A. D. D

Capítulo Sesenta y dos

Esa noche, Ji Zhan seguía sin poder entenderlo, y volvió a su propia cama un poco deprimido y durmió un rato.

Cuando se levantó a la mañana siguiente, abrazó a Xia Tingwan antes de marcharse y le susurró al oído: "Lo he pensado toda la noche, pero sigo respetando tu idea. Sigamos siendo amigos, ¿sí? Voy a dar un concierto el mes que viene, debes venir entonces".

Xia Tingwan asintió con fuerza.

Ji Zhan sonrió, no dijo nada más, recogió su guitarra, se dio la vuelta y se alejó secamente con su asistente.

Seguía siendo el mismo Ji Zhan que era como una ráfaga de viento.

Xia Tingwan miró la espalda alta y recta de Ji Zhan, y de repente se sintió un poco agradecida en su corazón.

Fue realmente una cosa maravillosa conocer a un chico grande como Ji Zhan, que era tan espontáneo y fácil de llevar en la vida.

Xing Le y Gu Qian tenían otros planes de trabajo, así que no volaron a Ciudad H. Así que en el viaje de vuelta coincidieron otras dos personas sentadas juntas, Li Kaiwen y Xia Tingwan.

Después de charlar durante unos minutos, Li Kaiwen pareció de repente un poco sutil mientras se acercaba y decía en voz muy baja:"¿Alguna vez Xing Le te mencionó algo?"

-"¿Eh?" Las palabras de Li Kaiwen no tenían ni pies ni cabeza, y Xia Tingwan sólo pudo girar la cabeza para mirarle de forma desconocida.

"No viví con él, sentí que no estaba en buen estado, no paraba de dar vueltas en la cama por la noche, apenas hablábamos una vez terminado el rodaje, y..."  Li Kaiwen se rascó la cabeza y tartamudeó, "Había Una vez, lo vi con muchas heridas, o las marcas que deja ese tipo de lesión, ya sabes, ¿no?"

Por supuesto, sabía que Li Kaiwen se refería a "ese tipo de lesión", de hecho, aquel día en que Xing Le se cayó al agua, echó un rápido vistazo a través de su camiseta mojada en la noche, y su primera reacción fue la misma.

Ese tipo de lesiones, como las marcas de los látigos, parecían restos de abusos sexuales.

Li Kaiwen y Xia Tingwan se miraron el uno al otro, Li Kaiwen tosió primero y dijo en voz baja: "De hecho, bastantes personas del círculo saben en privado que al jefe Ye de Shaoguang Entertainment le gusta jugar al SM, pero no fuerza a la gente, sólo... golpea especialmente fuerte, por lo que parece haber cambiado muchos compañeros de cama. Xing Le entró en Shaoguang, se estima que las heridas de su cuerpo están relacionadas con esto".

Li Kaiwen y Xia Tingwan tenían una relación bastante buena antes, y era este tipo de noticias privadas y semipúblicas, por lo que la discusión no fue especialmente evasiva.

Xia Tingwan estaba incómodo escuchando, y a pesar de que las palabras de Li Kaiwen confirmaban sus vagas sospechas de antes, no habló con Li Kaiwen sobre lo que había visto. No sabía mucho de SM, pero le parecía que las heridas de los azotes que aún podía ver a través de su ropa días después no podían explicarse por ningún fetiche sexual, sino sólo por un cruel abuso sexual.

Xia Tingwan recordó la mirada siniestra de Ye Bingwen cuando le encerró en el coche antes, diciendo que quería hacerle pedir clemencia de rodillas, y la mirada de su cara cuando le golpeó con fuerza, y luego pensando en la situación de Xing Le, no pudo evitar sentir una punzada de horror desde el fondo de su corazón.

Ye Bingwen era simplemente un pervertido, y ahora estaba cada vez más seguro de ello.

Tras bajar del avión, Xia Tingwan siguió dudando en el camino, y finalmente no pudo resistirse a enviar un WeChat lleno de indirectas a Xing Le: "Lele, ¿estás... bien últimamente?"