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Caroline:

     Las chicas eran geniales. Almas libres a las que les daba igual la opinión de la gente, en especial la de los "civiles". No eran solo "mujeres de moteros", eran madres, dueñas de sus negocios y las que movían los hilos en la sombra.

     Reconozco que de joven no las habría mirado siquiera. Ellas habrían sido lo más opuesto a mí. Les habría tenido pánico. 

     Eran hermanas, con todo cuanto aquello conllevaba. 

     Así pues, y aprovechando el viaje super secreto de mi "hombrecito", me fui a dar una vuelta con ellas.

     Lisa y Abbie eran las más antiguas, por así decirlo. Lisa se fue a vivir con Sniffer como a los seis meses. Tendría unos diecinueve años. Abbie era solo trabajadora del club cuando conoció a Bear. Tenía una relación muy tóxica. Fue madre cuando Steelo tenía unos dos años o así. Entonces lo dejó con el padre de su hija y su mayor preocupación pasó a ser la pequeña Sophie. Se sentía atraída por el motero, pero su hija era lo primero. Además tenía miedo de que le partieran el corazón o de que Bear no aceptara a la niña. 

     Por fortuna sus temores eran infundados. Bear y Sophie hicieron muy buenas migas hasta tal punto que él la adoptó. Para la niña, unos cuatro años menor que mi hija, no hubo otro padre que el rudo motero.

     La historia de Sniffer y Lisa me conmovió bastante. Eran esas almas gemelas que solo se encuentran una vez en la vida, pero cuando quisieron ser padres al destino le dio por burlarse de ellos. Lisa estaba tan deprimida que de no haber sido por las mujeres del club a estas horas, posiblemente, no estaría con nosotras. Fue cuando Sniffer tomó la decisión de pedirle ayuda a Timber. Ambos guardaban cierto parecido. Altos, rubios, de ojos claros y una corpulencia similar. Su hijo, Brooks, nació unos ocho meses después. Tras un embarazo de alto riesgo.

     Y así, con la confianza establecida entre todas fue cuando me atreví a contarles los planes de mi hombrecito.

— Pues, sí que va en serio— habló Abbie con sorpresa—. Quiero decir, ya el simple hecho de rescatarte del cabrón de tu futuro ex fue motivo más que suficiente para saber que no eras mujer de una noche para él.

— Vaya... Gracias— arrugué la nariz en gesto contrariado.

— No te lo tomes así. Mike lo pasó fatal con lo de Kate y se negó en redondo a volver a tener una relación con alguien. Muy de vez en cuando tenía alguna cosilla, pero era algo mecánico... Ya sabes. Me alegro mucho que quiera reclamarte.

— Por cierto, ¿te ha contado ya de qué va el tema? — Preguntó Lisa.

— No, pero supongo que tendrá que pedirme salir y eso...

     Las dos se miraron unos segundos y estallaron en carcajadas.

— Sí, bueno. Eso está más que claro, pero antes hay que pasar un "proceso" por llamarlo así. Consiste en la reclamación de la dama.

— No me gusta por dónde van los tiros. ¿Qué queréis decir con "reclamación de la dama"?

— Básicamente es porno en directo. 

— ¡Oh, Dios mío! ¿Es lo que hicieron Steelo y Timber con mi hija?

— Sí— respondió Lisa—. No solo lo aceptas a él. También tienes que aceptar al club. Pero, tranquila. Será como una peli erótica para todos. Contáis con un testigo que ve en directo... Ya sabes... El resto solo asiste sin ver gran cosa. Puedes elegir que tu testigo sea una mujer en lugar de uno de los hermanos.

— No creo que pueda...

— Tranquila. Nadie te hará sentir incómoda ni nada por el estilo. 

— También puedes elegir no hacerlo, pero entonces no se te reconoce como familia del club o "propiedad privada" del motero.

      Las chicas cambiaron el tema de conversación a algo más insustancial mientras mi cabeza trabajaba a pleno rendimiento con el proceso de admisión a los Bombers.


