Recogí mis cosas, la clase había finalizado. Salí del salón después de que mis compañeros lo hicieran, vi la hora en mi reloj eran las siete y cuarto, ya estaba anocheciendo.
Afortunadamente durante el día no me había cruzado con el idiota de JiMin, suficiente había tenido con el día anterior. Anna me reclamó cuando llegó a casa y me encontró viendo una película en la sala de proyección, no le agradó el que me hubiese ido, ella sabía que había mentido para poder largarme de allí.
El motivo no fue porque ella intentara coquetear con Park SungJun disimuladamente, que obviamente todos nos dimos cuenta.
La verdad era que si seguía escuchando la ridícula voz que hacía la novia de JiMin cuando le decía algo a este, en cualquier momento yo iba a vomitar sobre ella.
Esa chica debía tener un problema.
Así que se me ocurrió la brillante idea de inventar que debía ir urgente a mi apartamento, tuve suerte de que SeokJin me haya llamado en ese instante y llamé un taxi luego de terminar de hablar con él.
En fin, había liberado a mis oídos de aquella tortura.
No habían casi estudiantes por el pasillo, tomé el ascensor para bajar a planta. Salí del edificio y me di cuenta que HyunJin venía hacía mi, al parecer la suerte no estaba completamente de mi lado, ni siquiera la miraría.
Cuando pasó por mi lado para entrar al edificio, soltó un bajo 'cualquiera' pero que escuché perfectamente. Me volteé para verla.
–¿Qué dijiste? –Ella se frenó al escucharme y se giró.
–Que eres una cualquiera. –Ese tono altanero no me gustaba para nada, sonrió con suficiencia.
Decidí acercarme a ella y esta retrocedió dos pasos, al parecer no se dio cuenta, porque intentaba seguir con aquella actitud victoriosa, yo la superaba un poco en altura. Claramente no se esperaba que la afrentara.
–¿Cómo estás tan segura, cariño? –Sonreí sarcásticamente.
–El trimestre que no cursaste completo fue porque te buscaste un hombre con dinero, para usarlo como a los otros, pero no contaste con que era un mafioso y el jueguito te salió mal. Todos lo saben.
Ese rumor era el más absurdo que había escuchado, siendo una total mentira. No le había prestado atención cuando lo escuché en principio, pero el que ella lo dijera tan segura como si fuera verdad, me molestaba muchísimo.
Miré a mi alrededor y no habían personas cerca, así que me acerqué más, tomándola bruscamente de la mandíbula con una mano, casi clavándole mis uñas pintadas de un hermoso rojo brillante, en su rostro de porcelanita. La chica abrió sus ojos de impresión y miedo.
–Debes aprender a cerrar tu boca, cariño. Te puede ir muy mal. –Enseguida la solté pero no por decisión propia, sino por algo o más bien alguien.
Sentí que me tomaban por la cintura haciendo que me alejara de la chica y reconocí la figura de JiMin frente a mi, asegurándose de que su novia estuviera bien. Volteé a ver quien me sostenía y era mi cuñado, le di un golpe con el codo para que me soltara y este lo hizo inmediatamente, quejándose de dolor.
Cuando volví mi atención a la escena de los enamorados, JiMin se plantó frente a mi, mirándome molesto.
–No te atrevas a tocar a mi novia nunca más, Won, tienes suerte de que seas mujer. –Me señalaba con su dedo mientras hablaba, mantenía sus ojos fijos en los míos y yo le mantuve la mirada. Me reí en su cara y eso lo molestó aún más.
–Que caballeroso Park, lo esperaba viniendo de ti. –Hablé con un falso tono de admiración, le eché un vistazo a la chica detrás de él, se tocaba la cara y tenía la nariz roja por las lágrimas que había soltado. Patética. –Tu noviecita no debería ir por ahí soltando insultos a personas que no conoce, no sabe como éstas puedan reaccionar. –Volví a mi tono habitual y mi expresión seria.
El chico no dijo nada y simplemente me miró por unos segundos más, antes de volver con su novia para abrazarla.
Me giré y HoSeok sólo se apartó de mi camino, me di cuenta que NamJoon y YoonGi estaban un poco más alejados observando todo, el primero con una expresión incrédula y el segundo con una tenue sonrisa en sus labios, al llegar a ellos le sonreí como si no hubiese pasado nada y estos me devolvieron el gesto mientras se inclinaban levemente.
Caminé hasta el estacionamiento a paso rápido, estaba haciendo algo de brisa y yo sólo cargaba un vestido. Me subí a mi Jeep y arranqué.
Me vería con Jin en un restaurante y ya me estaba esperando. No habíamos salido a comer juntos en un rato, los dos estuvimos ocupados estudiando y sólo nos veíamos de vez en cuando en la universidad.
Él era mi único amigo hombre o en general realmente, no me llevaba bien con las chicas y con el sexo masculino, a excepción de él, solo tenía conocidos.
Nos habíamos conocido en el último año de instituto, un día intentó besarme, yo lo golpeé y desde entonces éramos amigos.
