Ojos que no ven

11. ¿Dónde estás?

Toda la clase se encontraba reunida en la sala de estar del dormitorio estudiantil. Aizawa los miraba con dureza pero Bakugou no pudo contenerse y golpeó la pared con rabia. Una explosión se formó en el punto en que su mano tocó la pared, creando una quemadura en la pintura, pero eso no podía importarle menos en aquel momento.

- ¡¿Como qué no vayamos tras Deku?! - Gritó Bakugou.

- Bakugou... - Susurró Kirishima a su lado.

- Eso es lo que he dicho Bakugou, no quiero que ninguno de vosotros haga ninguna tontería - Contestó intimidantemente Aizawa - ¿Ha quedado claro?

- ¡Pero sensei! - Replicó Uraraka - ¿Cómo vamos a quedarnos sin hacer nada mientras uno de nuestros compañeros ha sido secuestrado?

- Nadie ha dicho que no vamos a hacer nada - Contestó Aizawa - Solo os pido que vosotros no hagáis nada, dejadnos esto a los profesionales, traeremos de vuelta a Midoriya.

- Pero... - Susurró Uraraka con apenas un hilo de voz.

- Esto no es un juego. Si alguno de vosotros actúa por su cuenta será considerado como una falta grave contra la normativa escolar y se actuará en consecuencia expulsando a todo aquel implicado, tenedlo claro - Amenazó Aizawa fríamente - Sabéis lo que está en juego, no me defraudeis.

Después de decir aquellas palabras Aizawa se marchó y el silencio cayó en la sala de estar. Nadie sabía que decir, las palabras de su profesor les habían impactado. Finalmente, Iida rompió el silencio.

- Deberíamos irnos a dormir, ya es tarde... - Dijo mirando hacia el reloj de la pared que anunciaba la 1am.

- ¿Cómo puedes pensar en dormir después de lo que ha pasado? - Le espetó Kaminari con rabia.

- No es eso lo que yo... - Iida se veía avergonzado.

- Kaminari, no te desahogues con Iida. Tiene razón, deberíamos ir a dormir - Intervino Todoroki - No hay nada que podamos hacer ahora mismo.

- Hay muchas cosas que podemos hacer... - Susurró Uraraka.

- ¿Cómo cuales? - Preguntó fríamente Todoroki.

- Como... No sé... ¡Pero algo hay que hacer! - Replicó dolida Uraraka.

- Tiene razón, ¡No podemos quedarnos sin hacer nada! - Coincidió Kirishima.

- No - Replicó Iida con seriedad - Si lo hacemos la academia no se quedará de brazos cruzados, ya habéis oído a Aizawa-sensei.

- Es cierto - Lo apoyó Tsuyu - Vayamos a dormir, mañana lo veremos con otros ojos.

- No entiendo de qué otra manera se puede ver más que la de estar abandonando a un compañero a su suerte - Dijo Uraraka enfadada.

- ¿Es que acaso tenéis miedo de la academia? - Dijo Ashido - Midoriya es más importante que un simple castigo.

- Entiendo cómo os sentís - Dijo Todoroki - Pero por desgracia ahora mismo no hay nada que podamos hacer.

- Esto podría ir más allá de un simple castigo, podrían expulsarnos - Añadió Tsuyu con voz suplicante - Por favor, vayamos a dormir.

- ¡Aun así! - Exclamó Kaminari.

- ¿Aun así que? ¿Acaso tienes alguna pista? - Preguntó Todoroki con frialdad - ¿Sabes a dónde se han llevado a Midoriya? ¿O quién se lo ha llevado?

- Yo no... - Tartamudeó Kaminari.

- Exacto, por más frustrante que sea no tenemos nada - Prosiguió Todoroki sin piedad - Creedme que yo soy el primero que iría a rescatar a Midoriya sin dudarlo pero no sabemos absolutamente nada.