La pequeña Dixon. ~Chandler Riggs.

Capítulo 14: Rabia.

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Estábamos todos reunidos en un círculo alrededor de Matthew y Alexa, los cuales habían decidido contar toda la verdad acerca de su traición, ya que yo le había dicho a Alexa que era el momento.
Por otra parte, mi tobillo había sido revisado por Carol. Tenía una inflamación, ya que la bala había perforado el mismo. Logrando que ella tuviera que cocerme, y demás. Pero por unas 48 hs no tenía suficiente, o mejor dicho, buen apoyo sobre esa pierna para moverme. Porque el dolor no iba a cesar después de unos días.

Pero regresando al tema acerca de la historia de los primos, me acerqué como pude apoyándome sobre los hombros de Mari, sosteniéndome. Al termino de su relato, me solté de ella y me abalance hacia Matthew con toda la bronca posible retenida hacia él, l saber todo lo que me había engañado.

— ¿Cómo pudiste? Confié en ti.

— Lo siento, ya no trabajaba para él. Antes estaba buscándote, pero ahora no.

Le pegaba repetidas veces sobre su hombro, descargando toda mi furia que cargaba contra él en sus hombros. En un momento, ya mi tobillo no aguantaba más e hizo que perdiera el equilibrio. Logrando que él me agarrará, pero comencé a patalear (con la otra pierna) y a seguir pegándole esperando a que alguien me sacara de sus brazos. Me había traicionado y no iba a perdonarle tan rápido.
Carl, al parecer, entendió comprender mis señas y demás, haciendo que me sacara del lío por el cual me había metido contra Matt. Me sostuvo entre sus brazos, y me acomodé para no caerme. Todos nos encontrábamos enojados con ellos, porque eran los traidores y también tuvieron que habernos puesto al tanto. Pero sentían un perdón que ni Carl ni yo íbamos a otorgarles tan fácilmente. Y lo sabía, porque Grimes era parecido en mí con eso. Excepto claro está, que yo no desconfío de la persona que más quiero, Por eso, cuando recordé que Luna estaba alrededor nuestro, y se acercaba. Me separé de Carl, empujándolo e intentando caminar lejos de todo el mundo.

— Gracias.

Murmuré al notar que alguien me agarraba para ayudarme, pero cuando me di cuenta quien era, solté un gruñido y volví hacer el escándalo anterior.

— Matthew, déjala —Saltó en mi defensa Carl.

— No se metan en mi vida.

Amenacé mientras sentía que ahora otro me sostenía, y me alegró al notar que era Daryl Dixon.

— Tenemos mucho que hablar —Dijo Rick hacia Matthew poniendo una mano sobre su hombro, y llevándolo con su prima mientras iban a la dirección de Ezekiel y Jesús.

Seguramente entre los tres iban a comenzar a pensar en lo que iban hacer con ellos. Pero con toda la sinceridad del mundo, ya no me interesaba lo que podrían hacerles. Alexa todo bien, ella me salvó y no me dejó en medio del bosque. Pero Matthew... había comenzado a caerme bien, y quizás a sentir cosas por él. Y todo eso, se fue al drenaje.
Lo mismo con Carl. Ambas personas que más "sentía" hacia mí. Fueron las que más me traicionaron, y es difícil poder aceptar un perdón.

— Veo que sos toda una rompecorazones, hija.

Solté unas cuantas carcajadas ante el comentario de mi papá, y le pegué amistosamente en el hombro mientras me sentaba contra el roble.

— Es de familia.

— Y pegar al parecer también —agregó Dixon ante mi comentario. Lo cual hizo que me sacará una sonrisa y me acercara a él para poder abrazarle.

— Catorce años sin una figura paterna... te necesité tanto.

— Lo sé, y me arrepiento demasiado de no haber podido estar. Lo siento.