Michael:

— El día en que todo se torció— nos contaba la Reina—. Comenzó con una reunión a puerta cerrada. Luego me llegaron los rumores de una terrible pelea entre mi marido y BQ en la que también se vio involucrado Crossbow. Pero, antes de que Steelo me pudiera contar qué había pasado, Amber vino a visitarme para decirme que Hiena era hijo de mi marido y que esa era el motivo por el que le habían expulsado junto con Crossbow. Los dos habían agredido al presidente. Me lo creí porque Amber no había parado de coquetearle a Steelo. Ni siquiera delante de BQ. Así que eso fue lo que originó la crisis de los Bombers y que nos separáramos. Sweet y Timber eran el pago en sangre. Desde ese momento quedaron bajo la estricta vigilancia de BQ... Yo pasé a ser su puta.

— Y, ¿si te dijera que todo eso es pura mierda? — Coyote tomó la palabra tras soltar el humo de su cigarrillo—. Steelo contactó contigo y te pidió que controlaras a BQ, ¿no?

— Sí, fue cuando Sweet comenzó a pasarle información y eso.

— Charlize, entre Hound y Amber nunca hubo nada. BQ era el padre de Hiena. Y sí, desde muy niño lo envenenó contra los Hillstrandt haciéndole creer que Hound era el responsable de la muerte de Amber. Labor que continuó Betty con los mejores resultados. No, mi Reina. Disfrazaron de líos de faldas lo que era algo aún más gordo. Por aquel entonces, según toda la información que logré reunir de Sweet, de Hound, Crossbow y del propio BQ, el club estaba abocado a desaparecer y necesitaba fondos con urgencia. Hound y Crossbow propusieron ganarse a la comunidad con trabajos para ésta. Rifas benéficas y otros trabajos legales: Bares de copas, armerías, casas de empeño y de apuestas, clubs de striptease. Fondos legales que llevaría un tiempo reunir. BQ, que ya tenía a los cómplices de su negocio, dijo que no. Hacía falta hacer algo y hacerlo ya. Así que propuso que los Bombers se aliaran con bandas latinas, narcos, proxenetas, traficantes de órganos y de niños. Así, en pocas semanas tendrían, no solo los fondos, sino el control de extensas zonas de dominio. BQ quería proporcionarles a los peces gordos del cine y de otras áreas de la sociedad civil, el joven producto con el que saciar sus asquerosos vicios. Ya contaba con esbirros entre los porkies, fiscales, jueces, políticos... El dinero del club se había agotado por las enormes cantidades utilizadas para comprar a todo aquel al que pudieron comprar... Hiena tomó el relevo tras el asesinato de su padre y comenzó a expandir el negocio hacia Europa y Oceanía. Los distribuidores de armas y blanca eran un club de Irlanda.

— Por el puto Dios del Pistón... Dime que Timber está al tanto...

— Sweet está muerto, ¿no? Hiena y Ulises Tautópolis pagaron para matarlo porque se enteraron de que Sweet le iba a dar todas las pruebas a Timber de aquellos negocios.

— Entonces tienes que venir conmigo a la sede y mostrárselas tú...

— Y, ¿Cómo se supone que tengo que hacer todo eso? Las malditas pruebas desaparecieron junto con Sweet. Yo soy objetivo a batir para los tuyos. Estaría jodidamente muerto antes de que pudiera abrir la maldita boca.

— Tenemos que redimirte entonces a ojos de los Bombers y de los Devils— concluyó mi abuela.

— ¿Alguna idea? — Pregunté yo.

— Bajar al puto infierno e intentar sobrevivir. Solo. 


— No tienes que hacerlo tú solo— le dije a Coyote antes de que nos fuéramos cada uno por su lado tras irnos de casa de la Reina.

— Escúchame bien porque esto te lo voy a decir una sola vez. Nos hemos jodido mutuamente y yo la maté de forma accidental tras enterarme de todo cuanto te hizo. Pienso pagar por ello, Michael, eso no lo dudes por un segundo. También se la debo a tu padre y a Steelo. No tengo ninguna opción de supervivencia porque mi camino debo hacerlo yo solo. Pero, si algo me pasa te mandaré los contactos que tengo en Irlanda para cortar la ruta europea... Lo demás tendrás que hacerlo solo. Espero que nuestros caminos no vuelvan a cruzarse porque eso significará que por fin me han pillado. Ve con tu mujer y hazla feliz pensando en mí.

Mommy's little manWhere stories live. Discover now