Capítulo 86: Inválida.

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|Narra _____|

— ¡Cuidado! —gritó Daryl al ver que un Walker estaba acercándose hacia donde estaba Carl.

Giré mi cabeza junto a mi cuerpo para mirar al Walker y luego apuntar con la  ballesta. Sinceramente, tenía ganas de no disparar. Pero eso sería un asesinato y todo por un estúpido beso. Además de parecer algo desquiciada.
 Sin más solté el gatillo y una flecha salió disparada hacia la cabeza quedando flechada justo en medio de la sien. Sonreí ampliamente de alguna forma burlona y luego hice una reverencia mientras Grimes solamente soltaba negaciones con su cabeza, mezcladas de carcajadas.

— Gracias —comentó al acabar de reírse.

Asentí con la cabeza ante su agradecimiento y luego fije la vista en mi padre. El cual me estaba mirando fijamente y al parecer no entendía demasiado la situación que estábamos viviendo. Seguramente tenía demasiadas preguntas acerca de lo que ocurría ahora mismo, pero no iba a poder responderlas. Solamente me dedicaría a matar a los Walkers y recorrer el perímetro. O lo que haya querido hacer Daryl antes de salir del Reino.

Daryl Dixon era una persona como cualquier otra, salvo que relacionalmente somos una familia, ya que resulta que es mi padre. Y eso es lo que me dijo mi madre antes de morir. Nunca lo había mencionado, y tenía que salir con el tema cuando todo esto comenzó. Sin dudas, se lo tenía bien guardado ya que no era algo que no tendría que hablarse. Pero tampoco había tiempo para hablar, ya que de chica él no sabía que existía por lo que le dijo Merle poco tiempo después de que yo naciera.
A veces puede parecer una persona dura, seria y atrevida. Que quizás pueda llegar a ocasionarte un poco de miedo, pero cuando llegas a conocerlo es la persona más agradable que conozcas. Bueno, no tanta exageración, pero podemos decirle de esa manera. En fin de cuentas, solamente actúa como tal debido a que se siente un completo desconocido con las personas. Por ejemplo su vida con Rick, cuando se conocieron no se tenían tanto cariño ya que por miedo estaba lo que había pasado con su hermano de que quedo en una terraza, o algo así me contaron. Por eso no tuvo buena confianza, pero ahora se pueden llegar a ser hermanos. Y podría llegar a ser mi tío (ahora que lo noto, Rick seria mi tío… y Carl seria mi primo… y somos novios ew).

— ¿Eso es un caballo? —pregunto Carl señalando hacia la izquierda.

Ambos —mi padre y yo—, giramos la cabeza hacia donde había señalado Carl. Todavía sentía cierto rencor hacia él, por gustarle el “beso” a un chico le tiene que gustar los besos que le da su novia no el de las otras personas. Como Luna.

— Sí. — afirme mientras miraba al caballo, era negro y era muy bonito.

— No tenemos nada con que atraparlo, tendríamos que ver otro día. —hablo nuevamente Carl y Daryl asintió con la cabeza mientras tenía en la boca una rama.

¿Cuándo había agarrado eso y se lo había puesto? Rodé los ojos al verlo. Parecía un campesino que ponía esas pajas en sus dientes. Solté una carcajada al imaginarme a mi padre vestido así y ambos me miraron extrañados.

— ¿De qué ríes? —me preguntó Dixon.

— Nada. —Respondí negando con la cabeza mientras me daba la vuelta para regresar. No se podía hacer nada con el caballo, así que no tenía nada que hacer con él.

Seguimos caminando mientras Daryl nos enseñaba como rastrear, como en los viejos tiempos. Cuando salía yo sola con él. Y ahora se tiene que meter Carl. Creo que tuvo un golpe de suerte al que yo no fuera una zorra al responderle o tratarlo mal. Si no que fui lo más serena que pude haber sido alguna vez en mi vida y creo que eso no fue de mi agrado. Yo siempre fui una de esas personas que ponía los puntos y demás. Pero era un reto, y está bien.

«No te engañes, sabes que no está bien»

La pequeña Dixon. ~Chandler Riggs.Where stories live. Discover now