De Todo X Lectores.

Epel Felmier x F.reader: Act 2

Esta historia corresponde al escenario de San Valentín que publiqué hace unos días. Contando la historia desde lo ocurrió con rayis (ósea tu) en RSA.
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Habían pasado un par de días desde la competencia entre escuelas y tu encuentro con Epel, quien desde el primer momento en que se conocieron en aquella torre había captado tu atención. Ya que, si bien su apariencia era como la de cualquier chico lindo normal, recordándote ligeramente a Neige, era su personalidad la que te cautivaba. Bajo esa apariencia de un ratón se hallaba la determinación y furia de un Jaberwocky. Y era esa dualidad la que justamente te atrapó cual mosca en nido de arañas desde que tuvieron que montar a caballo hacia la meta en el desafío en el que él participó.

Sintiendo cómo irradiaba el aura de un príncipe al salvar a la princesa, no pudiste evitar querer hablarle al finalizar el evento. Aprovechando que Neige y Che'nya parecían conocer a varios de los estudiantes de Night Raven College, colándote con ellos cuando fueron a saludarlos ese día.

Una risita se escapó de tus labios en la mesa en que comían los tres al imaginar a Epel montando en su corcel, llamando la atención de los chicos.

¿Qué es tan gracioso ____?- preguntó Neige con una inocente sonrisa, saboreando sus cappeletti.

Notaste cómo tus mejillas estaban algo rosadas por aquel pensamiento pero lo ignoraste- solo soñaba despierta de nuevo. Pensaba en que se diferencian un cockatiel, un cocktail y un cockapoo- inventaste una excusa sintiéndote extrañamente nerviosa, confundiendo al muchacho.

¿Segura? A mí me pareció una risa más risueña que las usuales- sonreía de oreja a oreja tu amigo gatuno- te ves más brillante desde el día de la competencia. ¿Sucedió algo en esas dos horas que estuviste con ese chico manzano?

¿Chico manzano?- se preguntó Neige, recordando al muchacho con el quien te fuiste ese día- ¿te hizo algún embrujo? ¿Estás bien?

¿Qué? No. Epel fue de lo más dulce, incluso se disculpaba cuando no actuaba con etiqueta- reíste ante la memoria- era como ver a un perico vestido de pavo real, una completa locura jajajaj

¿Entonces no te dieron nada parecido a un jugo de manzana? Qué alivio- suspiró apoyando una mano en su pecho.

Pudo ser un calimocho- dijo pensando en otra posibilidad el gato, asustando nuevamente al copo de nieve a su lado.

Deja de asustarlo, solo me gustó pasarla con él. ¿Es algo tan malo? Che'nya disfruta de escaparse para pasarla con la reina de corazones de Night Raven y no le dicen nada- inflaste tus mejillas molesta. ¿Era algo tan raro para ellos verte con Epel?

Eso es diferente, nos conocemos hace años- refutó el chico- Y eres como nuestra hermanita- Neige asintió ante el comentario del mayor, molestándote aún más. Cosa que nunca debían de hacer, enojar a un sombrerero.

¿Saben qué? ¡Pueden decir lo que quieran, iré visitar a Epel sin importar lo que opinen!- sentenciaste, yendo en dirección a tu cuarto para cambiarte antes de tomar uno de los túneles de la madriguera del conejo que daban al pueblo.

¡Es increíble, son un par de gudler skitan lir shukum yuki slurkin yufalsbar longmuckel bribnik!- condenaste a los cuatro vientos, con furia en tu caminar. Intentando calmar las ansias de cortar cabezas en lo que llegabas a Night Raven College.

Una vez te encontraste en la entrada principal atrajiste algunas miradas de los estudiantes, a lo que solo le restaste importancia y pasaste de todos modos.

A lo lejos, divisaste a quien te pareció el calco de la reina malvada aproximándose hacia ti al captar tu presencia.

Hmm, si no es la patata bebé de nuestra escuela rival. ¿Qué te trae por aquí?- te saludó con sus manos reposadas en su cintura y una mirada llena de disgusto al ver tu atuendo manchado de tierra.