceronte, pero no tenía sentido que la bestia rinoceronte los viera pero no atacara.

Pensando en la seguridad confiada de Xiao Qingyang antes, ¿la bestia rinoceronte realmente los ignoró debido a Qingyang?

Su Zihan tenía mucha curiosidad por el método de Xiao Qingyang y preguntó: "Qingyang, ¿cómo hiciste para que la bestia rinoceronte no nos atacara?".

Xiao Qingyang reveló una sonrisa misteriosa pero no respondió la pregunta. ¿Cómo podría responder a esto?

No podía simplemente decirle a Su Zihan que usó su poder espiritual para envolver a todos y hacerlos invisibles, para que la bestia rinoceronte no los viera y, por lo tanto, no atacara.

Incluso si fuera un libro abierto, no podría revelar esa información a otros, ni siquiera a sus compañeros de equipo. Como no sabía cómo responder, Xiao Qingyang solo pudo sonreír en respuesta.

Sin embargo, su sonrisa adquirió un significado diferente en los ojos de Su Zihan.

Aunque los alquimistas pueden parecer físicamente más débiles, por lo general tienen uno o dos métodos para salvar vidas. De lo contrario, si se encuentran con el peligro y los usuarios de la habilidad no están presentes o no pueden llegar a tiempo, ¿qué otra opción tienen los alquimistas aparte de esperar la muerte?

Y, naturalmente, los medios de autopreservación durante momentos críticos como este no deberían compartirse fácilmente con otros.

Después de entender esto, Su Zihan se arrepintió de su anterior curiosidad y se preocupó de que Xiao Qingyang pudiera malinterpretarlo. Rápidamente explicó: "No tenía la intención de entrometerme en tu secreto. Los métodos de autoconservación como este no deberían contarse a otros, de lo contrario, ¿qué haríamos si nos encontramos con un peligro en el futuro?"

Xiao Qingyang no sabía lo que Su Zihan había imaginado, pero al menos la situación actual estaba a su favor.

Mientras no continuaran preguntando sobre el asunto anterior, Xiao Qingyang se sentiría aliviado. Él sonrió y respondió: "Está bien".

"Qingyang, ¿qué debemos hacer ahora?" Su Zihan preguntó, implícitamente considerando a Xiao Qingyang como su líder.

Con esta pregunta, el asunto anterior también quedó atrás y las ansiedades de Xiao Qingyang se aliviaron por completo.

En realidad, no lo pensó demasiado desde el principio. Solo quería proteger a Su Zihan y Gu Xiaotian, aliviar la carga de los otros compañeros de equipo y permitirles luchar contra las bestias rinoceronte sin preocupaciones.

Pero cuando realmente logró salvar a todos, Xiao Qingyang se dio cuenta del problema. El asunto del poder espiritual definitivamente era algo que no podía compartir con otros. Si alguien le preguntara cómo lo hizo, tampoco sabría cómo responder.

Afortunadamente, el tema finalmente se dejó de lado.

"Debemos encontrar un lugar seguro para escondernos y esperar a que nuestros compañeros de equipo regresen victoriosos", dijo Xiao Qingyang a los otros dos.

Lo único que podían hacer ahora era protegerse y esperar el regreso triunfal de sus compañeros.

En verdad, Xiao Qingyang quería ir al campo de batalla y ayudar a sus compañeros de equipo. Sin embargo, con dos compañeros de equipo casi impotentes a cuestas, tuvo que priorizar su seguridad.