Academia Mundial [ArgChi]

Capítulo 19

P.O.V Manu

Igual me terminaron disculpando, si yo sé que en el fondo me quieren los muy weones.

Cuando hicimos una llamada grupal por Skype, les presenté a Tiare, ya que ella quería conocerlos, mis amigos se indignaron por no haberles contado de ella.

Tiare desde que supo que iría a la academia quiso venir conmigo, aunque no tuviera el mínimo de edad, pero si todo va bien la aceptarían en uno o dos años más.

Le conté que básicamente era como un colegio común y corriente y como que de repente ya no tenía tantas ganas de ir.

En las vacaciones me las pasé de viaje, de aquí para allá y de allá para acá por lo que no pude hablar mucho con los chicos, o al menos no por llamada, ellos a la vez me contaban de lo que hacían, la Coco se fué de viaje por casi un mes a Estados Unidos así que con ella no pude hablar mucho, en cambio Juan se la pasó en la casa de sus abuelos.

Tan rápido pasa el tiempo que ni me di cuenta cuando ya faltaba solo un mes para irme de nuevo, la verdad es que más que nada, me daba paja el viaje, no me gustaba mucho andar en avión y el primer viaje hacia España fue terrible.

Mi hermana me rogaba que no me fuera de nuevo, pero no tenía opción, mi papá ya estaba comprando mi pasaje de avión con anticipación.

El Juan estaba en las mismas, ya estaba reservando vuelo y preparando sus cosas para volver, la Coco en cambio ya tenía todo listo desde casi principio de vacaciones (lo cual para mí y para el Juan es una exageración), toda la preparación para volver a clases me estresaba, y no lo digo por las clases en sí, sino el tener que irme por tanto rato, aunque igual quería ver a los chicos.

Ya solo faltaba un día, tenía todo listo repartido entre dos maletas medianas y mi mochila personal, se me ocurrió la brillante idea de no dormir hasta mañana para así acumular sueño y poderme dormir en el avión.

La Tiare no se me ha despegado de encima desde hacía una semana, incluso me preguntó que si se podría ir conmigo escondida en la maleta, a lo cual mi respuesta fue obvia.

Me fui a acostar lo más tarde posible, me quedé leyendo hasta más o menos las 3:30 de la mañana, el sueño ya me estaba ganando, intenté leer un poco más pero mis párpados me pesaban hasta que me rendí y guardé mi libro.

Empecé a usar mi celular para ganar tiempo, aunque no gané tanto porque ya casi a las 4:15 me quedé dormido, estuvo bien ya que tendría un poco menos de dos horas de sueño y con eso me bastaba para dormirme en el avión.

Mi alarma sonó a las 6:00 y me levanté para ducharme, vestirme y tomar desayuno, entré todo eso casi me duermo unas dos veces parado.

Mi hermana aún dormía cuando yo y mi papá nos fuimos al aeropuerto.

Como siempre, entregué mis maletas, me despedí y pasé por guardia nacional, ahí me quedé esperando la media hora que me faltaba para embarcar.

15 minutos antes de que el avión despegara me subí y busqué mi asiento, me senté y me puse los audífonos para escuchar música, no alcanzó a sonar la segunda canción cuando el cansancio me ganó.