Amores

25 14 0
                                    

BORUTO

Cuando me había despertado, mi amado pelinegro no estaba conmigo a mi lado. Me desesperé sobremanera y fue cuando sentí su dolor y desesperación en mi pecho.

En menos de un minuto me levanté, me vestí y salí de la habitación. Fue cuando sentí sus gritos pidiendo ayuda.

Bajé a las corridas y al ver la escena me enceguecí de furia. Ese asqueroso viejo estaba llevandoselo a la fuerza con él, pero lo despedazaría. La mirada  de Nesh me hizo sonreír, a mí ni me amenazaría con eso de su clan.

Cuando se fue del lugar y mi amado volvía a estar libre, recién respiré aliviado. Shinki estaba en verdad angustiado.

Lo abracé con fuerza y nos fuimos a mi habitación, estaba tan mal que me necesitaba más que nunca.

Una vez en mi habitación, lo abracé con tal intensidad que sentí su amor por mí y su desesperación al ver que Nesh Hyuuga se lo llevaba con él.

Pero ya me ocuparía de Recreación y su administración en otro momento, ahora lo único importante era mi amado Shinki, quien temblaba como una hoja.

Lo abrace y fuí besándolo en el cuello para ir subiendo hasta llegar a sus labios y besarlo con pasión, mientras acariciaba su cuerpo en un intento por relajarlo. Él seguía llorando mientras respondía mi beso con otro más intenso.

Cuando nos separamos para respirar, acaricié sus negros cabellos, mientras él me envolvía con sus brazos acariciándome también. Ambos respirabamos entrecortado.

— Mi amor, no llores más — le decía — Aquí estoy y nunca te dejaré. Respira amor — él me abrazó y undiendo su rostro en mi cuello lloró desconsoladamente.

Nunca lo había visto así, mi amado estaba en verdad destrozado. Nos fuimos a la cama donde nos deslizamos y tras quitarnos las ropas nos acariciamos y amamos mucho más.

Lo tocaba con sensual placer despertando su pasión, al tiempo que iba eliminando su tirsteza. Acariciarlo y besarlo era estar en el mejor de los mundos. Cuanto lo amaba.

El me rodeó con su piernas y me penetró embistiéndome con intensidad. Lento al principio, pero con mayor intensidad a medida que iban pasando los minutos.

Él se derramó dentro de mí y yo sobre su abdomen. Instantes luego nos fuimos a duchar juntos. Cuando salimos ya era de día, pero los dos estabamos agotados y nos sumergimos en la cama a descansar.

Allí me abracé a mi amado pelinegro suplicándole que no me dejara, y que acepte mi ayuda porque no pensaba abandonarlo. Nos casaríamos y nadie, ni siquiera mi padre, podría evitarlo.

Poco a poco me fuí durmiendo, sintiendo cómo mi amado me abrazaba y besaba en la frente.

Cuando desperté Shinki estaba dormido a mi lado, verlo así parecía un ángel. Me moría de amor.

Me levanté y tras vestirme, dejé la habitación para ir a hablar con la gerencia. La furia volvía a adueñarse de mí persona y si no lograba una respuesta satisfactoria, aniquilaría todo el lugar.

Instantes después me encontraba en el despacho del gerente exigiéndole que despida a todos los mozos, que estuvieron anoche y se cruzaron de brazos a contemplar cómo Nesh Hyuuga intentaba secuestrar a mi novio Shinki

Ví que el gerente al principio justificaba a sus mozos, con argumentos infundados. Fue cuando le seguré que iba a destruir la reputación del lugar. Porque si en verdad estaba a favor del secuestro, me aseguraría de acabar con todo.

Fue cuando lo ví cambiar de postura, pero no me convencía y opté por hablar con los jefes quienes no sabían nada. Al enterarse de aquello despidieron al gerente y a los mozos para colocar en esos puestos a personas nuevas.

Pasadas unas cuántas horas pude salir mucho más tranquilo. Shinki me esperaba en la confitería algo preocupado.

Pero al verme felíz me sonrió, tras sentarme a su lado lo sujeté de la mano y me la llevé a mis labios para besarla cerrando los ojos.

Abrí los ojos pero no solté su mano, más aún, la sujeté con mis dos manos mirándolo con amor. Le conté cómo me fue y lo que logré. Jamás me quedaría callado ante lo de anoche.

Desayunamos tranquilos y felices. Shikadai llegó momentos luego angustiado, pero al vernos tranquilos y alegres se notó su cambio de actitud.

Se sentó junto a nosotros y ambos les relatamos lo sucedido. Shikadai abrazó a Shinki prometiéndole que no lo dejaría solo jamás.

— Eres mi hermano Shinki, nunca te dejaré solo tampoco.
—Gracias Shikadai. Gracias por enviar a Boruto aquí....lo necesité tanto....muchas gracias.....

Transcurridas un par de horas Shikadai se fue ya que tenía algo importante que hacer. Shinki y yo nos fuimos a mi habitación a cambiarnos de ropa para ir al ginmasio. Necesitabamos descargar nuestros nervios. Pasar el tiempo con mi amado Shinki era la gloria para mí.

Pero en el camino vimos a Menma y Shikadai juntos, hecho que nos asombró al punto de detenernos para observarlos oculto.

Shinki no salía de su asombro. Estuvimos unos instantes allí, mirándolos besarse con tal pasión que parecían devorarse.

Nunca creí que mi hermano y el primo de mi novio sean pareja. Sonreí felíz. Pero Shinki, en un determinado momento, me sujetó y me alejó de allí diciéndome que era mejor dejarlos solos.

Sonriendo acepté irme con él a donde sea que Shinki quiera llevarme. El ginmasio nos esperaba. Pero al ver esa escena de amor entre mi hermano y el primo de Shinki, me entraron deseos de besarlo.

Por lo tanto, al entrar a nuestra habitación, me avalancé a él para besarlo con voracidad intensa. Por tal motivo el ginmasio tuvo que esperar un largo rato.

Atrapado (SasuNaru) (BoruShin)Where stories live. Discover now