Ojos que no ven

35. Impaciencia

Los nervios revolvían el estómago de Bakugou mientras observaba irritado por la estrecha rendija de la puerta entreabierta frente a él. A su lado, Todoroki y Uraraka no lucían mucho mejor que él, el chico mostraba un rostro preocupado y la chica se mordía las uñas con inquietud. Era evidente que los tres estaban pensando lo mismo pero ya era demasiado tarde, a estas alturas lo único que podían hacer era rezar con todas sus fuerzas para que todo saliera bien.

Si tan solo se hubieran puesto de acuerdo antes... Lo único que tenían que hacer era decidir un plan pero en vez de eso habían estado discutiendo por horas sobre la mejor forma de colocar el micrófono en la sala de profesores. Desgraciadamente, con lo que ninguno de los tres contaba era con la poca paciencia de su nueva compañera de equipo Hatsume, quien harta de esperar, cogió el micrófono y anunció que ella se encargaría. No sin antes soltar un comentario quejándose de lo poco lanzados que eran.

- ¿Por qué mierdas no la detuvisteis? - Preguntó enfadado Bakugou.

- ¿A caso tú hiciste algo? - Se defendió Todoroki.

- Bueno... No... No pensé que lo fuera a hacer de verdad... - Replicó Bakugou molesto - Además vosotros estabais más cerca de ella.

- Por dios no empecéis a discutir otra vez - Interrumpió Uraraka a Todoroki quien estaba a punto de replicar - Oh no... ¿Qué vamos a hacer si la descubren?

Ninguno tenía respuesta, así que se limitaron a mirarse nerviosamente entre sí. Desde luego, ninguno de los tres esperaba que Hatsume se lanzara hacia el interior de la sala de profesores de aquella manera, con el micrófono en la mano y sin pensarlo dos veces. Si los profesores llegaran a descubrir el micrófono no podrían espiar en la sala de profesores,  podían irse despidiendo de obtener información sobre Deku.

De repente un sonido llamó la atención de los tres provocando que se apresuraran a mirar de nuevo por la estrecha rendija de la puerta de la sala de profesores. Y entonces, una fuerte sensación de déjà vu invadió a Bakugou, por un momento fue como si volviera a estar en la desastrosa habitación de Hatsume. El escritorio frente a la chica estaba ahora lleno de los trastos metálicos que la chica se empeñaba en llamar inventos. Los tres observaron atónitos como la chica empezaba a cogerlos uno por uno y se los mostraba emocionada a su profesor.

- ¿Qué diablos está haciendo? - Susurro Bakugou pero sus compañeros parecían tan confusos como él.

La inventora claramente disfrutaba mientras mostraba sus últimas creaciones a su profesor, pero tal vez estaba demasiado emocionada, ya que al devolver uno de ellos a la mesa puso demasiado ímpetu y varios de ellos salieron volando en todas direcciones.

- ¡Oh no! - Gritó Hatsume disgustada - ¡Mis bebés!

La chica se apresuró a recogerlos mientras su profesor se agachaba para ayudarla.

- Ten más cuidado Hatsume - La regañó su profesor.

- ¡Claro! Lo siento mucho, me emocioné de más ¡Mis pobres bebés! - Se lamentó Hatsume acercándose a la mesa para dejar allí sus inventos.

Entonces Bakugou observó atónito como la chica, en apenas un segundo, metía la mano bajo la mesa y la volvía a sacar. No podía ser... ¿O si?

- No puede ser - Susurró Uraraka - ¿Acaba de...?

- Colocar el micrófono - Terminó Todoroki sorprendido.

De repente Hatsume empezó a recoger todas sus cosas rápidamente.

- Será mejor que me vaya, mis pequeños necesitan mantenimiento después de esa caída - Dijo de repente la chica guardando todo en su bolsa - Volveré cuando estén perfeccionados ¡Adiós!

- Eyy, Hatsume, ¡Espera! - La llamó su profesor.

Pero la chica no esperó y pronto estuvo fuera de la sala junto a sus atónitos compañeros.

