¿Qué se siente al ser eterno? (Paulo Dybala)

Capítulo 97

- ¿Preparado?

- No mucho, es mi último partido con la Juventus.

- Lo harás bien, tú tranquilo.

- Oh sí, jugar una final de nuevo con el Real Madrid y encima ya soy su jugador.

- Vas a jugar contra tu equipo, eso es algo para contar.

- Y que no quiero hacer.

- Tienes que ganar esta Champions eh.

- Papá, papá, mira.

Zoe alzó sus brazos y saltó, entonces Higuaín la agarró de la cintura y la elevó, haciéndola reír. Cuando la bajó ella fue corriendo a abrazar a su padre, que también la levantó a la misma altura que Higuaín.

- ¿Quién es mejor?

- Yo, claramente.

- Callate, pipita.- Paulo miró a Zoe y ella le sonrió.

- Tú.- Paulo levantó los brazos victorioso e Higuaín se cruzó de brazos.

- ¿Y tú qué piensas, Gio?

- ¿Yo? Pues...

- Gio, andiamo. (Gio, vamos.)

- Me llaman.

Les sonreí y salí corriendo donde estaban Brina y los demás, yendo con ellos hasta la habitación de la rubia y ya allí recogimos algunas cosas.

Ya hacía un mes desde que Paulo y yo volvimos a ser pareja y ahora mismo estábamos en Milán, donde se haría esta vez la final de la Champions, de nuevo, Juventus contra el Real Madrid. Y yo había venido junto con Pablo, Stella y Marco a verla, además de los niños, y quise ir al hotel para desearles suerte a todos antes de que se tuvieran que preparar para el partido.

Bajamos de la habitación y me encontré a Buffon hablando con Lucas, o más bien riendo, y Zoe con los mismos con quienes les dejé antes de irme.

- Chicos, nos vamos a tener que ir ya pronto.

- No quiero.

- ¿Por qué?- preguntó Paulo haciendo un puchero y yo le abracé por la cintura, sonriéndole.

- Porque os tenéis que concentrar.

- Yo me concentro con vosotros.

- Pues eso no puede ser eh.

- Venga Dybala, que vamos a por tu primera Champions.- dijo Cuadrado apareciendo y el argentino le miró de mala manera.

- Lo dijo quien también la ganó.

- Touché.

Reí levemente y negué con la cabeza. os do siguiern discutiendo y yo mientras me separé un poco de ellos, quedándome con Higuaín y Zoe hasta que vi que ya era hora de irnos.

- Bene, nonno, dovrai lasciarmi a Lucas che dobbiamo andarcene adesso. (Bueno, abuelito, vas a tener que dejarme a Lucas que tenemos que irnos ya.)

- ¿Di già? (¿Ya?)- miró la hora en su móvil y suspiró.- Va bene e sai che non dimentico il nonno. (Está bien y que sepas que no olvido lo de abuelo.)

- Ti amiamo. (Te queremos.)

Dije riendo mientras que se despedía de Lucas y luego le abracé, volviendo a donde estaba Higuaín y me despedí de la misma manera, ahora yendo hacia donde estaba Paulo aún discutiendo con Cuadrado y les agarré de las orejas.

- Vale, a ver vosotros dos, quiero que ganéis, ¿Entendido? Yo soy del Real Madrid pero esta copa es vuestra, ¿Vale? La copa es bianconera.

- Entendido.- dijo un dolorido Cuadrado.