PDV: Momo
—¿Si?— Me volteé a mirarla. Ella me sonrió, tan hermoso, que mi mun- el romanticismo para otro momento, Momo.
La quedé mirando, traía unos shorts cortos, demasiado cortos, dejaban ver sus muslos a la perfección. Una polera negra, y unas vans del mismo color.
—L-Lo siento..— Se acercó hacia mi sin mirarme, mantenía su mirada pegada al suelo.
—¿Por qué te disculpas?—
— Olvidalo— Rodó los ojos.— ¿Podrías darle esto a tu mamá? La mía se lo mandó, ya ves que son muy amigas.
Me pasó un papel, el cual podría ser una invitación, o una carta, no lo sé. Miré a Dahyun y le sonreí de lado, ella me miró un segundo y luego miró a otra parte poniendo los ojos en blanco.
—Ah y... no te juntes con mis amigas.— Me dijo cuando ya iba a voltearme para ir de regreso a mi casa.
— Creía que..— Me quedé callada.
—Nada. No les hables, ¡Para nada! ¿Entendido?—
—Pero-
—¡¿Entendido?!
—¿Acaso somos algo?— Fue lo único que dije, ya me estaba cansando de ese comportamiento hacia mi, pierde su encanto.
—¿De qué hablas?— Me miró como si estuviera loca.
—No tienes derecho a prohibirme nada, no soy tu dueña, o algo así.— Ella se quedó callada, yo me acerqué un poco a ella.
—Sólo no quiero que les hables a mis amigas.— Reí.
—¿Como por qué?— Di un paso hacia adelante, quedando mucho más cerca de ella.
—Por que son mis amigas.— Dio media vuelta haciendo que su cabello diera en mi cara.
—Controla tu cabello.— Dije, luego me Di cuenta de lo que había dicho, es que si soy estupida, ¿Cómo va a controlar su cabello?
—No es un perro, es así, ¿Qué se puede hacer? Nada.—
—Pero
—Adiosito.— Se fue hacia su casa.
Bufé y caminé hacia mi casa, corrí hacia las escaleras ganándome un regaño de parte de mi madre.
—¡No corras muchacha! Y ya siéntate que la comida está lista.— Me tomó de la oreja y me llevó hasta el comedor.
Aveces me pregunto si esa es su manera de darme amor, o me hace bullying indirectamente, es que soy de retraso mental y no entiendo.
Me senté en la mesa, alado de Mina, ella le sonreía a mamá ampliamente y le agradecía.
—Deberías de ser como tu amiga, respetuosa y bien portada.— Papá comenzó a reír, le Di una mirada mortal y él alzó las manos al cielo.
Mina por otra parte también reía, los ignoré y me dispuse a comer.
—Oye mija, ¿Cómo te fue en la fiesta de anoche?— Me preguntó mamá.— Normalmente llegado temprano, y anoche no llegaste.
—Fue...una noche.... Me quedé en casa de Mina, ¿Cierto?— Le Di un codazo para que dijera que si, ella me miró con los ojos abiertos y asintió.
—Si-S-si señora, ella durmió conmigo, en otra cama pero conmigo.— Sonrió, papá alzó una ceja y sonrió divertido.
—Papa.. No pienses que ella y yo...¡No!—
—Vale.— Rió.
Luego de comer, Mina y yo nos sentamos en el jardín a mirar el cielo. Estaba oscureciendo rápido.
—¿Ya decidiste? ¿Qué harás?— Le pregunté cuando ninguna decía nada.
—Creo que... le pediré ayuda a mamá.
—Buena idea.— Las dos reímos. Miré al cielo y suspiré.
De nuevo el silencio hizo presencia, pero no me molestaba ni me incomodaba por que Mina siempre ha sido callada. Me pregunto si piensa en mujeres desnudas, o en Dahyun, o quizás en comida, o japonesas bonitas. Oh, no, eso es lo que pienso yo.
Estaba tan concentrada en mirar el cielo, si eso, que no me Di cuenta de la presencia de otra persona más, aparte de Mina.
—¡¡Minari!!— Al parecer Mina tampoco, por que cuando Chaeyoung le dio el abrazo brincó del susto
—Chae, me asustastes.— Dijo sonriendo, ay estas dos me dan diabetes.
Chaeyoung le plantó un repentino beso a Mina, yo miré a otro lado por que me daba envidia, pero de la buena.
—Lo siento amorsito.— Me fue imposible no mirarlas.— Hola Momo.
—Hola Chae.— Saludé.— ¿Cómo entraste?
—El portón está abierto.— Señaló, yo miré y era cierto. Que despistada.
Chaeyoung se sentó en la falda de su novia, Mina le sonrió, se quedaron mirando por un momento hasta que Chae tomó sus mejillas y las apretó.
—Deja, Chae, deja eso.— La miró "enojada", ay que ternura.
—Vale— Se cruzó de brazos, luego miró a otro lado y sonrió.— Oh Dahyun, ven. ¿Dahyun?
Dahyun se acercó a nosotras, le sonrió a Mina y se sentó, me siento ignorada, ni siquiera me miró. Me crucé de brazos y miré a otra parte nuevamente.
—Hace frío.— Dijo Dahyun.
—¿Y a mi qué me importa?— Dije grosera, Mina me pegó en el hombro.
—A ti no te importa nada, ni debe de importarte.— Me contestó.
—¿Y qué haces aquí, Chae?— Le preguntó Mina.
—Estaba en casa de Dahyun, y cuando salí, te vi.— Dijo.
—Eh, Chae, tengo que decirte algo...¿Podemos irnos lejos de Momo?— ¿Ahora que tienen contra mi? Ash.
Chaeyoung asintió riendo y las dos se alejaron de nosotras. Yo me acerqué un poco más a Dahyun.
—¿Y pensaste en mi?— No sé por qué dije eso.
—¿Cuándo?—
—En esta última hora.
—No, no pensé nada en ti, Y.. ¿Tú?— Ya de todas formas lo sabía.
—Pues... No hice otra cosa.— Dahyun miró a otro lado, se movió un poco incómoda.
Me levanté del suelo.
—Buenas noches.— Dije antes de entrar a mi casa.
Luego de un rato Mina me llamó me dijo que no se quedaría en mi casa, por que iría con la enana hasta su casa. Eso me dio a mal pensar, como siempre.
Esta noche sería aburrida, nadie me hablaba en excepción de Tzuyu y Sana, con Tzuyu hablamos de salir otra vez, y con Sana de cosas sin importancia. No es que Sana no sea importante, claro que lo es... como todas las mujeres en mi vida, y así de buenas como ella... bueno
Ya me está dando sueño. Me despedí de las dos y me levanté de la silla. Me cambié de ropa a una más cómoda y me acosté en la cama. Aunque mañana era domingo, y es muy temprano, mañana se supone que voy a... misa con mamá....ahh mierda. Ya tenía planes de ir a casa de Im Nayeon y espiar a las porristas.
Solo espero que mamá no me levanté gritando "HOY ES DOMINGO DE MISA, DESPIERTA" que infierno.
Ayer iba a actualizar... Pero como soy bien aplicada en la escuela:V me fui a estudiar ;-;
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