Nuestro Destino Es Estar Juntos (Sesshomaru x Kagome)

Capitulo 35: Grandes Vinculos

SHIPPO

Realmente sucedio, Kagome en verdad le dio la cara a Inuyasha, yo sabia qué ese dia iba a llegar pero jamas crei qué fuera tan pronto, bueno hace 2 años qué ella volvio, un año de duelo y en otro año se la paso sanando sus heridas y enamorandose.
Estoy aquí reunido con el resto de mis amigos en la cabaña de la Anciana Kaede, estamos todos aquí incluyendo a Kikyo con su hijo en brazos, Inuyasha nos a reunido a todos, por casualidad yo estaba en la aldea de visita, Inuyasha nos está contando sobre su reencuentro con Kagome, todos guardamos silencio mientras le ponemos atención, Sango y Miroku creen qué posiblemente no se trataba de ella, Kagome no es capaz de desaparecer repentinamente cómo un fantasma, Kaede piensa qué es posible, qué tal vez Kagome haya cambiado en estos últimos 5 años, escucho la conversación en silencio, estoy metido en mi propio mundo hasta qué de repente me doy cuenta de qué ahi silencio, levanto la mirada para ver todas las miradas puestas en mi.

Shippo: ¿Qué?, ¿porque me observan así?.

Kaede: No haz dicho ni una sola palabra desde qué estamos aquí.

Sango: Lo cual es extraño, tu y Kagome eran muy unidos y estabas anhelando volver a verla, no haz dado tu opinión ni nada, solo tienes la mirada clavada en el suelo.

Miroku: (Pensando) Acaso... ¿Ya lo sabias?.

Demonios, se me olvido por completo fingir mis reacciones, estaba tan metido en mis pensamientos qué no me di cuenta qué estaba levantando sospechas, aunque... Ya no vale la pena ocultarlo más, todos ya saben qué Kagome volvio a este mundo para quedarse, ya no tengo porque mentir más, soy libre de la carga sobre mis hombros, Kagome me dijo hace unas pocas semanas la última vez qué la visite, qué si un dia se reencontraba con Inuyasha era libre de confesar mi secreto, sin embargo no tengo la libertad de decir sobre la ubicación de su mansión, ambos sabemos qué Inuyasha va a ir a buscarla para arrastrarla de regreso a la aldea.

Shippo: Si lo sabia, me cruce con Kagome el día qué salio del pozo devorador de huesos hace 2 años.

Inuyasha: (Se pone de pie bruscamente) ¡¡2 años!!.

Hiro comienza a llorar cuando Inuyasha me levanta la voz, rápidamente Kikyo lo abraza para calmarlo, mientras le dedica una mirada llena de enojo a Inuyasha, ciertamente no es la única qué se está molestando con el, Miroku toma su bastón y lo coloca entre Inuyasha y yo, el venia hacia mi con una expresión siniestra, la verdad no me asusta, ni siquiera parpadeo, no me muevo y permanezco sentado en mi lugar, estoy tranquilo, el ya no puede intimidarme cómo cuando era un niño.

Inuyasha: Porque demonios no dijiste nada durante todo esté tiempo, sabias de la presencia de Kagome y te guardaste el secreto.

Shippo: Ella me pidio guardar el secreto, con gusto mantuve la boca cerrada, no quiera verte cerca de ella, después de lo qué vi, tu presencia solo iba a empeorar las cosas.

Inuyasha: ¿De qué demonios estás hablando?.

Shippo: Kagome cayo en una severa depresión, su corazón no pudo resistir la noticia, estuvo tres largos años visitando el pozo devorador de huesos intentando atravesarlo solo para verte, para está contigo, el día qué pudo volver le tuvo qué decir adios a su familia a su hogar, a su mundo, ella dejo atrás todo lo qué conocia para estar contigo y ella te vio besarte con Kikyo mientras se venia acercando a la aldea, Kagome no la a pasado nada bien. (Se pone de pie y se acerca a Inuyasha sin miedo) Lloraba hasta quedarse dormida, no la veias sonreir ni una sola vez en el día, no podia hacer qué comiera, perdio como 7 kilos en pocas semanas, apenas y podia hacer qué saliera de la cama y saliera de su escondite para qué pudiera sentir el sol en su rostro. (Unas lágrimas bajan por su mejilla) No solo Kagome sufrio, yo también lo hice, no sabes lo doloroso qué fue para mi ver a Kagome en esas condiciones. (Se seca las lágrimas con la manga de su kimono) Por supuesto qué no, solo piensas en ti mismo, puede qué Kagome haya decidido perdonarte pero eso es algo qué jamas yo hare, vi cómo mi mejor amiga se caia a pesados por ti.