Capítulo 40: Encerrada

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Me volveré loca 😢

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--Mientes-- dijo frío. Muy en el fondo sabía que tenía miedo. Que todo lo que le había dicho lo puso alerta, tal vez no todo sea lo que está pasando en realidad, pero, en el fondo no estoy mintiendo en cuanto a ella, es verdad que tengo dos nombres y tal vez uno sea para mi vampirismo y otro de mi locantropia.

Agradecía que pocas personas conocieran mi segundo nombre, ahora podía decirlo sin el miedo de que descubran que soy yo, y no por mi sino por mi bebé.

--No miento-- volví a adentrarme a la selda-- pregúntale a tus hombres sobre esa loba.

Empezó a hablar con ellos y con aquella bruja de cosas que no entendía y la verdad no me importaba, me senté en el suelo frío recargada contra la pared, mi embarazo me cansaba como no tenían idea.

--No siento nada-- dijo de repente aquella bruja-- no tiene lobo mi señor al igual que aquel muchacho-- entonces mis labios se curvaron en una sonrisa burlona que sólo podían verla las personas con quienes compartía el lugar, pude ver como Sam me miraba atentamente.

--Eso es porque mi padre era humano, no creo que me hayas traído aquí sin antes consultar todo de mi-- le dije-- mi padre anunció toda mi historia el día de mi coronación.

--En primera, no es tu padre sino tu abuelo. En segunda no me creo esa historia-- dijo el supuesto alpha.

--Si es mi padre, independientemente de que ellos sean mis abuelos, Damián y Ester Valducier me criaron.

--Criaron a una mocosa bastarda-- estúpido, mandamás porque me tienes de este lado de esas rejas sino ya te habría matado<<pensé.

--Al menos mi sangre es pura no como otros-- le dije burlona.

Su rabia se podía sentir en el aire, en verdad a mi me gustaba ver el mundo arder, nunca aprendía por más que mis padres me regañaran.

--Sólo te voy a volver a decir una cosa, te has metido con Grace Janer y conmigo; Aneu Valducier, atente a las consecuencias. Pondre a todos los vampiros del mundo en tu contra-- dije sinica, volte a ver a los traidores que lo acompañaban-- al menos a la mayoria -- fue lo último que dije estuvieron un rato más tratando de que hablara y no dije nada más, antes de que se marcharan ordene que me trajeran algo de comer "una hamburguesa " fue lo que dije y eso logró todas las miradas en mi, incluyendo a mi abuela... era raro decirlo así ya que nunca me imaginé conocerla en este estado, aunque ellos no saben quién soy yo si se quienes son ellos y la verdad me duele, logre ver su cabello color chocolate y unos ojos verdes, un verde intenso como el de mi padre, Sam y... hasta podría decir que del mío, ahora sabía de donde venia esa herencia, su piel blanca nada más por sus ropas que no la dejaban ver su hermosura.

Dirijo mi vista a mi abuelo perdiéndome en esos ojos que eran como el mar azul, podía ver un hombre de porte elegante y supe que en sus años de juventud fue el más guapo de todos, su cabello castaño; la viva imagen de Jack, creo que él estará feliz de pasar tiempo con él.

También teníamos a otra señora que se veía más joven aunque su mirada reflejaba cansancio y resignación de que su vida se acabaría en esta mugrienta selda; su cabello rubio y ojos color miel destacaron por sobre todos, no podía negar que era atractiva y por un instante me alegré. Tal vez ella y papá podían darse una oportunidad... a lo mejor está vez si pudieran ser felices.
Para finalizar todo tenía a Sam un hombre atractivo que han ocultado de todas las mujeres en el mundo, una abominación que debíamos solucionar a como diera lugar. Quería que él encontrase a su mate para que ya lo estuviera triste.

No pude contener unas lágrimas rebeldes, sentía impotencia y miedo.

Logré levantarme y secarme la cara.

--Ante cualquier situación los modales deben seguir, un placer conocerlos mi nombre es Aneu Valducier, hija de Ester y Damián y ahora la reina de toda la raza vampirica-- hice una reverencia-- también son luna de lunas-- se sorprendieron por mi brutal confección-- así que tal vez por eso estoy aquí. Yo se que no les agradan los vampiros pero mientras este aquí no haré nada malo, ahora somos compañeros de lugar así que hay que llevarnos bien.

--¿En verdad te llamas Aneu?-- preguntó mi abuela.

--Si, así me llamo.

--Es raro-- susurró.

--¿Por qué es raro? No es un nombre común pero me gusta-- le dije.

--Es verdad todo lo que dijiste-- ahora era mi abuelo el que hablaba pero con un tono muy serio que me dio miedo.

--¿Qué cosa exactamente?-- pregunté avergonzada.

--Lo de la tal Grace, ¿o lo inventaste?-- pregunto. Ok... me intimida-- ¡contesta!

--¡Si señor!-- me puse en fimes y lleve mi mano a la frente como un saludo militar-- ¡no fue mentira lo que dije, señor!

La señora que yo suponía que era la mamá de mi hermano empezó a soltar carcajadas.

--No dejes que te intimide así es de firme-- me acerque y le susurre.

--Debo decir que a la única persona que le temo es a mi padre y ahora a tu abuelo también--se tenso ante mis palabras.

--¿Cómo sabes que es mi abuelo?

--De la misma forma que se que tu lobo no está muerto-- hable-- es verdad, usted tiene otro nieto, y es la mayor, nació antes que Sam-- me dirigí a él-- y no se si lo acepte o no... Lanira dijo que no pero tal vez cambie de parecer cuando la conozca.

--¿Quién es Lanira?-- pregunto mi hermano.

--Tú guardiana...

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Les dejo otro capítulo.

Perdonen la tardanza...

Muchas gracias a esas personitas hermosas que llegaron nuevas a leer mi historia.

Besos

❤🌞

¿Vampiros? Mi Mate (Corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora