La pequeña Dixon. ~Chandler Riggs.

Capítulo 31: Marzo. {maratón 1/3}

|Narra _____|

Marzo.

Otro mes más adentro de Alexandría, lo bueno es que por ahora es un buen lugar para vivir, pero alguna u otra falla se encuentra acá dentro. 
Como por ejemplo: El otro día habían entrado Walker's mediante un agujero en el muro, y ahora la otra vez, entraron otros diez más. Pero la razón se desconocía, hasta ahora.
Ayer encontré junto a Franky y Clementine otro hueco más en el mismo muro. Para mi alguien lo esta haciendo a proposito, porque si no ¿Que otra respuesta o razón le dan a esos agujeros que parecen de un día al otro? No pueden decirme que son los Walker's porque ellos -por lo que se- no pueden destruir piedra.

|FlashBack|

—¿Que es eso? -preguntó Clementine agarrada de la mano de Franky.

—¿Que cosa, cariño? -le pregunté mirándola.

—Ese agujero -respondió señalando la muralla.

¿Que agujero? Que yo sepa no había huecos o alguna mala construcción por acá cerca, pero al parecer me equivoco. Ya que miré para donde señalaba y estaba en lo correcto. Había un gran agujero donde se había encontrado el anterior. que estaba tapado.

—¿Que....? -dije atónita. 

Franky también miró el agujero y fueron corriendo hasta acercarse.

—¡Cuidado! -les advertí, tal vez podría salir algún Walker de tremendo hueco, ahora sabemos la reacción de porque esos diez Walkers anteriores.

Ellos no se dieron vuelta e hicieron como si me ignoraron, levanté una ceja y sonreí mientras negaba con mi cabeza.
Los chicos de ahora.

Me acerqué a ellos, les tengo que avisar a los demás, así saben cual es el problema.
Además tenemos que saber quien es el/la causante de todo esto.

—¿Que hacemos, ___? 

—Vayan avisar a los demás. -le respondí a la pregunta de Clementine y ellos asintierón yéndose de mi vista.

|Fin FlashBack|

Y fue así como se enteró Douglas, Rick y Nicholas.
Ya los de la sección de construcción lo habían vuelto a sellar. No había más agujeros, o eso creo.

También les conté a ellos y mi padre, que para mi parecer alguien está haciendo los agujeros.
Alguien quería llevar todo esto a la borda, o era alguno de afuera.
Todavía no lo sabemos, pero dijeron que nos pongamos a investigar y si vemos algo raro que avisemos.

—____ -me llamó una voz sacandome de mis pensamientos.

—¿Que ocurré? 

—Gracias por todo. -me sonrió.

—¿Porque las gracias? -dijé mirándolo de una manera extraña, no entendía porque lo decía.

—Por ser mi amiga, y apoyarme en todo lo que me pasa. 

Le sonreí y lo abracé, él me devolvió el abrazo.

—No hay de que, siempre estaré. -le susurré en su oido, noté como se estremeció y sonreí nuevamente.

Carl Grimes, un chico extraño, bipolar, tierno, gracioso, enojón, odioso y muchas otras cualidades más.
Se que empezamos con la pierna izquierda, pero ahora creo que ya pasamos esa etapa.
Ahora se que vamos a poder ser amigos, y confiarnos el uno al otro.

El invierno ya se había ido, ahora estábamos en primavera.
Era 21 de marzo el 2015.
Vuelvo a repetirlo, para mi esta pasando muy rápido en Alexandría.
¿Algún día, iba a terminarse el Apocalipsis? o ¿Durará toda la vida? 
Esa pregunta no tendrá respuesta, siempre será una duda.
Hasta que podamos saber la verdad.

—Si piensas así siempre, tu cabeza explotará. -dijo sacándome -nuevamente- de los pensamientos y con un tono burlón.

—Cállate. -le pegué levemente en el hombro y se lo sobó susurrando un leve :"Ouch". -Marica. -dije bromeando.

—¿Que dijiste? -dijo firme.

—Marica.

—Retira lo dicho. 

—Ma Ri Ca -sonreí maliciosamente, separando las sílabas.

—Oh... no debíste hacer eso. -me amenazó, no entendía porque lo decía. Iba a repetirlo pero empecé a sentir sus manos en mi cuello.

Joder, ¡Cosquillas! No... ¿porque me hacen sufrir así?

—Pa...ra.. -supliqué mientras seguía sufriendo y poniéndome como un tomate por la risa.

—Retira lo dicho. -repitió.

