La Esposa del Legendario Maestro [III]

Capítulo 563: Dong Zhou Xenófobo

El cielo estaba nublado, y el terreno era montañoso, cubierto de verde. Aunque el tiempo no era muy bueno, estaba claro que el paisaje era hermoso. No muy lejos, dos bestias demoníacas con cuernos de toro brillaban con luz verde, mirándose de forma depredadora, mugiendo amenazadoramente. Parecía que iban a estallar en cualquier momento.

Entonces, un rayo cruzó el cielo.

Justo cuando las dos bestias demoníacas con cuernos de toro se tensaron preparándose para embestir, el aire a su alrededor empezó a distorsionarse. Una brecha negra rasgó el aire y la energía espacial se filtró.

Dos figuras aparecieron bajo el desgarro en silencio.

Las dos bestias demoníacas con cuernos de toro dejaron de atacarse inmediatamente y se volvieron para mirar a los dos que habían aparecido de repente, enseñando los dientes como si estuvieran a punto de abalanzarse.

El joven, limpio y apuesto, se apresuró a ayudar a su compañero, fuertemente herido, a descansar bajo un gran árbol, sin tener el esfuerzo de comprobar los alrededores. Probablemente no serían alcanzados por el rayo que surcaba el cielo.

Las dos bestias demoníacas con cuernos de toro seguían los movimientos del joven, pateando el suelo con más fuerza con sus pezuñas. Sus gritos se hicieron más amenazadores, sobre todo cuando vieron que el joven les daba la espalda. Las dos bestias demoníacas rugieron de repente, saltando y golpeando el suelo con sus pezuñas mientras cargaban contra el joven.

Justo cuando estaban a tres metros de su objetivo, el joven giró de repente la cabeza, con los ojos claramente llenos de fastidio. Agitó una mano hacia los dos, y una enorme oleada de fuerza del alma salió disparada hacia las bestias demoníacas.

Los ojos de las dos bestias demoníacas se abrieron de par en par con miedo, intentando apresuradamente romper su impulso y queriendo girar y huir, pero era demasiado tarde. Se estrellaron contra la ola de poderosa fuerza del alma, siendo lanzados al instante por los aires. Luego cayeron en algún lugar del bosque, desapareciendo en un abrir y cerrar de ojos.

Otro relámpago atravesó el cielo.

El joven pensó un momento antes de decidirse a sacar a su compañero de debajo del árbol. Sería terrible que hubiera sobrevivido, sólo para ser alcanzado por un rayo.

Al ver que estaba a punto de llover, el joven tuvo de repente una idea y le dijo al hombre que se apoyaba en su hombro: "¿Qué tal si te llevo a ver si hay algún pueblo o ciudad cerca?"

El hombre le miró en silencio. El joven sonrió con culpabilidad.

El hombre resopló ligeramente. "No estoy herido hasta el punto de no poder caminar por mí mismo." Entonces le quitó el brazo y empezó a caminar por su cuenta.

El joven hizo un mohín y se apresuró a seguirlo. ¡Era sólo una broma!

Dong Zhou era la zona más atrasada del continente TongTian. Los forasteros rara vez iban allí porque, además de que las montañas separaban el lugar del resto del Continente TongTian, la energía espiritual aquí era débil y las tribus de Dong Zhou no daban la bienvenida a los forasteros.

Como la mayoría de los que vivían en Dong Zhou eran las razas más primitivas, no estaban abiertos a la experiencia, lo que hacía que el desarrollo se quedara atrás. Por ejemplo, los practicantes de Dong Zhou se segregaban estrictamente de la gente normal. Era muy raro que los practicantes y la gente normal se encontraran en la misma ciudad. Por supuesto, había algunas excepciones.

En la antigüedad, los practicantes del continente TongTian se consideraban bendecidos, competían entre ellos y miraban con desprecio a los frágiles mortales. Los practicantes de Dong Zhou seguían con esta creencia, por lo que los practicantes rara vez pisaban las ciudades de la gente normal. La jerarquía entre los practicantes también era muy estricta.