Llegué al sitio, entré y enseguida lo divisé en una de las mesas del fondo. Me acerqué y levantó la vista de su teléfono, sonriendo al verme y me senté en la silla frente a él.
–Nam, me acaba de contar que casi le arrancas la cara a HyunJin –me encogí de hombros– Me dijo que es lo más sexy que ha visto hasta ahora, por cierto ya pedí la pizza. –Reí y este me imitó.
Cuando entré a la universidad, hace dos años, NamJoon fue el primero en hablarme, seguido de YoonGi y me cayeron bien, por eso no los alejé. Nam intentó salir conmigo pero lo tuve que rechazar aunque era un buen partido, no me gustaba y no quería hacerle falsas ilusiones, a pesar de eso siguió tratándome como siempre. Era un buen chico.
–Esa chica no sabe con quien se metió, lástima que llegó el estúpido de Park. –Bufé.
–Tantos años y aún no entiendo por qué te cae tan mal–. En eso trajeron nuestra comida y procedimos a tomar cada uno, un trozo.
–Por existir. –Dije antes de llevarme el pedazo de pizza a la boca, Jin soltó una risa por mi comentario.
-¿Qué te hizo su novia, entonces?
–Me dijo que era una cualquiera y mencionó el rumor ese del mafioso. –Negó con la cabeza, mientras tragaba.
–En ese caso, bien hecho, Cassie. Por cierto, no me has contado como estuvo la reunión de ayer.
–Pues, nada del otro mundo. Anna intentando atraer al señor SungJun a sus redes, lo que hace con todos.
–¿Crees que tu mamá quiera algo con él para sacarle dinero?
–Eso es obvio, el que estén hablando después de tanto tiempo, me parece extraño –tomé de mi bebida y proseguí– además ella sabe que no le daré dinero para sus caprichos y me estoy encargando de que EunBi no ceda.
–Entonces próximamente serás como la hermanita de JiMin. –Habló burlón y yo rodé los ojos.
No emití ningún comentario.
–Oye, quizás HyunJin te insultó porque cree que puedes llegar a meterte con su novio. –Dijo, encogiéndose de hombros, luego de unos minutos en lo que sólo nos concentramos en comer. – A lo mejor le diste alguna miradita y ella solo quiso marcar territorio.
–No lo miré en todo el rato que estuve allí, a excepción de cuando llegaron. Creo que primero coquetearía con ella que con él –Pensé en lo que acababa de decir, en la chica y su voz chillona–, Retiro lo dicho. –Negué con la cabeza.
–Con que te van las mujeres ahora. –Bromeó
–No me van y si lo hiciera, definitivamente esa chica no estaría en mi lista de conquistas. –Rió. No hizo más comentarios con respecto a eso y cambiamos de tema.
Terminamos de comer y al salir del local, me acompañó hasta donde había estacionado mi auto. Me subí y encendí el motor, bajé el vidrio para verlo y despedirme.
–Conduce con cuidado, Cassie. Mañana tampoco tengo clases, evita meterte en problemas. –Alzó su puño para que yo lo chocara y lo hice.
–Hablas como que si mañana yo fuera a buscar a la noviecita de Park, para golpearla. –Lo miré mal.
–Acassia... –Me miró suspicaz.
–Sabes que no lo haré.
–No he dicho nada, linda. –Sonrió inocente y yo le saqué el dedo del medio. Movió la mano despidiéndose e hice lo mismo antes de arrancar.
En el camino iba pensando en lo que había pasado hace unas horas, era la primera vez que JiMin y yo nos dirigíamos la palabra.
Sólo esperaba no encontrarme a la castaña en lo que restaba de semana, pero sabía que era imposible si estudiábamos en el mismo edificio. No sé quién se creyó que era para hablarme de esa manera, creía que podía tratar a las personas como se le diera la gana, sin conocerlas. Estaba muy equivocada.
El rumor trataba de que supuestamente me había metido con un hombre de dinero, este, como andaba en negocios sucios lo encarcelaron y yo tuve que irme por un tiempo para que no me involucraran con el sujeto.
No sabía quien había inventado aquel rumor, que corrió hace un tiempo, pero debía admitir que tenía mucha imaginación. Todo fue debido a mi inasistencia durante la mitad del trimestre anterior. Al ser una alumna algo destacada se notó mucho mi ausencia. Pero no fue causada por eso, ni por ninguna otra estupidez que circulaba por allí.
La razón de mi falta fue porque tuve una muy fuerte discusión con mi madre y exploté, justamente sucedió en la fecha de aniversario de muerte de papá. Así que me fui a Brasil por casi un mes, sin importarme nada.
Aquel país era mi sitio de escape y necesitaba alejarme de todo. EunBi me llamaba todos los días llorando pidiéndome que regresara, lo medité y volví.
Anna me pidió disculpas, nada sinceras, pero decidí no darle más importancia al asunto y lo dejé estar. A pesar de todo, era mi madre y tendría que tolerarla aunque, a veces, lo que más quería era sacarla de mi vida.
Mi hermanita era la que me contenía de hacer muchas cosas.
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Espero les haya gustado. Gracias por leer💜