—No...lo..ha..ré- -dije firme, la panza ya me estaba doliendo.

Él hizo oídos sordos y siguió haciéndome cosquillas, se encontraba -literalmente- sobre mi, torturándome.
Si, torturándome. ¿Saben que dijeron que las cosquillas son una tortura? Pues lo son.

—B...as...ta. -intenté decir, pero él continuaba. -Me. .tor..turas. -dije haciendo puchero, mordiéndome el labio para no reír más.

—¿Que carajos esta sucediendo acá? -mierda, era mi papá, estaba enojado.

Sentí como Carl dejaba de hacerme cosquillas y las torturas terminaron ¡Aleluya!
Pero ahora había otro problema.
Daryl celoso Dixon, estaba demasiado celoso.

—¿Que? -preguntó Carl. Lo miré amenazadoramente, que no meta más leña al fuego.

—¿Porque estaban cogi.endo en medio del parque? -dijo alterado.

Empeé a tocer y noté como Carl me hacia palmadas en la espalda, nos sentamos y luego Daryl se sentó enfrente nuestro.
Iba hacer nuestro fin.

—¡Papá! No estábamos haciendo eso. -dije sacándome el color rojo de mis mejillas.

—Eso parecía. -dijo él mirándonos.

Rodeé los ojos y miré a Carl, estaba como yo.
Y mi papá no hacia nada más que decir idioteces.

—¿Saben que deben usar protección?

—¡Daryl! -grité.

—Solo les adviertó. -nos señaló con el dedo, cuando me señaló rodeé -nuevamente- los ojos y lo fulminé con la mirada.

—No vamos hacer nada. -advirtió Carl, yo asentí.

—Somo amigos. -dijimos al unísono. Mi papá nos miró y ¡bingo! otra embarrada más.

—Ajá, amigos. -susurró.

—¡Si! A M I G O S  -dije deletreando la palabra.

—Tengan cuidado. -dijó comenzando a reír- 

¿What the fuck?
No entendí nada, ¿porque se ríe? 

—Era broma. -siguió riendo, miré la cara de Carl y estaba igual de confundido que yo. -Solo quería asustarlos, se que nunca estarán juntos y que son amigos. -me guiño un ojo, luego señaló  Carl- Pero... te vuelvo a decir lo de antes -dijo amenazadoramente hacia él. -Le tocas un pelo a La Pequeña Dixon y te corto ya sabes que. -dijo mirándonos- 

Había dicho lo mismo que cuando tuve la pesadilla.
Lo bueno es que es una broma, porque y me iba asustar. Y  miren que nada me asusta.

—Bueno, cuando terminen de hacer lo que estén haciendo. -pusó una mueca de asco, y prosiguió- acuérdense que tenemos que investigar sobre los agujeros en el muro. -ambos asentimos y luego se despidió.

Cuando mi papá se fue, nos dimos vuelta viéndonos uno al otro y empezamos a reírnos por el comportamiento de Daryl.
Hace mucho no me había reído así. Me hizo acordar la primera vez que me reí después de que todo esto comenzara, que fue cuando Carl escribió en la puerta lo de su zapato. Y Michonne la exagerada exageró toda la situación. Por eso piensa que terminaremos juntos.

—____ siempre quise preguntarte, lo que te ocurrió en el labio. -me susurró algo triste Carl, porque seguro pensaba que fue por Merle.

Lo miré y asentí. Le iba a contar.

—Fue cuando estaba con Merle, ya sabes, cuando me mantuvo secuestrada. Un día él se enojó demásiado conmigo y bueno... -hicé una pausa y miré su cara de arrepentimiento por preguntar- me comenzó a pegar con mucha más fuerza y me rompió el labio -noté como Carl se ponía rojo, supongo que de la furia. -me lo cocí a mi misma, y así me quedo. -sonreí levemente y noté como me abrazó fuertemente.

—No debí preguntar. Lo siento. -dijo mientrás me abrazaba. 

—Carl, no importa. El pasado, pisado. -susurré en su oído mientras le devolvía el abrazo.

—Tuve que haber estado ahí. -se recrimino.

—No nos conocíamos. -le sonreí y el río levemente.

—Hubiera sido bueno. -me guiño un ojo y le pegué levemente en el brazo.

—Ya, vayamos a investigar.

Él asintió con la cabeza y nos pusimos en marcha para averiguar más acerca de la persona que ocasiona los agujeros en el muro.
Tenemos que averiguarlo en algún momento.

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Maratón 1/3.