Cap. 30

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—¿Qué pasó con Derek y la chica del chelo?—, escuchó a Stiles cuestionar justo en el momento en que entraba al departamento de Derek.

¿Qué chica del chelo?

—La pregunta es, ¿Qué pasó contigo?—, Peter se desvió un poco, viendo a la teñida llegar con una apariencia bastante lamentable.

Los ojos de Valeska vacilaron, alzándose brevemente del suelo, hacia el hombre. Se encogió se hombros, cerrando la puerta tras de sí.

No respondió, y al notarlo, Peter siguió contando aquella historia.

Y a decir verdad, a Valeska le estaba costando mucho trabajo escuchar y mantener el hilo del relato.

Un Derek joven, y una chica de un chelo. Luego se enamoraron y... ¿qué le había pasado a la chica? No escuchó.

Había caído ante la tentación.

Se había inyectado. Obviamente al inicio se había sentido como la puta gloria, pero para ese momento ya se hallaba casi llorando por más droga para aliviar el malestar de la abstinencia que abrazaba su cuerpo.

( . . . )

—Quitar una vida inocente te quita un poco de alma. La oscurece. Cambia el amarillo, dorado brillante, en azul frío como el acero. Como los míos—, terminó Peter, enseñándole sus fanales de lobo a los adolescentes allí.

El estar sufriendo, tiritando, temblando por más morfina, no fue impedimento para escuchar la historia que Peter contaba.

La chica del chelo... Derek la había matado.

Revisó su celular al escuchar una notificación.

Era de su madre. Rodó los ojos.

"Calvin ya llegó. Pensé que tal vez podrías ir por él".

Decidió, por el bien de su poca -restante- salud mental, ignorarla.

—¿Qué es esa cara?

—¿Qué?

—Esa cara que me hace querer golpearte.

—Oh, lo olvidé, eres la hermana de Derek.

—Sí, y tu el hermano de ella. Y créeme, tienen la misma cara—, escuchó a Cora hablar con Stiles.

—Es que no le creo—, explicó su hermano en voz baja, confidente.

El efecto de la droga casi se había disipado, aclarando su mente poco a poco, dejando como remanente una insoportable migraña y unas insidiosas náuseas.

Aún así, solo en ese momento, notó que Derek no estaba en el departamento y parecía que no volvería pronto.

Su omega lloriqueó necesitando a su alfa.

Peter giró su mirada hacia ella, tan sutil como pudo. ¿Acaso había escuchado lo que creía haber escuchado? Temía que así fuera.

—Me tengo que ir, me necesitan—, le informó a Stiles a la vez que se levantaba del sofá, donde se la había pasado las últimas horas acurrucada.

Su hermano y su cuñada hablaban. Y sabía que Stiles la había notado extraña, y que seguramente más tarde tendría un interrogatorio por parte de él. Pero en esos momentos, aquello era lo de menos.

Salió del departamento escribiendo un mensaje en su celular.

"¿En dónde estás? Te necesito".

Bad News || Derek Hale [Teen Wolf] (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora