Los Secretos Y Mentiras De Melody Vecchio (+18) ✓

Capítulo cuarenta y cuatro

—Blake… Te estás confundiendo —digo con tanta firmeza como puedo y me levanto ligeramente para mirarlo.

—¿Confundiendo en qué sentido?

Estoy a punto de espetarle que sólo somos amigos con derechos cuando la cara preocupada de Christian viene a mi mente. Sin embargo, él me dijo que no lo lastimara, pero si lo ilusiono lo voy a herir más.

Nunca debí haber comenzado algo con un amigo de mi hermano, ahora me queda claro.

—Bueno... —El tacto no es lo mío en absoluto y esto me está costando más de lo que debería. Quisiera poder explicarle la situación sin pelos en la lengua, como hice con Andrew, pero Chris me mataría—. Nosotros nunca formalizamos nada, Blake. No podés exigirme fidelidad si sólo somos amigos.

Para mi sorpresa, él sólo me acaricia el mentón y sonríe. El gesto no hace más que abrumarme y me deshago de su mano como si fuera una mosca. La sonrisa se le difumina lentamente y me da el impulso que necesitaba para tomar una decisión simple pero drástica.

—Ya ha habido demasiados malentendidos, Blake. Es mejor que nuestra amistad con derechos empiece a ser una amistad a secas. —Busco mi ropa frenéticamente y me visto a la velocidad de la luz, consciente de su mirada incrédula sobre mi cuerpo—. Lo siento.

Pero no lo siento. Como todo lo que no es sobre mi familia, me da igual.

—Perdón si hice algo que te molestó —reacciona él cuando ya estoy poniéndome el calzado—. No quiero que terminemos así.

—No hay nada que terminar —insisto—. Sólo seremos amigos normales de ahora en adelante.

Para enfatizar mis palabras, le doy un beso en la mejilla que él acepta casi sin moverse.

—Es tarde, ya deberías irte —le insto. Me iría yo, pero es mi habitación.

Él esperaba quedarse a pasar la noche, lo intuyo por el modo en que mira con desdén la cama, pero no protesta. Lo dejo vestirse solo mientras reviso las redes sociales una vez más y después de un rato se despide con aire triste.

💋💋💋

Quitando el hecho de que Blake me evita como a la peste, las semanas siguientes pasan tranquilas y llenas de diversión. Mucha diversión.

Hago compras por toda Nueva York, me tomo fotos con vistas impresionantes y sacio mis necesidades carnales con asiduidad; ahora con el hijo de un ex jardinero que teníamos en la casa de Nueva York antes de venderla. El chico, Jordan, sólo conoce a mi hermano de vista y Chris ni siquiera se acuerda de él, lo que me viene fantástico.

En otras palabras, llevo la vida normal de cualquier adolescente de clase alta que está de vacaciones en el centro turístico por excelencia.

Dos semanas después de mi llegada, escucho a Chris discutir con su peor-es-nada, pero a la mañana siguiente los encuentro dormidos en la misma cama, muy juntos y desnudos, así que no interrumpo y me voy.

No he indagado mucho a Chris sobre Leander porque presiento que no es un tema que quiera sacar a relucir. Eso normalmente no me detendría, pero si él decidiera preguntar por mi vida amorosa... Mejor evitar unas cuantas mentiras más. Aún así, intento mantenerme al tanto de lo que pueda observar, sólo por si acaso.

El sábado, un día antes de Nochebuena y (oh, casualidad) de mi cumpleaños, decido ver "It 2" en mi hotel, a pesar de que Chris me ha invitado a una fiesta que organiza alguien de su fraternidad.

Estoy en la parte donde la niña imbécil sigue al payaso demoníaco para ser devorada, cuando mi celular suena con tanto estrépito que casi me caigo de la cama.