Paranoia [Teen Wolf]

69. Ahora lo que importa es Stiles

Lydia y Peter volvieron a la sala. Melissa se levantó, noté que estaba en modo madre protectora tanto con Lydia como conmigo. Melissa sabe cuán engañoso puede ser Peter. Él incluso la engañó a ella fingiendo que estaba interesado para tener una cita. Siento que fue hace años atrás.

—Así que, ¿tenemos un plan? —preguntó Deaton. Lydia y Peter se pusieron se pusieron detrás del sofá.

Peter asintió — Scott va a tratar de meterse en la mente pálida y malvada de Stiles para sacar al Stiles real y pálido y traerlo desde la profundidad de su subconsciente. —explicó mirando a mi mejor amigo. Luego se dirigió al veterinario—. Pero no lo hará solo.

—¿Qué quieres decir? —preguntó Scott frunciendo el ceño levemente.

—Alguien tiene que entrar contigo. —se giró lentamente, haciendo todo más dramático de lo necesario. Su mirada terminó posándose en mí. Incluso Stiles también se giró para mostrarme sus oscuros ojos.

—Sarah no puede —dijo Melissa mirando a Peter y a Scott—. Su herida...

—Sólo necesitamos su mente. No su cuerpo. —estableció el hombre lobo aún con una sonrisa. Scott me observó, tampoco parecía muy convencido.

—Voy a hacerlo.

—Sarah, no creo que sea una... —insistió Melissa.

—Es mi hermano, Mel. —interrumpí. Ella apretó sus labios. Terminó asintiendo, me ayudó a levantarme de la silla en la que estaba.

—¿No puedo hacerlo yo? —preguntó Lydia.

—Podrías. Y probablemente funcione por tus habilidades de banshee —explicó Peter—. Pero Sarah... Ella tiene las habilidades de hamingja, que la unen directamente con Stiles. Y además es su hermana melliza. Los mellizos tienen...

—Una conexión única y especial. —terminé la frase. Ya todos habíamos escuchado lo mismo hace no tantos minutos, cuando Stiles amenazó discretamente a Aiden con Ethan.

—Exacto. —asintió Hale—. Así que, sí, contigo Lydia podría funcionar. Pero con Sarah las probabilidades de que funcione son todavía más altas.

Antes de sentarme al lado de mi hermano en el sillón, miré a Lydia — Gracias. —le dije. No sólo por ofrecerse a hacerlo en mi lugar, sino también por darle a cambio a Peter lo que quería.

—¿Cómo lo encontramos? —preguntó Scott posándose detrás de nosotros. De pie justo detrás de nosotros.

Me acomodé ya estando sentada, la herida molestaba pero no más de lo usual. La cabeza me dolía y sentía cómo una fiebre pronto se apoderaría de mi cuerpo. Pero no me importa, no hasta que salve a mi hermano. Era en lo único que podía pensar claramente. Salvar a Stiles. Luego me encargo de mi herida y mi fiebre, luego hablo con Derek y soluciono (o termino) lo nuestro. Todo luego, ahora lo que importa es Stiles.

—Van a tener que mostrarle la salida de alguna forma. —respondió Peter—. Trata de alguna manera de devolverle el control de su mente, de su cuerpo.

—¿Podrías elaborar en el "de alguna manera"? —pedí siendo algo cínica—. No es muy específica.

—Improvisen. —decidió decir. Sentí sus pisadas alejándose del sofá.

—¿Y si no es más que otro truco? —preguntó Scott.

—¿Cuándo van a empezar a confiar en mí? —respondió Peter, fingiendo estar herido.

—Nunca. —dije cortante. No sé si me clavó una mirada mortal o rodó los ojos.

—Me refería a él. —indicó Scott. Es decir, a Stiles.