🗝FarAway🗝《Omegaverse-YM》

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La campanilla sonó, sacando a la mujer de sus pensamientos.

—Buenas tardes, bienvenido a FarAway, ¿en qué puedo ayudarlo? —saludó con cordialidad.

—Vengo por el puesto de commis**. Soy Park Jimin.

La mujer lo observó sorprendida, su rostro le parecían vagamente familiar.

—Claro, sígueme por aquí —La mujer salió de detrás del recibidor y caminó con paso firme hacia lo que parecía ser una oficina. Jimin no se había dado cuenta de ese detalle la primera vez que estuvo ahí.

—Aquí está el Chef Agust D'', él le dirá todos los detalles para el día de hoy. Trae tu curriculum, ¿verdad?

Un apagado "Sí" fue la simple respuesta que el chico le dio. MinHa asintió y golpeó dos veces la puerta en frente de ellos, antes de entrar.

—Yoongi, llegó el reemplazo de Sohyun.

Fuertes y estruendosas carcajadas se escucharon desde el interior.

—¡Oh! Claro, dile que pase —El chef se levantó de su lugar secando la solitaria lágrima producto de la risa, y se dirigió al hombre situado frente a él—. Mañana te quiero aquí a las diez y treinta en punto, abrimos de forma oficial a la una, pero siempre hay cosas que hacer.

—Por supuesto, jefe —El tono de burla fue evidente. Yoongi rodó los ojos mientras que el castaño sonrió.

—Nos vemos mañana Hoseoki —Ambos hombres se dieron un fugaz abrazo y el nuevo chef se dirigió a la puerta.

—Hasta mañana, MinHa-ssi —Le hizo una venia.

—Hasta mañana Chef Jung —La mujer lo despidió de buena gana. Hoseok se fue no sin antes mirar y regalarle una brillante sonrisa al chico que esperaba fuera de la oficina. Jimin solo asintió en su dirección.

—Jimin-ssi entra, el chef te espera.

El omega no sentía ni una sola gota de nervios de estar en una entrevista de trabajo, era la quinta esa semana; si no lo llamaban, seguiría buscando, así de simple, ya no tenía grandes aspiraciones. Aunque el hecho de volver a ver a Yoongi, si le hacía sentir algo de ansiedad, sin embargo, no era ni la mínima parte de lo que sintió la primera vez que estuvo ahí. Todo había cambiado tanto y en tan poco tiempo.

Yoongi estaba esperando que el nuevo encargado de mantener su cocina brillante, entrara. No se hubiera sorprendido tanto si por aquella puerta hubiera ingresado un rinoceronte rosado con un cuerno de oro.

¡Es él!

Su entusiasmo no duró mucho. El chico que estaba en frente de él, no era el mismo que lloró de felicidad cuando le cantaron "Cumpleaños Feliz"; no era aquel joven lleno de colores y sonrisas.

Frente a él se encontraba un omega en blanco, que le miraba sin emoción alguna.

¿Dónde está su brillante sonrisa?

¿Dónde están sus colores?

¿Qué ha cambiado? o ¿Qué ha pasado?

Ambos se hicieron la reverencia correspondiente. El alfa le invitó a tomar asiento.

—Y bien Jimin-ssi, ¿qué te trae por aquí? — Yoongi se sintió ligeramente incómodo bajo la mirada sería del chico.

—Yo pensé que usted sabía.

—Claro que lo sé, pero dime —El hombre cruzó sus manos por sobre el escritorio—, ¿por qué te gustaría trabajar aquí?

El omega pareció pensárselo un segundo; si esta pregunta se la hubieran hecho apenas un mes antes, se hubiera deshecho en razones y múltiples argumentos para trabajar ahí. Hoy, solo podía pensar en una.