Rhys Mitchell: El sabor del recuerdo [II] +21 ✅

17. Pasos

HI GUYS!

A manera de introducción quiero decirles que es la parte que más me gusta. Uno porque veremos un cambio en cada uno de los personajes, dos que habrá más interacción con el antagonista y, por último pero no menos importante, que Blake no será la chica que conocíamos anteriormente. Su personaje evolucionará y eso es lo que más me emociona.

Que lo disfruten tanto como yo.

Intro: Like It Or Not – Bob Moses

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Besos ;)

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Capítulo (17)

PASOS

—No podemos seguir con esto —Bajo la mirada al suelo y, no sé por qué, pero me apena que todo haya llegado hasta aquí.

—¿Intentas lastimarme de nuevo? —Lágrimas resbalan por sus rosadas mejillas, aprieta la mandíbula y su tic se contrae.

—Normalmente lo hago, pero nada es lo que parece.

—No puedes dar crédito a algo que no es cierto.

—No debí haber venido —digo entre dientes.

—¿Qu-ué es lo que queda después de tres meses? —La desilusión colorea su rostro de un tono gris tan iguales a los de sus ojos. Mi rosa, mi blanquita, mi chica de los ojos grises.

—Nada. Nunca hubo nada.

Se va el tiempo y yo aún sigo aquí lamentándome y odiándome de la mejor forma posible porque no habrá otro momento en que lo haga. No tengo elección.

—¿Ah, no?

Sus ojos se enrojecen y el tejido de sus labios se tuerce. Lamento no haberlo hecho antes. No me gusta verla de tal manera. No obstante, para herir uno hace cosas horribles, y yo varias veces me hice el desentendido. No tuve sentido de orientación y, aquí me tiene, a quien acaba de conocer hace tres malditos meses. Y de quién se enamoró. De la persona equivocada. Quise que me odiara tanto, pero no logré con intentarlo. Algo más fuerte que el tsunami nos unió.

Y, sin tener el menor cuidado, Blake da escasos pasos y sus manos se asen en mi camiseta con la rabia que admite su cuerpo. No me concentro en absoluto, solo en el color de sus ojos y la fuerza con la que me sujeta. Me tienta a tocarla de nuevo y eso pasa cuando conduce mi mano consigo hasta debajo de su vestido. Está tan mojada que quiero embestirla aquí en ese lugareño y saciar mi sed. Mis ganas de querer follar. Meto mis dedos y los ojos de ella se cierran del puro placer que le estoy dando. Impulsado por el deseo. Un shops de gemidos brota. Normalmente, estaría arrastrándola, pero en momentos así, me detengo tras pensarlo varias veces y me muestro indiferente.

—Te he dicho mil veces que no quiero verte cerca.

—No tienes que vengarte de mí todo el tiempo —Vuelve a llevar las manos hacia mi nuca, siento su calor. Maldita sea, me quema tan hermosamente.

—Blake, no se trata de eso —Hundo las cejas. No quiero que me toque, pero lo hace y su aliento me rodea.

—Entonces, ¿por qué te vas?

Toma una respiración profunda.

—Lo lamento mucho. ¡Asunto de negocios!

—Si quieres puedo hablar con papá por ti.