- No sé por qué parecéis tan sorprendidos pero será mejor que dejéis de hacer esas caras tan estúpidas, salgamos de aquí antes que alguien nos vea - Declaró la chica mientras se alejaba rápidamente por el pasillo.

- ¡E-espera! - Gritó Uraraka.

Sin embargo la chica no los esperó, los tres se apresuraron a seguirla y pronto se encontraron de nuevo en la caótica habitación de la inventora.

- No puedo creer que simplemente entrarás y lo pusieras, así sin más - Dijo Uraraka sorprendida.

- Estáis exagerando chicos, ayyy sois demasiado prudentes, así no llegaremos a ningún lugar - Se lamentó Hatsume.

- La prudencia es importante para alcanzar tus objetivos - Replicó Todoroki.

- Jijijiji, no tienes ni idea - Se rio misteriosamente la chica - Lo importante no es la prudencia, sino que no te pillen.

Hatsume le guiñó un ojo a Todoroki al decir las últimas palabras enviando junto al gesto un escalofrío que le recorrió la espalda al chico.

- BUAJAJAJAJAJAJA - Reía escandalosamente Hatsume - Os sorprendería las cosas que he hecho para poder probar a mis bebés.

- Bueno, lo que sea - Interrumpió Bakugou, harto de la extraña conversación - ¿Qué vamos a hacer ahora? ¿Nos turnamos para escuchar el micrófono todo el día?

- Jejeje, turnarnos dice, que inocente - Se burló Hatsume mientras miraba a Bakugou altivamente.

- Te estás riendo mucho hoy ¿No te parece? - Replicó Bakugou empezando a perder la paciencia.

- Bakugou-kun relájate... - Dijo Uraraka agarrando a Bakugou del brazo, como si temiera que atacara a Hatsume.

- Dejádmelo a mí, conectaré el micrófono a mi ordenador, grabaré y analizaré todo lo que digan en la sala - Dijo Hatsume ignorando totalmente a Bakugou quien parecía estar a punto de abalanzarse sobre ella - Si los profesores dicen algo sobre Midoriya o sobre la liga de villanos os lo haré saber.

- Pero... - Intentó hablar Bakugou pero fue interrumpido por Todoroki.

- Entendido, te lo dejamos a ti entonces.

- Adiós por ahora Hatsume-san, avísanos si pasa cualquier cosa - Se despidió Uraraka.

Bakugou no estaba muy convencido de dejar todo en manos de aquella chica tan estrafalaria pero Uraraka y Todoroki lo obligaron a salir de la habitación antes de que pudiera replicar.

- ¿Realmente os fiais de ella? - Preguntó Bakugou una vez fuera.

- No es como si nos fuera a delatar - Replicó Todoroki - Si nos pillan ella también estará en problemas.

- Eso es verdad pero aun así no puedo confiar en ella, muchas cosas podrían salir mal ¿Y si el micrófono falla? ¿O no nos informa? ¿Y si...?

- Entiendo como te sientes pero no nos queda más remedio que confiar en ella - Interrumpió Todoroki.

- Ya lo sé, pero no me inspira confianza, es rara.

- Eso no te lo voy a negar - Dijo Uraraka - Pero por lo menos es divertido cuando está ella.

- Si tú lo dices.

Bakugou no dijo nada más y simplemente se marchó dejando a sus dos compañeros tras él. Sabía que estaba siendo estúpido al tratar así a la que probablemente era su única fuente de información. Debería haber sido más amable con la chica, si esta decidía dejar de ayudarlos tendrían un problema. Pero la situación lo frustraba demasiado, le resultaba insoportable la idea de simplemente esperar sin hacer nada a que Hatsume descubriera algo. Quería hacer algo, lo que sea, cualquier cosa con tal de estar un poco más cerca de salvar a Deku.

Por desgracia, al parecer "nada" era exactamente lo único que podía hacer ahora mismo. Solo esperaba que la chica no tardara en contactarlos.