Ese tipo de amor convierte a un hombre en un esclavo. Ese tipo de amor envía a un hombre directo a su tumba.
Me vuelvo loco, loco, loco bebé. Lo enciendes, luego te vas. Si, me vuelvo loco, loco, loco por tu amor.
¿Que puedo hacer cariño?
Me sie...
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La vida humana está hecha de decisiones: sí o no, dentro o fuera, arriba o abajo. Y luego están las decisiones que importan: Amar u odiar, el ser un héroe o el ser un cobarde, pelear o rendirse, vivir... o morir.
...
–¡Derek! –grite mientras lo veía caer al suelo por la fuerza de la bala en su pecho.
Corrí a su lado y me agaché para intentar detener la hemorragia. April estaba detrás de mí, también lloraba, ella estaba balbuceando cosas sobre su familia, su vida y no sé qué más. No le preste mucha atención, estaba concentrada en Derek y ni siquiera me había dado cuenta que el Sr. Clark me estaba apuntando con su pistola.
–¡Levántate y aléjate de él! –me ordenó.
Yo negué con mi cabeza. No quería dejar a mi hermano.
–Liv, vete. Por favor. –susurró Derek con voz temblorosa, estaba utilizando la poca fuerza que le quedaba– Estaré bien. Por favor, vete.
–Ya lo escuchaste, corre. No te salvaré dos veces –el Sr. Clark estaba con los ojos llorosos y su voz era nerviosa.
Yo no era su objetivo. Él no quería matarme, aunque tampoco dudaría en dispararme si no me iba. Aun así, me quede en el mismo lugar. Todo mi cuerpo temblaba, sentía frio, mi corazón latía como nunca antes, y a pesar de la amenaza del Sr. Clark, seguía al lado de Derek. No imaginaba dejar a mi hermano solo.
–Salva tu vida, Liv... Vete –Derek apenas si podía hablar. Su sangre estaba en el piso, en mis manos, en su camisa, en su rostro–. April... llévatela.
–Vámonos... Liv, vámonos. –April me agarró de la mano con fuerza y me llevo hacia el pasillo continuo.
Al llegar allí, ella se sentó en el suelo y se puso a llorar. Empezó a hablar sobre Oprah y su programa. Estaba divagando, seguía en shock.
Yo también seguía en shock, mi mente no dejaba de reproducir la escena de Derek siendo disparado, la sangre que salía de su cuerpo, sus ojos irritados, su respiración entrecortada. No podía. No podía soportar esto.
Solo una puerta nos separaba del cuerpo de Derek, capaz él ya estaba muerto. ¿Qué clase de hermana era? Lo había dejado. Debí haberme quedado. Debí decirle que se alejara de ese hombre. Debí interponer mi cuerpo en el momento que el Sr. Clark disparo. Debí haber hecho algo.
–Debemos volver. Debemos volver –repetía una y otra vez mientras daba vueltas por el pasillo–. Por favor, que este vivo. Capaz si lo está. Debemos volver, April. Debemos volver.
