024. Otra vez.

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No puede ver la expresión severa, preocupada y al mismo tiempo sorprendida de Namjoon, porque ha decidido llamarlo de camino al trabajo en la parada de un semáforo, ya no aguantaba la anticipación de contárselo todo

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No puede ver la expresión severa, preocupada y al mismo tiempo sorprendida de Namjoon, porque ha decidido llamarlo de camino al trabajo en la parada de un semáforo, ya no aguantaba la anticipación de contárselo todo.

Han hablado tan poco este último tiempo. También lo extraña en demasía cuando eso sucede. Contarle la historia ha sido confuso, incluso él mismo se ha perdido en ocasiones. Namjoon escucha en silencio y asiente, sólo puede hacer eso cuando tiene mil ideas asimilándose en su cabeza al mismo tiempo. Podría explotarle el cerebro intentando comprender por qué su mejor amigo sigue pensando en su exmujer después de siete largos meses desde que lo abandonó.

—Dime algo —pide Hoseok con impaciencia, deteniéndose en un semáforo.

Primero, me sorprende que el bebé de verdad fuera tuyo. —Hoseok blanquea los ojos—. Mis respetos a la ciencia. Segundo, lamento que hayas perdido a tu bebé así de la nada, me hubiera gustado conocerlo, seguro tenía tus ojitos preciosos. Y tercero, ya manda a la mierda a esa mujer, es momento de avanzar y conocer personas nuevas, por favor. Sal de tu casa y ten sexo con desconocidas. No lo sé. Haz algo.

—Primero —inicia Hoseok—, eres un idiota. Segundo, sí, pero continúas siendo un idiota. Y tercero, no puedo salir a tirar por el mundo, porque ya me olvidé de cómo se hace.

Las carcajadas de Namjoon llenan sus oídos y termina contagiándose.

Es sencillo, cuando encuentres dónde, lo recordarás.

—Hermano, vengo saliendo de una relación monógama de unos largos diez años, donde hasta el sexo se torna monótono. —Guarda silencio durante unos segundos antes de aclarar con algo de vergüenza ante la sinceridad extraña que ha tenido—. Créeme, de verdad, que no lo recuerdo.

Yeun estaría muy ofendida si te escuchara decir eso. —El tono de voz cargado de burla de Namjoon es notable.

—Y me gritaría.

Y te lanzaría un zapato por la cabeza como aquella vez en la fiesta de año nuevo.

—Que mala costumbre tiene, por dios. Una vez me dio con un lápiz labial en el ojo.

¡Lo recuerdo! —La risa de Namjoon se escucha desde Erila y le chirria en los oídos—. El director Kang te ofreció números de ayuda por violencia intrafamiliar.

—Sí, lo recuerdo perfectamente.

La conversación se extiende durante un largo rato. Hoseok utiliza una hora de su horario de trabajo dentro de su vehículo para ponerse al día con su mejor amigo, lleno de sus historias cómicas y sus risas escandalosas que harían doler la cabeza de cualquiera que las escuche juntas.

Sus vidas amorosas siempre han sido opuestas. Cuando uno de ellos está de lo mejor, el otro cae en la mierda más profunda, y es la primera vez en que Hoseok es quien se encuentra en la mierda profunda. No porque está solo, sino porque está confundido y dolido.

Dulces de humo ✎ yoonseok.Where stories live. Discover now