Kaio Shin x reader: Chit chat.

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Vamos. No puedo ser la única persona a la que le gusta el pobre e infravalorado supremo kaio Shin. Este pequeño necesita más amor.

En esta historia tu eres el supremo kaio del universo 6 que está atado a Shampa.

Esta historia fue creada para poder ser leída por cualquier persona: Hombre, mujer, género fluido, no binario, agénero, etc.
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Como era frecuente, tu te encontrabas yendo de visita al planeta del señor Shampa y la señorita Vados con el fin de controlar el entrenamiento de este. Aunque, al llegar ellos te informaron que se encontraban a punto de ir al universo 7.

Con muy poco entusiasmo, decidiste informarles que vendrías a verlos otro día para no irrumpir en su misión, cuando la señorita Vados te detuvo a mitad de tu salida.

Puede venir con nosotros si lo desea-dijo acercándose a tu oído- además, mi hermano me informó que el supremo kaio Shin se encuentra con ellos en este momento, por si le interesa.

Vados era una gran conocedora de tu aprecio y sumo respeto por el pequeño kaio, jugando un poco contigo solo para ver tus reacciones cada vez que este era mencionado.

Esperando tu respuesta comenzó a dirigirse nuevamente al lado de Shampa, quien estaba impaciente por irse a competir con su hermano.

Si ustedes gustan, puedo llevarlos. Llegarán mucho más rápido acompañados de un supremo kaioosama- tratabas de colocar una excusa para ir ocultando tu emoción detrás de tu permanente calmada expresión.

Hm. Sería un honor. Muchas gracias-rió pícaramente el ángel.

Bueno, ¿Qué esperan? Vamos. No podemos llegar tarde- impacientaba Shampa.

Llegaremos en menos de lo que se imagina. Por favor, coloquen sus manos en mis hombros- indicaste haciendo que ellos obedecieran- bien, kai kai.

En lo que fue el cabo de un par de minutos todos se hallaban en el planeta del señor Bills. Que al parecer habría llegado recientemente de la Tierra a juzgar por la inmensidad de platillos exóticos que se encontraba degustando en una mesa al lado del río.

Cuando Bills los divisó, saludo cordialmente a Vados y a ti, mientras que solo dirigió un "eh, ¿tu qué quieres?" a su hermano.

Es un placer verlo tan animado como siempre señor Bills- saludo la señorita.

Es un gusto verlo nuevamente- saludaste con una leve inclinación al dios.

Si, si. Como sea. Pueden sentarse a comer con nosotros- señaló a unos lugares vacíos el señor Bills- tu también hermano. Esos viajes interdimensionales siempre dan hambre.

Hum. Puedes ofrecer lo que sea. Pero nada superará las delicias del universo 6- reprochó a la vez que tomaba un asiento Shampa.

¡¿Eso crees?!- se quejó Bills.

En medio de lo que empezaba a ser una pelea entre los dos hermanos, llegaba el señor Wiss acompañado del supremo kaio Shin. Ambos con jarras de té y unas bandejas con dulces que depositaron en la mesa mientras daban las buenas tardes.

Que lindo es ver a la familia reunida para compartir una exquisita merienda, ¿no les parece?- dijo Wiss.

En efecto. Siempre es lindo convivir un rato, aún con estos dos discutiendo entre ellos a cada momento- tomó un sorbo de su té Vados.

Me alegra poder hablar con usted, supremo kaio Shin- te dirigiste a Shin de forma tímida- hace un tiempo que no nos veíamos.

Por favor, digame solo Shin- insistió amablemente- a mi también me complace saludarte. Momentos como este no pasan muy a menudo.

Ya lo creo. Oí que últimamente las cosas estaban un poco agitadas y...bueno, quise venir a comprobar que todos se encontraran bien- bajaste la cabeza en señal de pena. Aunque Shin confundió este gesto con que encontrabas molesta la situación. Bueno, no sería la primera vez que él confunde tu timidez con enojo.

Realmente me disculpo por los problemas que esto haya podido causar a la alta comisión y a otros universos- inclinó su cuerpo prácticamente a punto de besar el suelo.

¿Qué? Creo que lo ha malinterpretado. No tiene porqué usted disculparse- comenzaste a agitarte.

Tiene razón y lo lamento. Pero sería irrespetuoso si no asumo la culpa como supremo kaio-insistía desconsoladamente el pobre e inocente Shin.

Mientras tanto, Wiss preguntaba a Vados cómo habías llegado ahí.

Como es una persona muy tímida, decidí darle un pequeño empujón. Espero no te moleste hermano- susurraba ella.

No me molesta en lo absoluto. Pero, ¿Crees que esos dos estarán bien solos? Estamos hablando de dos sujetos totalmente puros e inocentes que fácilmente malinterpretan actos de bondad con enojo- dijo refiriendo a la conversación que se llevaba a cabo en ese momento.

Tal vez tengas algo de razón. ¿Deberíamos entrometernos por un momento?-sugirió ella.

Definitivamente deberíamos- terminó su taza de té para luego dirigirse a donde los kaios se encontraban.

¿Cómo les está yendo?¿Ya probaron la tarta de limón? Deberían aprovechar este momento para relajarse del trabajo y comer algo- prácticamente amenazó con una sonrisa el ángel.

Ah. Señor Wiss, muchas gracias por aceptarme en su morada aún sin un previo aviso- inclinaste tu cabeza en señal de respeto.

No hay problema, siempre es un gusto para mi el que nos visites. Además, Vados me informó de que posiblemente vinieras- colocaba su mano sobre sus labios para reír.

¿En serio? En ese caso, me alegra haber venido- esbozaste una dulce sonrisa para Wiss. En ese momento, Shin pudo sentir como algo punzaba en su pecho al verte con Wiss, pero no podía descifrar por qué era. Hasta que volviste a voltear hacia donde él se dirigía.

¿Se encuentra bien? Shin- llamarlo por su nombre parece haberlo alterado por la forma en que se sobresaltó.

S-si. ¿Por qué no mejor comemos mientras conversamos?- cambió rápidamente de tema.

Esta bien- dirigiste tu mirada a la mesa- ¿Qué probamos primero?

¿Qué le parece si probamos la tarta de limón? Bills me dijo que estaba exquisita- tomó un plato con una cuchara para alcanzártelo.

Muchas gracias- dijiste mientras tomabas el plato. Tomaste un bocado y pudiste sentir ese delicioso sabor agridulce de la tarta- que rico, pruebe un poco-acercaste un pequeño trozo a Shin para que lo degustara, haciendo que su rostro se enrojeciera tanto como un tomate.

Con las manos temblorosas, inclinó su cuerpo para tomar el trozo de un bocado entre sus dientes y experimentar una sensación de ardor dentro de sí. Una mezcla de sabores, así como sensaciones, todas provocadas por una persona. Esa eras tú.

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Publicada el 15\02\2018

De Todo X Lectores.Where stories live. Discover now