𝟶𝟷.𝟶𝟾

8.3K 663 109
                                    

Nos gusta pensar que somos seres racionales

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Nos gusta pensar que somos seres racionales. Humanos. Serios. Civilizados. Considerados. Pero cuando todo se viene abajo, aunque sea un poquito, se vuele claro: no somos mejores que los animales. Tenemos lugares opuestos. Pensamos. Caminamos erguidos. Hablamos. Soñamos. Pero en el fondo, seguimos arraigándonos en el lodo primigenio. Mordiendo, atrapando, escarbando una existencia en el mundo frio y oscuro al igual que cualquier rana o perezoso.

...

"Quiero que para mañana te vayas de mi casa".

Y eso fue lo que hice.

Después de llorar por un largo tiempo en el estacionamiento, fui al remolque de Derek, destroce un poco de sus cosas, hice mis maletas y me fui.

Al principio no sabía qué hacer ni a donde ir. Derek había dejado en claro que no quería verme. Y yo no tenía nada porque pelear aquí. Así que decidí irme al aeropuerto.

Quería estar lo más lejos posible de Seattle por lo tanto tomé el primer vuelo a Nueva Orleans que había. Mi primer plan era cambiarme de identidad y empezar una nueva ahí. No sé, hacer mi residencia o volver hacer otro internado, lo que sea.

Pero después de pensar mucho descarté esa idea, no conocía a nadie que me pudiera cambiar la identidad y de seguro costaba mucho.

Cuando llegué a Nueva Orleans tomé un crucero de dos días y una noche por el río Mississippi. Ya que no tenía a nada ni a nadie, lo único que quería en mi vida era morir.

Ese era el plan número dos, me iba a embriagar durante dos días con margaritas y cuando ya estuviera cansada me iba aventar por la borda y me ahogaría o me comerían los cocodrilos, lo que suceda primero. Y de esa forma iba terminar la vida de Liv Shepherd.

Y todo estaba yendo bien con el plan, me senté en la borda y lloraba mientras disfrutaba de las margaritas y de la vista al río. Esa noche pasaron una película en el barco, se llamaba "Mente Indomable". Se trataba de un chico que tenía problemas de actitud pero que era un genio en matemáticas.

La película no tenía nada que ver conmigo, pero me hizo pensar, yo soy una buena doctora, podría ser la mejor sí quisiera. Solo tenía que esforzarme y bueno sí, dejar mi adicción. Podría ser mejor que Cristina o Derek. Podría callarles la boca cuando me vean ganando mi primer Harper Avery . Yo podría ser la mejor residente del mundo. Y lo decidí, ya no iba a suicidarme, iba a pelear por mi misma. Cuando terminó el crucero, volví a Seattle.

Y así es como llegamos ahora, ya había pasado un mes y medio desde que vivía en el hospital y desde que Derek me botó de su casa. Yo no hablaba con él, ni él intentaba hablar conmigo. Solo Mark, Izzie y George se habían dado cuenta de nuestra separación, intentaron saber por qué, pero no les respondí. No quería que se enteraran de mi adicción.

𝐏𝐥𝐚𝐬𝐭𝐢𝐜 𝐒𝐤𝐢𝐥𝐥𝐬  -Grey's AnatomyWhere stories live. Discover now