Louis por un momento creyó que todo había sido un sueño, su mente no dejaba de pensar una y otra vez con lo que había pasado la noche anterior con el rizado, pero apenas abrió los ojos, consciente de todo suspiró dramáticamente al sentir la satisfacción de la lengua de Harry en su mordida.
—se siente bien... —habló algo dormido el más bajo y el alfa beso la mordida con los labios abiertos haciendo que el omega cierre los ojos al sentir la humedad de su beso.
—es mío... —habló el más alto cerca de su oído para luego aferrarse a la cintura del omega, uniendo la espalda desnuda de Louis con el pecho del alfa— Eres mi omega.
—así es. —afirmó el omega tomando las manos del más alto, que descansaban en su estómago, para acariciarlas.— Eres mi alfa.
—lo de anoche fue asombroso. —admitió el rizado haciendo que Louis se sonroje con una sonrisa avergonzada, sintiendo y como los pies del más alto se acomodaban en los suyos— me encantó todo.
—siento que no puedo separarme de usted luego de lo de anoche. —el más alto sonrió y el omega lo sintió en su cuello, para luego recibir un camino de besos en el hombro.— Quiero estar con usted en la cama todo el día.
—lo estaremos si así lo desea. —le aseguró el alfa mientras que apegaba su entrepierna en el trasero de su omega, provocando que el más bajo soltase un leve jadeo.— Yo desearía repetir lo de anoche...
—harry... —murmuró apenas en un gemido y el alfa sonrió haciendo que el más bajo abriera los ojos.— esto... Mamá... Yo... —balbuceo incapaz de decir algo coherente.
—¿qué ocurre bebé? —preguntó deteniendo sus caderas para continuar besándole la piel al omega.
—amo escucharle decirme bebé. —el más alto sonrió y el omega sintió los labios de su alfa en su piel desnuda de su hombro.— no... no puedes seguir.
—¿no quiere repetir lo de anoche? —habló con voz profunda y el omega casi siente que su corazón se le escapa. Porque claro que quería repetirlo, una y otra vez pero debía tomar los supresores.
—no nos protegimos. —admitió algo preocupado y el alfa sonrió lamiendo su marca.— Ha-Harry... —gimió cerrando los ojos— Debo hacerlo.
—Supresores... —habló el más alto girando al omega hasta ponerlo frente a él, a una distancia mínima logrando que ambos se miren a los ojos.— Con los supresores no voy a olerlo... —Louis estaba levemente sonrojado sintiendo la intensa mirada de Harry sobre sus ojos— Necesito de su aroma.
—debemos protegernos. —el alfa negó acercándose a sus labios— s-si...
—no pasará nada, es mi omega. —el ojiazul perdió la razón cuando los labios del alfa tomaron posesión de los suyos a través de un húmedo beso que dejaba en claro el dominio de Harry sobre su cuerpo.
—no podré... —le habló el ojiazul— no puedo... Debo cuidarme.
—¿teme quedar esperando? —el omega asintió— No debería temer. Esta su alfa a su lado. Siempre.
—no estoy preparado. —admitió casi gritándole por temor a quedar embarazado, no se sentía capaz de serlo. No lo tenía planeado, el alfa sólo le miró algo confundido— No ahora.
—¿cuándo? —preguntó algo asustado alejándose algo de su omega, que ya extrañaba su calor— o soy un problema... ¿jamás querrá?.
—no, no... —negó tomándole los hombros al alfa— no, usted no. Yo sólo no estoy listo para eso ahora.
—¿a qué le tiene miedo? —louis negó.
—sólo no estoy preparado. No puedo ahora. —el rizado asintió viendo sus ojos decirle que aquello que los labios soltaban era cierto.— usted es perfecto, yo soy del problema.
—vale, ¿cuándo tomará los supresores? —el ojiazul alzó los hombros algo nervioso ante la pregunta de su alfa, que tenía su mirada algo entristecida.
—mañana quizá, mamá me los dará... Ella hablará con el médico del pueblo. —el ojiverde asintió queriendo ponerse de pie, quería pensar en lo que pasaba y el omega lo detuvo con sus manos algo nervioso.— no se vaya.
—¿qué ocurrirá si ya hay bebé? —preguntó algo molesto y Louis sintió un dolor en su pecho.— ¿tomará los supresores de todas formas?.
—¿quiere que me los tome? —pregunto el ojiazul sin saber que responder y el alfa negó frunciendo el ceño. Moviendo las sábanas dejando en descubierto el cuerpo desnudo de Louis que estaba algo avergonzado.
El alfa movió sus manos por el pecho del omega para luego, en conjunto con sus yemas, pasear su tacto por la piel del más bajo llegando hasta el bajo vientre. Louis gimió al sentir el calor de sus dedos en esa zona, para luego mirar los ojos de su alfa que parecían gritarle.
—estoy seguro que lo está. —admitió el más alto— Lo siento... Lo está.
