Capitulo 43

110 7 0
                                    

Me despierto cuando el sol comienza a darme directamente en la cara, hago una mueca mientras me remuevo en la cama y miro todo a mi alrededor. Sigo en la habitación de mi hermano, seguramente me quedé dormida. Miro el reloj sobre la mesilla y me sorprendo al ver que ya es mediodía, odio el puto yet lag, los cambios horarios son horrorosos. Con cautela me levanto de la cama y dejo la foto de mi hermano en su sitio, ayer tuve un pequeño reencuentro con mi pasado y aunque me dolió, me sentí en paz después de tanto tiempo.

Dejo la habitación de mi hermano tal y como la encontré y voy a la mía, la cual está más vacía después de mudarme. Agarro algo de ropa limpia de la maleta antes de adentrarme en el baño, no he querido deshacer el equipaje porque nuestro tiempo aquí es limitado. Me doy una ducha rápida y una vez arreglada bajo a la cocina. No me sorprende encontrarme a Minho disfrutando de una taza de café, a pesar de las horas que son, necesita su chute de cafeína diario.

–Buenas tardes– lo saludo mientras agarro de la nevera zumo y me sirvo un vaso –¿Cómo has dormido?–

–Bien, no me ha sentado tan mal el cambio horario...– comenta Lino sonriendo levemente –Aunque deberías de ver a Han dormir, no hay quien lo despierte–

–Déjalo, no hay prisa– digo mientras me siento junto a él –Tendremos un par de días para hacer turismo antes de irnos, hoy podemos descansar–

Minho asiente levemente y posa su vista en la taza que tiene entre manos.

–Ayer te escuché llorar– dice de repente sorprendiendome –No pude darte las buenas noches, así que fui a tu habitación y no estabas. Me supuse donde estarías y fui a ver si estabas bien. Sé que no lo estabas, pero no quise molestarte, se notaba a leguas que necesitabas soltar todo el dolor que llevas años acumulando–

–Gracias– murmuro sonriendo levemente –Es cierto, necesitaba un momento a solas con mi pasado para poder avanzar–

–Estoy orgulloso de tí Ruby-doo– susurra Lino agarrando mi mano con fuerza.

Sonrío al escucharlo y suelto un suspiro, sin duda alguna, conocería a Minho una y mil veces más, no me arrepiento de nada de lo que he vivido. Conocer a los chicos es lo mejor que me ha podido pasar.

Por el papel que hay colgado en la nevera, mamá ha salido a hacer la compra, así que, mi mejor amigo y yo nos encargamos de hacer la comida, para darle una sorpresa cuando vuelva. Mientras Minho prepara algunos platos asiáticos para que pueda probar algo nuevo, yo preparo platos típicos españoles para que ellos puedan degustarlos. Decido hacer croquetas, una de mis especialidades, en Corea he echado de menos el jamón serrano. Preparo la masa, la dejo enfriar en el congelador durante unos minutos y formo las bolas. Lino me observa con curiosidad, tratando de descifrar que es lo que estoy haciendo. Le pido ayuda para empanar las y una vez listas, las freímos.

–Ten cuidado que quema– le advierto antes de darle la mitad de una.

Minho sopla levemente la croqueta y le da un mordisco pequeño, enseguida empieza a hacer figuras con la boca, mira que le he dicho que quemaba. Durante unos segundos degusta el trozo que tiene en la boca, de repente abre los ojos sorprendido y se mete el trozo restante, ignorando lo caliente que está.

–Esto está buenísimo– dice con la boca llena –Necesito la receta–

–Podría dártela...– murmuro sonriendo de lado –Pero no te saldrían igual que a mí, así que solo perderías el tiempo–

–¡Oye! ¿No has oído eso de que el alumno supera al maestro?– comenta Lino alzando las cejas –Dame la receta y ya verás como te supero–

–Bien, inténtalo– me limito a decir mientras agarro un papel.

Hold Me (Felix, Stray Kids)Where stories live. Discover now