La cena termina y empieza mi última fiesta en Miami, mi madre, Alessandro y Dylan se van, me despido de ellos con un beso, mañana serán ellos los que me lleven al aeropuerto. Mis tios también se van porque dicen que ellos no tienen edad para pegarse las fiestas que nosotros nos pegamos, me despido de ellos con varios abrazos y besos y prometen venir a verme, tanto a mi como a Shasha.
-¿Vamos a The Jungle? -pregunta Camila subiendo al coche de Mateo.
-Por mi si. -digo tras haber subido.
Quedo yo enmedio de Pablo e Ian, delante van Mateo, que conduce, y Camila. Apoyo mi cabeza en el hombro de Ian.
-¿Estas cansada? -pregunta acriciándome el brazo.
-Un poco. -sonrío.
-¿Segura que quieres ir de fiesta? -yo asiento en respuesta.
Pillo a Pablo mirándonos y le saco el dedo.
-Vale, vale, tranqui fiera.
Ian me rodea con su brazo haciendo que me apoye en su pecho y le da un golpe a Pablo.
-Uy estos dos. -dice Mateo sonriendo.
-Pesados que sois. -digo frustrada. -¿Os cuesta entender el concepto amigos o qué?
-Ay perdone usted. -dice Camila girada para mirarme. -No te enfades, sabes que vamos de broma.
-Ya lo se. -sonrío. -Pero sois muy pesados.
Llegamos al parking de The Jungle, esta bastante petado así que damos un par de vueltas hasta que encontramos un buen sitio, bajamos del coche y Camila me enseña una botella grande de vodka y una de fanta. Me empiezo a reír.
-¿Vamos a hacer botellón? -pregunto apoyándome en el coche.
-Obviamente. -sonríe.
-Ven un momento. -dice Ian cogiéndome la mano.
Nos alejamos un poco de los demás y saca un cajita de su bolsillo.
-¿Qué pasa Ian?
-Quiero regalarte esto. -saca un colgante precioso. -Te has convertido en alguien muy importante para mi en poco tiempo. -me enseña el que él lleva puesto, igual al mío. -Y quería tener algo que nos uniese, algo que no fueran solo recuerdos.
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Yo sonrío y me tiro encima de él para besarlo en fora de agradecimiento. Me pone el colgante y se que no me lo voy a quitar en mucho tiempo. Volvemos con los demás cogidos de la mano.
Ian y mi primo Mateo deciden beberse solo dos chupitos cada uno porque saben que nosotros tres nos pondremos mal, tonterías. Empezamos a beber y la verdad es que nos entra como agua, al acabarnos la botella me noto un pelin mareada así que me cojo a Ian que se ríe.
-No hace ni puta gracia. -balbuceo.
-Ya claro.
-Anda, vamos a entrar. -dice mi Mateo cogiendo a Camila.
-Me he dado cuenta de que soy el sujeta velas. -ríe. -Mola.
Entramos en The Jungle y empiezo a mover las caderas al son de la música. Me cuelgo del cuello de Ian y empezamos a bailar, no se bien cuanto tiempo ha pasado pero decido que es buena idea besarle, nos besamos mientras bailamos y me gusta como me siento. Al rato mi prima viene para avisarnos de que vamos a hacer una ronda de chupitos. Mateo no va a beber porque dice que tiene que conducir así que es él quién nos hace la foto.
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-Quién no apoya, no folla. -grita mi prima.
Todos apoyamos nuestro vaso en la barra y nos bebemos el contenido de un trago.
Las horas pasan rápido cuando te estas divirtiendo y más cuando no paras de beber en toda la noche como estoy haciendo yo, aunque es relativamente pronto, las cinco y cuarto. Ian se acerca a mi y me besa, las cosas empiezan a subir de tono y decidimos que es momento de ir a su apartamento, los dos vamos bastante alcoholizados así que tardamos un poco en llegar al apartamento, en cuanto entramos Ian cierra la puerta de una patada y me besa pegándome a la pared.
-No sabes las ganas que te tengo. -dice bajando sus manos a mi trasero.
Me coge en brazos y me lleva a su habitación, me tumba en la cama y poco a poco nuestra ropa desaparece, nos convertimos en un enredo de caricias y besos para poco a poco fundirnos en uno, voy lo suficientemente ebria como para acordarme de esto mañana y se que no me voy a arrepentir.
Nos dormimos abrazados.
PDV TAYLOR.
Llamo a Camila después de haber discutido conmigo durante toda la noche.
-¿Si? -pregunta con voz ronca.
-¿Te he despertado?
-Si, ¿qué quieres?
-¿Estas con ______?
-No, ella esta con Ian. -dice y escucho como se da un golpe en la frente, supongo que no quería decirme eso. -Bueno, ¿para qué la buscas?
-Me gustaría despedirme. -hago una mueca aunque no me vea.
-Esta en casa de Pablo, ves allí a buscarla si te quieres despedir. -bosteza. -Y cuidado con lo que le dices, no le jodas el viaje a mi amiga, capullo.
Tras eso escucho el pitido indicando que me ha colgado.
