The Daily Task of Preventing My Disciple from Turning to the Dark Side

Capítulo 58: Mu Chen se puso rojo en un instante. ¡Este discípulo travieso!

Capítulo 58: Mu Chen se puso rojo en un instante. ¡Este discípulo travieso! Realmente se atrevía a...

Los dos acordaron comprar semillas, pero Mu Chen miró a Gu Yunjue con exploración, mostrando una evidente desconfianza. El bastardo le había impedido saber algo otra vez.

Como dice el viejo refrán, 'La primera vez muerde, la segunda avergüenza'. Una vez que se vio engañado de nuevo, Mu Chen miró a Gu Yunjue con ojos penetrantes como si lo golpeara con un cuchillo.

Gu Yunjue no tuvo más remedio que atraer a Mu Chen, alcanzando su oreja y diciendo, "La Campana del Cielo y de la Tierra forma su propio mundo, en el cual puedo cultivar un huerto y saciar tu sed con deliciosas frutas en nuestro camino".

Mientras hablaba, cálidas respiraciones tocaron la oreja de Mu Chen, y su brazo estaba alrededor de la cintura de Mu Chen. Sintiendo el calor y la cercanía, Mu Chen se molestó y le dio una palmada en la parte posterior de la cabeza. '¿Cómo puede hablarme así? Y estamos afuera con tanta gente alrededor. ¿Qué pasa si alguien escucha sobre la Campana del Cielo y de la Tierra?'

La herramienta era abrumadora. Cuando las mentes ansiosas descubrieran que estaba en manos de Gu Yunjue, los problemas los seguirían. Maestro y discípulo no tenían miedo de los problemas, pero los problemas eran realmente molestos, si los había.

A pesar de que lo palmearon, Gu Yunjue no estaba molesto. En cambio, aprovechó la oportunidad y frotó su propia cara contra la de Mu Chen. Luego, atrapo la mano de MuChen, Gu Yunjue y Mu Chen salieron del Pabellón Medicó y emprendieron el viaje para comprar semillas.

Caminando varios pasos, Mu Chen recordó algo de repente y le dijo, "Ve con tu Segundo Hermano Mayor la próxima vez. Él tiene todas las semillas que necesitas".

Gu Yunjue asintió con la cabeza y luego tomo su mano y dijo, "Me temo que me perdería. Necesito que el Maestro me proteja." Con la boca encogida un poco, Mu Chen fue arrastrado lejos impotente.

Fuera de la Ciudad de Shuangji, los dos tomaron el norte y se dirigieron al Valle Verde Rojo.

En su vida anterior, Gu Yunjue había estado ahí, por lo que visitarlo nuevamente fue pan comido para él.

"Maestro, ¿necesitas un poco de agua? ¿Qué hay de tomar un descanso?" Mu Chen se sentó cómodamente en la lujosa silla mientras el enorme Huevo Negro voló sobre su cabeza protegiéndolo del sol con sus alas. Él mismo estaba absorto jugando un entrelazado de trece anillos vidriado, mientras que los anillos sonaban y se abarrotaban. Mu Chen no pudo evitar sentirse agitado. '¿Cómo es que este entrelazado se transforma de varias formas en las manos de mi discípulo? ¿Cómo es que lo desata en trece anillos mientras es solo un montón de basura en mis propias manos, esto es difícil de jugar?'

Ante la pregunta del discípulo, Mu Chen miró hacia abajo y simplemente respondió un sí.

Gu Yunjue captó un toque de agravio en la respuesta de su Maestro y le devolvió la sonrisa. Extendiendo la mano y sosteniendo los dedos de Mu Chen, su discípulo se rio entre dientes, "Esta cosa requiere habilidades. Mira, aquí, así, entonces los dos anillos se pueden entrelazar entre sí".

Mu Chen parpadeó y comenzó a sentir algo de repente. Continuó jugando con él y mostró su logro al discípulo.

En respuesta, Gu Yunjue, radiante, sostuvo los dedos de Mu y mostró el gesto correcto.

Debajo había un espacio abierto. Debió haber una pelea ya que los árboles y el suelo fueron dañados. Podrían ir ahí para descansar.

Cuando estaban fuera de casa, la gente ciertamente temía ser atacada por falta de poder del alma. Habían visto demasiadas muertes y robos en su camino. Aunque sus cultivos eran mucho más altos que el promedio, los dos se mantuvieron alerta, manteniendo un rico poder del alma en caso de emergencias.