Bad News || Derek Hale [Teen Wolf] (1)

Cap. 36

—¿Tu...?

—Yo.

—Tu—, repitió Lydia, sin apartar su verdosa mirada del hombre.

—Yo...—, Peter suspiró cansado.

—Y yo. Bonito día, ¿Cómo están?

Pasó por el lado de su amiga, adentrándose en el apartamento, ignorando las miradas que sostenían ellos dos, como una Guerra Fría a punto de dejar de ser "fría."

—Derek, tenemos una visita—, Peter gritó hacia el interior, refiriéndose a la pelirroja, obviamente; pues a decir verdad, era como si la teñida ya viviera allí.

Unos pasos perezosos resonando por la estancia, siguieron a las palabras de Peter. Llevó su mirada al origen del sonido.

En cuanto vio a Derek no dudó en enredar sus brazos alrededor de su cuerpo. Queriendo sentirlo cerca, sentir su olor, ver sus ojos.

Enterró la cara en el hueco del cuello del alfa, queriendo guardar en su memoria aquel olor envolvente, tan característico de él. Aquel olor que hacía a su omega delirar.

Lo necesitaba. De una forma casi insana.

Sintió las manos pesadas de Derek ubicarse en su cintura, apartándola un poco. Una bocanada de aire frío circuló en su pecho, ante aquel gesto de rechazo.

Abrió los ojos, buscando su mirada esmeralda en busca de respuestas. Juntando sus miradas finalmente.

—¿Estás bien?

¿Solo eso? Un maldito "¿Estás bien?" No, Derek, no estoy bien, pasé la noche preocupada, sintiendo un dolor inimaginable, y solo preguntas eso. ¿"Estás bien", en serio?

—Dolía. Mucho. Duele—, se corrigió casi de inmediato. Tomando la cara de Derek entre sus manos—. ¿Qué pasa? Dime.

Miró al hombre a los ojos, intentando averiguar algo, ver lo que sea que su mirada le dijera.

Analizó sus facciones, el ceño fruncido como de costumbre, los labios casi curvados hacia abajo, la mueca seria y firme...

Él cerró los ojos bajo la atenta mirada de la pecosa; al abrirlos nuevamente, sus iris verdosos eran reemplazados por la imponente luz de su lobo. Brillaban de un brillante color azul.

No rojo, no amarillo. Azul.

Es un beta. Dejó de ser un alfa. Renunció a ser un alfa.

Lo abrazó nuevamente, sintiendo esta vez los brazos de él enredarse alrededor de su abdomen con necesidad. Con la necesidad de estar cerca del otro.

Él le susurró al oído todo lo que había pasado, murmurando  cada tanto cuánto lamentaba haberla hecho pasar por tal tortura. Aún abrazado a ella, respirando el aroma de su omega.

Salvó a Cora, renunciando a su poder. Sabiendo que podría morir en el intento.

Él la arrastró hasta el sofá de la sala, donde casi la obligó a sentarse sobre su regazo. "Casi", solo porque ella estaba más que encantada con la idea, solo porque no puso resistencia alguna.

Cualquier ápice de enojo hacia Derek había desaparecido.

Pero es que ¿con qué derecho se enojaba con él por besar a Jennifer, cuando Calvin la había besado a ella y no hizo nada para detenerlo?

Aquel enojo que llegó a sentir en su momento, ahora le parecía absurdo, estúpido -se sentía estúpida. Estúpida y llena de culpa, por haberlo tratado como el peor ser en la tierra, por haberse distanciado de él.