Insegura (#1 De La Bilogía Emocional)

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¡En estos momentos, odio estos pedazos de tacones!

Les puedo asegurar que este día no entra entre mis favoritos, todo el día e estado padeciendo por los estúpidos tacones o mejor debería decir por las estúpidas ampollas que me salieron por la estúpida quemadura del día de ayer.

Estoy tan molesta.

Y cuando estoy molesta me vuelvo una grosera.

Sigo discutiendo internamente mientras llego a la cafetería de la agencia para comer algo antes de iniciar mi jornada laboral, traigo guindado los tacones en mi mano izquierda mientras que con la mano derecha sostengo mi bolso, sin importarme ni un poco lo que me digan en este mismo instante. Además no hay casi nadie, por lo que me tomo tal libertad de permitir que mi comodidad vaya primero que mi elegancia.

Diviso entre las personas a Corina sentada en una mesa junto al ojiverde y adivinen quien más, Samuel. Camino en esa dirección pero cuando estoy a una distancia prudente de llegar veo un rostro muy desagradable atravesarse en mi camino.

Emilia.

_ Pero que elegancia la tuya.

Señala mis manos, y por acto reflejo yo también me las miro, la verdad no voy a caer en su juego, así que la ignoro y paso por su lado para continuar con mi caminata dejándola ahí parada.

_ Buenas tardes.

Saludo a las tres personas sentadas en la mesa quienes me observan, Samuel me sonríe para rodarse y darme espacio para que así pueda sentarme a su lado cosa que le agradezco con una sonrisa.

_ Que te paso?.- pregunta corina.- porque traes los zapatos en la mano, Keny?

_ Tuve un accidente con un poco de café, fue una quemadura leve.

_ Necesitas ayuda con algo?

Miro a Corina con los ojos entrecerrados, quiero decirle algo con respecto a su abandono el día de la fiesta pero no me atrevo porque me da mucho pena.

Al carajo.

_ Ni me hables, me abandonaste en plena fiesta.

Me quejo y está se sonroja.

San pancracio, pero que estas haciendo?

_ Lo siento tanto keny, me fui a bailar con Brian y se me olvido...

_ Como se te va a olvidar?

Miro a samuel quien me a quitado las palabras de la boca y sin saber que agregar, me quedo esperando la respuesta de la pelinegra cruzada de brazos.

_ Tranquilo hermano, aparte no estuvo tan mal... Estuvieron juntos.

_ Solo por eso te perdono.

Corina me da una extraña mirada que no se descifrar y me concentro en el menú. Necesito comer algo, para calmar mi mal humor, me decido por una lasaña y cuando voy a ir a buscarla Samuel me lo impide con una sonrisa.

_ Dime que quieres y yo iré a buscarlo, no lastimes más tus pies.

_ Gracias... Quiero lasaña y jugo de naranja.

El afirma, y yo finjo buscar algo en mi bolso para ocultar mi sonrojo de las dos personas curiosas que se encuentran en la mesa.

_ Hey keny.- llama mi atención.- quería preguntarte algo?

Afirmo hacia Corina, mientras Samuel coloca la bandeja frente a mi y le sonrió a modo de agradecimiento.

_ James y tu son?