Crazy Virus (EXO: Chanyeol x tú)

Pollo frito y dramas

El chico dejó escapar una pequeña y rápida risa nerviosa cuando volvió sus ojos a la bibliotecaria que lo observaba con una gran sonrisa en la cara. ''Ja je, bueno... ella no...''

''Kaaaaiiii'' Hyeri le llamó con un tono aguado de voz. Kai empezó a dar pasos hacia atrás. ''¿Entonces vienes, no?'' Preguntó. La biblioteacaria sacudió la cabeza con una sonrisa en su rostro. 

''El sábado.'' Kai dijo mientras continuaba andando ''A las ocho'' llegó junto a Hyeri y salieron de allí

Escribir melodías siempre había resultado algo fácil y divertido para Chanyeol. El problema era que últimamente no era solamente difícil, sino también, aburrido.

Las fuentes de inspiración para él parecían haberse parado en un solo instante y ninguna cosa realmente buena conseguía salir de su cabeza o sus dedos. Y era bastante frustrante.

Dejó la guitarra apoyada sobre la pared y se tumbó en la cama mientras se pasaba los dedos por el rizado cabello. Un suspiró salió de sus labios y su mirada se clavó en el blanco techo. Quería y necesitaba algo que le empujara a crear cosas nuevas y emocionantes, pero desgraciadamente, estaba vacío.

Sacó su móvil del bolsillo y miró la pantalla en busca de nuevas notificaciones. Había algunos mensajes. Pasó el dedo por la pantalla, leyendo el nombre de los remitentes. Sehun, Baekhyun, Sehun de nuevo, y propaganda. No pudo evitar sentirse desilusionado al comprobar que no había ninguno de Sunmin, y más importante aún, de Hyeri.

Se frotó el pecho y pensó en qué hacer. 

Por una parte, estaba triste por su relación con Sunmin. Era guay, era genial, era lo que siempre había querido. Pero no era suficiente, no era todo lo que había esperado. Y no se refería solo a Sunmin, sino a él mismo. Pensaba que sus sentimientos hacia la chica iban a funcionar de la misma forma que cuando él solamente era una hormiguita más que admiraba desde la distancia a la hormiga reina. Pero qué va; era cierto que sentía algo en su interior cuando la miraba, o cuando la besaba, pero no lo notaba con la intensidad característica de... estar enamorado.

Y la realidad era que, por alguna extraña razón, por mucho que se esforzaba por quedar y estar con ella, a veces parecía como si Sunmin no mostrara el mismo interés, ya que la mayoría de las veces parecia tener algo más importante que hacer.

Por otra parte, Hyeri. No entendía lo que pasaba con esa chica, pero no se dió cuenta de lo mucho que podía llegar a echarla de menos hasta que por alguna razón desconocida ésta empezó a... llamémoslo ignorarle, en la escuela. Y no solo ahí, sino que también se había negado a quedar el otro día para estudiar y ensayar aquel baile poniendo la simple escusa de que tenía prisa.

Por muchas vueltas que le daba, no conseguía comprender qué era lo que había hecho mal para merecerse aquello. Le frustaba la idea de poder haberla ofendido de alguna manera y saber en qué, también le frustraba el hecho de estar perdiendo una amistad que aunque no fuera muy antigua, era importante. Porque Hyeri cargaba algo con ella y había dejado un poquito de ese algo en su corazón.

Chanyeol volvió a mirar la pantalla de sus mensajes, preguntándose si era necesario molestarse en leerlos. Bostezó y abrió uno al azar; quizás pasar la tarde con los tontos de sus amigos le ayudaria a despejarse un poco.

''No entiendo a las mujeres'' murmuró para sí mismo.

''NO PUEDE SER NO PUEDE SER NO PUEDE SER'' Baekhyun gritó mientras se llevaba las manos a la cabeza. Sehun chasqueó la lengua al mirarlo. ''no puede ser no puede ser no puede no puede ser'' Baekhyun continuó repitiendo mientras lentamente hundía su cara entre sus manos.

Lay se rió cuando Sehun tiró uno de los cojines contra la cara de Baekhyun. Hyeri se rió también antes de tomar otra cucharada de helado.

Aquella tarde habían quedado con la escusa de que había que celebrar de que era jueves. Aunque el verdadero motivo fue que se estrenaba el penúltimo capítulo del drama favorito de Baekhyun, el cual acaba de terminar. ''Tampoco ha sido para tanto'' opinó Kai que estiraba los brazos detrás de su cabeza.