🗝FarAway🗝《Omegaverse-YM》

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Dedicado a yoonmin07lady por esos solcitos que están hasta altas horas conmigo💚💙

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Era de noche y Jimin se encontraba recostado en el sofá con Nala en la barriga. El omega llevaba pijama y sus ojos ardían de tanto llorar. Su alfa no estaba con él, pero se conectaban por momentos, sintiéndose mutuamente, necesitándose. Sus lobos antiguamente reprimidos por miedos, ahora eran quienes controlaban la situación.

¿Quién necesitaba un celular cuando sus corazones y mentes estaban tan sincronizados?

Yoongi manejaba rápido, con prisas de llegar y tener a Jimin entre sus brazos. A duras penas había aceptado ir a la estación de policía y llevar los antecedentes clínicos de Jimin, luego de visitar el hospital; también adjuntó las cintas del cctv de FarAway, donde se podía observar, sin duda alguna, el auto de Heechul estacionado cada día a las afueras del lugar.

La denuncia contra ese alfa bastardo estaba interpuesta, todo quedaba en manos de la justicia.

Mientras más lejos de mi cachorro, mejor.

Eran las diez de la noche y el día había sido el más largo para la pareja. Desde el ataque hasta la noticia de la lesión de Jimin, todo había transcurrido en una sucesión de hechos horrorosos.

Yoongi estacionó fuera de la gran casa en la periferia de Seúl y se apuró en sacar los múltiples paquetes y el inmenso ramo de flores para su cachorro, junto con su antigua guitarra colgando de su espalda.

Mientras caminaba, a pocos pasos de su hogar, la puerta fue abierta.

—¡¡Yoongi!! —Con un pijama que era de su alfa, con el cabello desordenado, los ojos inflamados, la nariz sonrojada y las mejillas abultadas, Jimin caminó descalzo hasta estrellarse contra su pareja. Yoongi dejó caer las bolsas, manteniendo únicamente el ramo fuera de su apretado abrazo—. ¡¡¡Hyung!!!

El aire estaba helado pero eso no evitó que Jimin se expusiera al terrible clima por obtener un abrazo de su alfa lo más pronto posible.

—Mi amor, vamos dentro, cachorro. —Yoongi apartó amorosamente a su omega, acariciando su mejilla y ordenando su cabello antes de besar su frente y labios con un toque plagado de ternura. Jimin suspiró y le sonrió con verdadero alivio.

Recién en ese momento el menor pudo atisbar el montón de cosas que llevaba encima su pareja.

—¿Qué es todo esto? —preguntó Jimin cerrando la puerta detrás de Yoongi, quien se volvió con el gran ramo de flores, extendiéndolo hacia su pareja.

Flores silvestres de aromas exóticos y colores vivos, dejaron a Jimin muy sorprendido.

—Son para ti mi vida. Sé el dolor y la pena que estas pasando y... yo quería... ¿Alegrarte? Sé que esto no cambia nada, pero...

—Me fascinan... —Jimin dio un paso lento, dejando descansar su peso en la pierna buena, extendiendo sus manos y tomando el ramo—. ¡Gracias!

Yoongi se sonrojó y se tocó la nuca. El peso de lo ocurrido aún colgaba de sus hombros.

La culpa y la rabia.

El alfa no descansaría hasta sentir que se merecía a Jimin.

—Me gusta cómo se te ve mi ropa... —dijo el mayor adelantándose hasta la cocina, donde comenzó a vaciar las bolsas. Jimin le siguió de forma lenta, pasando por la sala de estar desde donde tomó un florero vacío.

—A mí me gusta como huele. Necesitaba sentirte cerca. —Jimin dejó sus flores con agua sobre la encimera de la cocina. Yoongi ordenó todo en su lugar, dejando de último el juguete de Nala. En ninguno momento fue capaz de mirar a Jimin, sintiéndose avergonzado.