Día gris

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Las gradas que rodeaban la cancha de baloncesto se fueron llenando a los pocos minutos que abrieron la puerta del gimnasio que tantas veces usaba el equipo golden boys*. Todo el equipo mencionado se estaba bañando en nervios y no era para menos, ese día sería su primer juego que desempeñarían en su propia territorio, su gimnasio y por supuesto, su preparatoria, lo que significaba que muchos de sus amigos y conocidos tendrían la posibilidad de verlos jugar en vivo con otro equipo que les daba un poco de pavor.

-. Oí que Halsey vendrá al partido de hoy - chilló Suhon, un integrante que tenía mucho tiempo en el equipo.

-. Esa chica es una belleza, ni se te ocurra acercarte que es mía - señaló amenazante Jisung, otro integrante del equipo.

Y así todos empezaron una pelea en los vestidores acerca de quien debería conquistar a la famosa chica que alguna vez, Yoongi, "contrató" para que besara a su enemigo. Al recordar lo que había pasado hace más de tres meses, Namjoon sonrió e intento buscar con la mirada a su mejor amigo pero no estaba ahí. Bajo la mirada para evitar que los demás se percataran de su estado de ánimo, sin embargo su plan falló cuando un pelinaranja golpeó su cabeza como si fuera una puerta.

-. Namjoon se encuentra ahí? - bromeó alegre.

El castaño no se limitó y le sonrió como agradecimiento por intentar hacerlo feliz. Al segundo siguiente volvió a endurecer sus expresiones.

-. Y nuestro rey? - giro la cabeza para intentar encontrar al pelinegro que tenía por amigo.

Namjoon no tenía idea si debía decirle a Hoseok sobre lo que sucedía ese día, sobre como Yoongi sufría especialmente ese día. Él sabía que no le correspondía contar algo tan personal para su amigo, pero sabía que si no lo hacía nadie más lo haría porque el mayor de todos siempre ocultaba lo que sentía y prefería morir en silencio. Namjoon sentía que cometía un error pero ya nada podía hacer, además el pelinaranja ya era parte de su extraña familia y tenía la responsabilidad de apoyar a Yoongi en un día así.

-. Hobi... - lo llamó por el apodo que entre todos le pusieron - hay algo que debo decirte sobre Yoongi - en ese momento consiguió toda la atención de su mayor porque, para Hoseok, Min era una de las personas más indispensables en su vida.

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Un ramo de flores lilas dejo de verse bello por los largos minutos que Yoongi lo había sostenido con las flores mirando al suelo, mismo lugar dónde estaban sus ánimos. Siguió su recorrido por los pasillos vacíos de la escuela, era sábado así que la única razón para estar en la escuela era por los partidos que se impartían en ese fin de semana, dichos partidos rara vez se hacían en esa escuela por eso la mayoría de las personas estaban muy emocionadas por ir y esa idea no le provocó ningún sentimiento positivo al pelinegro y menos si se sentía miserable a morir desde que despertó.

No quería seguir esforzándose.

Si hubiera seguido sus deseos, estaría en cama mientras comía palomitas o cualquier cosa que encontrara para mantener su ansiedad controlada y ver muchas películas para no tener que pensar en nada más, en nadie más. Su maldita consciencia fue su motivo de salir de su casa ya que no podía dejar abandonado a su equipo y también porque Namjoon le pidió que fuera a dar cierta visita que termino posponiendo como siempre.

Ahora que estaba en la escuela se replanteaba si no sería un estorbó para el partido de sus amigos debido a que se sentía débil y cansado por la falta de sueño que le dejó la noche anterior, no había podido dormir por las pesadillas.

La venganza de Min Yoongi [Yoontae] 🌹Where stories live. Discover now