Louis iba a decir algo, en serio lo iba a hacer pero los labios de Harry se acercaron a su piel del bajo vientre para comenzar a besarle allí, y el omega ya se había perdido en ese acto. Era quizás la humedad de sus besos, quizás la forma en que las manos del alfa abrieron sus piernas para comenzar a pasearlas por esa área o el simple hecho de sentir su aroma desprenderse de cada beso que le daba a su piel lo que le produjo caer una vez más a sus caricias.
—lo está, lo está, lo está... —repetía el alfa mientras que bajaba sus besos, mordidas y lametones hasta la entre pierna del omega haciendo que este cierre los ojos al sentir sus caricias.— joder Louis, necesito comerlo entero. Lo necesito.
El omega no dijo nada, sólo abrió un poco más sus piernas y dejo que su alfa huela su entrada que goteaba necesitando de él hasta que sus gruesos labios se empaparon de Louis.
El omega gemía fuerte sintiendo como el calor de su cuerpo crecía, tomando su pecho con adrenalina mientras que intentaba mirar a su alfa, pero era en vano. Harry parecía estar desesperado paseando su lengua dentro del más bajo, dejándolo lánguido de tanto placer, gimiendo agitadamente el nombre de su alfa, rogándole compasión. Cosa que alimento más la excitación del más alto.
Quien básicamente lo probó, lo comió e intentó hundirse lo que más pudo, pero su erección lo estaba matando a medida que pasaban los minutos y su lengua continuaba paseándose por su entrada. El más bajo comenzó a impacientar minuto a minuto, se sentía vació.
—por favor... —rogó como si el alfa leyera su mente. Pero para su sorpresa el rizado ya había tenido en mente hundirse en él, lo suficiente como para que los ojos del omega se pusiesen blancos en ese instante.
El omega podía decir que sentir el omnipotente Harry dentro suyo era lo más placentero que había experimentado en su vida, porque no podía dejar de sentir esa oleada de calor dentro suyo, ni la desesperación por aferrarse a sus hombros.
—es perfecto... —gruño el alfa con los labios puestos en su mordida para comenzar humedecerla con la lengua.— todo en usted lo es.
—oh Harry... —se aferro a su torso está vez, bajando sus manos por su piel hasta llegar a la curvatura de su espalda.— necesito más, joder...
Sus manos sintieron como los músculos del rizado se contrajeron por cada profunda y rápida estocada que daba dentro de su omega, incluso Louis experimentó un gemido gutural que casi deja sordo al alfa, que parecía un animal enajenado moviéndose dentro del Louis.
Palpó más de una vez en el mismo sitio dentro del omega, lo enajenó y comenzó a notar como el nudo empezaba a crecer cada vez más. Louis de principio pensó que iba a explotar, el alfa había pasado el límite de lo placentero a lo doloroso, es por eso que el más alto se detuvo sobre los labios de Louis para mirarlo mientras que su nudo acababa de formarse dentro, dejando al más bajo con poco aire en sus pulmones.
—aguante. —le pidió el alfa con una voz seca, pues había notado como el omega le comenzó a hundir sus dedos en la piel de su espalda.
—es enorme. —gimió ahogadamente y el alfa se perdió en su aroma, en el perfume que el omega comenzaba a desprender y se alimento de él.— joder, no puedo.
—si puede... —le corrigió y miró los ojos del omega, calmandolo.— aguante, me derramare...
—me llenará. —afirmó y Harry no pudo decir nada porque comenzó a derramarse dentro del omega, dejando los ojos en blanco de Louis mientras que experimentaba las olas de calor dentro suyo.
—mío... —le gruñó el rizado besando la marca una y otra vez.— un bebé...
—suyo, suyo, suyo... Siempre... —gimió enajenadamente hasta que su respiración comenzó a escasearse.
El omega creía que estaba en el paraíso, se sentía arrebalsado, y el alfa continuaba derramando su amor dentro suyo y ya no podía contenerlo más.
—estoy lleno. —murmuro el ojiazul desesperado— No puedo...
El alfa no dijo nada, sólo le beso los labios para calmarlo, pero eso logro que Louis se sintiera aún más lleno de su amor, inconteniblemente y eso era lo que el alfa quería lograr desde el principio.
Llenarlo de amor.
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—debo ir a ver a mi hermana, algo sucedió con ella. —louis le miró alerta y el rizado comenzó a vestirse.— ¿se quedará o me acompañará?
—le acompaño. —le aseguró y el alfa sonrió viendo como el omega se levantaba para comenzar a vestirse igual que él.— ¿qué le sucedió a su hermana?
—lo más probable es que haya empeorado de salud, ya sabe. —louis hizo una mueca y se acercó al más alto para arreglarle la camisa, abotonandole los últimos botones que tenía abiertos, para luego pasear sus manos sobre su pectoral regalando le una tierna sonrisa que el alfa atesoró con su vida.
—estará bien, cariño. —le regaló un beso en la mejilla y el alfa sonrió con un leve acelero en su pecho, el cual Louis sintió por tener sus manos en esa área.
