Hold Me (Felix, Stray Kids)

Capítulo 27

Ser expuestos ante todo el mundo, de una manera tan personal, causa verdaderos estragos. Esta última semana ha sido la más larga de mi vida, he recibido mensaje de odio, insultos, amenazas y me he visto acosada por cientos de periodistas que querían mi versión de la historia. Pero ¿para qué esforzarme en demostrar que no soy la persona que dicen? Al final, todos van a acabar creyendo lo que les da la real gana.

Los abogados de la empresa han sido muy amables y se muestran positivos a pesar de no tener pruebas contra Dispatch por la intrusión en mi casa y el posterior robo de mi cuaderno. Dicen, que aún así, tienen todas las de perder por atentar contra mi vida compartiendo cosas privadas mías y sin mi consentimiento, pero que el proceso puede ser largo. No se así estoy lista para sentarme frente a un jurado y enfrentar a los miembros de esa maldita empresa que pretende joderme la vida. Al menos, aún tengo tiempo para prepararme mentalmente, la guerra justo acaba de empezar.

Tanto los chicos como mis amigas me han impedido encerrarme de nuevo en mi burbuja, y han estado día sí y día también haciendo planes conmigo, para mantenerme alejada de las redes y ocupada en otro cosa que no fuera sobrepensar en todo lo que está sucediendo. Incluso me han medio obligado a hacer el tour, cuando yo me negaba a acompañar a los perdidos para no darles problemas en unas fechas tan importantes. El señor Park influyó también en mi decisión de no acompañarlos, presionando me de manera que, infundió en mí el miedo a que por mi culpa la carrera de los chicos se viniera a pique.

Pero el grupo siempre está por encima del manager y dejaron claro que sí no los acompañaba al tour, cancelarían todas las fechas. Así que JYP no tuvo más que aceptar y yo he tenido que resignarme y aún sin ganas, venir con ellos.

Hoy es el primer concierto, la primera fecha en Seúl. Llevamos desde bien temprano en el Jamsil Indoor Stadium, el estadio más grande que he pisado en mi vida. Tiene una capacidad de 13 409 personas y los perdidos han conseguido vender todas y cada una de las entradas en las tres fechas que hay, así que, estará literalmente a rebosar. A estas alturas los nervios están a flor de piel y las cabezas están centradas en que todo salga bien, algo que hace que se autoexijan demasiado.

Las pruebas de sonido y vestuario han sido esta mañana, a penas les ha dado tiempo a parar para comer y aún así, los nervios han robado el apetito a la mayoría. Ahora mismo me encuentro junto a Cielo, comprobando que el escenario, los equipos y todo estén listos. Parte del staff me ha mostrado su apoyo, y me han dejado claro que sí necesito algo, se los haga saber. Creo que han notado que no soy la misma, cualquiera se daría cuenta a estas alturas. Estoy ciertamente irascible y a la defensiva, además de andar deprimida por las esquinas. Es por eso que los chicos y mis amigas se preocupan tanto por mí.

–¿No estás cansada?– me pregunta Cielo después de un rato –Podemos sentarnos un momento y tomarnos algo–

–No me apetece, quiero seguir trabajando– me limito a decir mientras compruebo que los de seguridad estén en su puesto.

–Ruby, no has comido nada hoy...– murmura mi amiga parándose frente a mí.

–Son los nervios, tengo el estómago cerrado– digo mientras miro detrás de ella –Deberías ir a comprobar que los controles de seguridad estén listos, falta poco para que abran las puertas–

Cielo me mira durante unos segundos, sé que está preocupada, pero no necesito que estén encima mía todo el tiempo. Enseguida, mi amiga asiente levemente y se dirige a las puertas del estadio. Aprovecho para escabullirme, unos minutos a solas no me vendrán mal. Me meto en el backstage y busco una esquina solitaria en la que poder tomarme unos minutos de relax, cuando empiece el concierto no tendré descanso, tengo que dar lo mejor de mí para que todo salga bien.