• Shadow• Jimsu

| C U A R E N T A |

🫧

El castillo de Seúl estaba más vivo que nunca.

Desde la llegada de Taemin, Kyungsoo y Jongin, la presencia de los brujos se había vuelto más fuerte. Ya no eran solo unos cuantos escondidos en los pasillos oscuros del castillo.
Ahora caminaban con libertad, reunidos por una sola causa: proteger a la princesa Eunji.

La habitación real se convirtió en el centro de todo.

Yoongi estaba sentado en la cama con Eunji en brazos, acariciando suavemente su mejilla mientras la bebé dormía.

Jimin estaba de pie cerca de la ventana, observando con atención cada movimiento de los brujos.

—¿Estás seguro de que esto funcionará? —preguntó con el ceño fruncido.

Kyungsoo, quien estaba trazando símbolos en el suelo con un polvo dorado, alzó la vista y lo miró con expresión seria.

—No hay ritual infalible, pero este es el mejor que podemos hacer.

Jongin, quien estaba acomodando velas en cada esquina de la habitación, sonrió con confianza.

—Confía en nosotros, Majestad.

Taemin se acercó a Yoongi y extendió sus manos.

—Puedo cargarla mientras terminamos de preparar el ritual.

Yoongi dudó por un segundo.

Pero al ver la mirada amable de Taemin, asintió y depositó con cuidado a Eunji en sus brazos.

Jimin no apartó los ojos de ellos.

Aunque ahora confiaba más en los brujos, el instinto protector en él seguía siendo fuerte.

—¿Qué harán exactamente? —preguntó con tono serio.

Taemin, que mecía suavemente a Eunji, explicó con paciencia:

—Realizaremos un sello de ocultación.

—La presencia de Eunji se volverá indetectable para aquellos con magia oscura.

—Y además... —agregó Kyungsoo, terminando de dibujar el último símbolo en el suelo— vamos a conectar su magia con la del castillo.

Jimin arqueó una ceja.

—¿Eso qué significa?

Jongin sonrió.

—Que el castillo mismo la protegerá.

Yoongi, quien había permanecido en silencio, suspiró con alivio.

—Eso suena… perfecto.

Jimin cruzó los brazos.

—Entonces hagámoslo.

Cuando todo estuvo listo, los brujos tomaron sus posiciones.

Yoongi se sentó en el centro del círculo con Eunji en brazos, mientras Jimin permanecía a su lado.

Taemin, Kyungsoo y Jongin levantaron sus manos y comenzaron a recitar el hechizo.

El aire en la habitación se volvió más denso.

Las velas comenzaron a arder con más intensidad.

Los símbolos en el suelo brillaban con un resplandor dorado.