—cariño... —susurro el rizado mirando sus ojos azules— me gusta escucharle eso...
—usted me dice bebé. —le susurró algo avergonzado y Harry acarició su mejilla.
—usted es mi bebé, Louis. —el ojiazul sonrió para luego sentir un beso en la frente.
—le quiero. —admitió el más bajo y Harry sonrió.— le quiero mucho Harry.
—yo igual a usted. —le tocó el cuello con las manos para luego besarle castamente los labios— mucho...
Louis sonrió cuando el rizado se alejó para continuar vistiendose. Le quedó mirando mientras esté acababa de vestirse para luego suspirar bobamente cuando quedó solo en la habitación. Pues se sintió tan enamorado que por un momento creyó que estaba soñando.
Sin embargo el sueño mental acabo cuando ambos con Harry llegaron a la casa del alfa, encontrándose con Anne algo entristecida en la sala, con un rosario entre sus manos mientras que rezaba.
—¡al fin llegas! —exclamó la mujer cuando vio entrar al rizado a la sala.— La pequeña está mal, muy mal.
—¿qué le ocurre? —la mujer suspiró.
—le cuesta muchísimo respirar, vino el médico y le chequeó pero no pudo ayudar mucho. Ahora ella está recostada, intentando descansar porque todo le cansa mucho. —suspiró dramáticamente acercándose a Harry para poner sus manos en la altura de la clavícula del más alto— estoy asustada, tengo miedo de perderla.
—eso no pasará madre. —le aseguró el rizado— Creame que no pasará, ella sanará. —soltó la mano de Louis para abrazar a la mujer.
Louis se sintió algo incómodo en ese momento por lo que decidió hacerse a un lado para mirar la escena hermosa de ver a su alfa conteniendo a su madre. Era lo más lindo que alguna vez pudo ver.
—hijo, su hermana está mal. —habló mirándole desde abajo y el alfa negó besando su cabellera.
—esto no es nuevo madre, debe calmarse y pensar positivo. —su madre suspiró y le abrazó.— ahora iré a verla con Louis, ¿vale... ? —la mujer asintió— Quédese acá tranquilizadose.
—esta bien. —le sonrió levemente y luego miro a Louis— Por cierto, Hola.
—Buenas tardes Señora Anne, lamento lo de su pequeña. —le habló el ojiazul estrechandole su mano y la mujer sonrió apenada.
—me alegra que seas el omega de mi hijo. —admitió la mujer.
—madre... —rodó los ojos el alfa y Louis rió.
—yo me alegro de que Harry sea mi alfa. —admitió y el rizado le sonrió.
—nunca le había visto sonreír así por nada, ni por nadie. —acotó la mujer y Louis se sonrojó.— eres especial, debes saberlo.
—ya lo sabe madre. —admitió el alfa.— ahora me lo llevaré para que conozca a mi hermana.
—vale, prepararé té... ¿le gusta? —preguntó hacia el ojiazul y el omega asintió.
—me encanta. —le afirmó.
—genial, cuando bajen le serviré. —louis asintió tomando la mano que el alfa le estaba dando para llevarlo a la habitación de su hermana.
—gracias por todo seño... Anne. —se corrigió.
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—¿estás bien? —le preguntó el alfa a la pequeña con ojos oscuros.
—s-si... —susurró la pequeña, Harry sonrió y le regaló un beso en la frente para sentarse a su lado, así tomar la mano de Louis y acercarlo a su lado.— mejor...
—me alegra escucharlo, porque quiero presentarte a Louis... —habló el rizado y la niña sólo sonrió para luego mirar al más bajo.
—lo-louis... —habló la muchacha castaña— Soy Victoria, hermana de Harry.
—hola hermosa. —le sonrió— yo soy... Eh... —miró al rizado y el más alto rió.
—Louis es mi omega, Vic. —la chica sonrió ampliamente para luego ver cómo Harry tomaba la mano de Louis para acercarlo a su regazo, haciendo que este acabase sentado sobre sus muslos.
—¿es Louis de quién esta usted enamorado? —preguntó la pequeña y Louis miró a Victoria con una sonrisa, para luego mirar a su alfa con la misma sonrisa en sus labios.— Aquel Louis que no dejaba de mencionar una y otra vez...
—¿en serio hacía eso? —preguntó el ojiazul bobamente y el alfa asintió.
—si Vic, es él. —admitió— Y si bebé, siempre lo hacía. Me tenía loco.
—¿ya no? —preguntó ofendido y el alfa rió, para luego acercarse al oído del más bajo.
—más aún. —besó su mejilla y Victoria rió.
—so-son... —rió agotada— Son adorables.
Louis rió al igual que Harry, para segundos después de que su conversación con la pequeña continúo, sintió que una de las manos de su alfa tomaron su cadera para tomar dominio de su cuerpo, haciendo que Louis se sienta protegido bajo su tacto.
Y es que probablemente el alfa queria protegerlo del mundo. Para así, sólo hacerlo suyo.