No me llamo Fea

27Invitación de Katherine.

RACHEL.

Me encontraba con mis amigas almorzando en las instalaciones dela universidad, desde que habían comenzado los parciales no habíamos podido hablar y sobre todo porque las carreras de ellas son bastanteaste complejas como para darse el lujo de perder el tiempo, las admiro, por tanto, esfuerzo que le colocan porque aquello no es para todos.

Obviamente nos colocamos al día con todo lo que sucedió, obviamente cayeron patas arriba cuando les conté lo que Dalton había confesado y es que yo incluso sigo sin creérmelo porque el chico están confuso que es casi imposible descifrarlo, a veces está bien y al otro mal.

- No es por ser aguafiestas, pero a esta historia le hace falta un pedazo. – comenta Aiko.

- No eres la única que lo cree porque todo sucedió tan rápido que... saben, jamás se me paso por la cabeza de que yo le llegara a gustar a Dalton, ¿recuerdan al principio de semestre? – todas asienten. – incluso el profesor Adam me advirtió de él.

- Yo digo que todos pueden cambiar. – se encoge de hombros Millie. – tal vez Dalton se dio cuenta que actuaba de mala manera, porque incluso ha cambiado con todas nosotras.

- Cabe esa posibilidad. – dice Viola.

- Yo tengo una pregunta. – Eva levanta su mano como si estuviéramos en clases. – si Dalton nunca demostró buenas intenciones contigo ¿Por qué se volvieron amigos?

- Chicas yo nunca tuve muchos amigos como las tengo a ustedes ahora mismo, mi único y buen mejor amigo era Joey, cuando entre a la universidad aparte de querer cursar mi carrera profesional quería tener amigos, antes de Viola estaba él y entonces... nos volvimos unidos. – me encojo de hombros.

- Es entendible. – asiente con su cabeza Eva.

- Pienso que deberíamos darle el beneficio de la duda. – comenta Alexandra. – tal vez recapacito.

- Si, podemos colocarle una prueba, si la pasa es porque el hombre busco realmente de Dios y quiso componer sus pasos. – dice Viola haciendo que todas soltemos una carcajada.

- Oigan cambiando el tema de Pierre, notemos que nuestra querida Rachel ha cambiado por completo de estilo. – Dice Millie y de inmediato el resto de miradas se colocan sobre mí.

- Es solo ropa chicas. – rio nerviosa. – además no lo habían notado.

- Sabíamos que tenías algo extraño, pero no sabíamos que era. – dice Eva. – pero ahora todo tiene sentido.

- Me gusta el estilo que adoptaste. – halaga Alexander. – grita soy rebelde, pero mi rostro angelical dice que no.

- ¿me veo muy niña? – interrogo.

- Un poco, pero oye, eso no está mal dentro de unos 30 años estaremos anhelando colágeno. – comenta Millie. Haciéndonos rerir. – yo no sé ustedes, pero yo vieja no me quiero ver.

- Debes quemar etapas querida Mille. – le dice Viola.

- No es quemar etapas es algo más de cuestiones estéticas. – se encoge de hombros. - ¿acaso te quiere ver mayor?

- Millie tiene razón Viola, nadie quiere verse mayor bajo ninguna circunstancia, por eso existe el Botox.

- Yo no sé si ustedes recuerdan un capítulo de mil maneras de morir donde una señora se inyecta aceite vegetal.

- ¡Sí! - decimos al unísono.

- Creo que todos lo sádicos y masoquistas nos gustaba ese programa. – comento. – pero debemos admitir que esas muertes eran absurdas.