Parte 39

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  Mientras arreglas el sencillo ramo para Nara, haces hincapié en el puro color blanco de las flores y a tu mente viene la imagen de los lirios y en consecuencia, la de Yuri. Aquellas palabras que te dedicó la noche anterior resuenan en tu cabeza y te sientes un poco mejor respecto a tu situación. ¿Quién diría que un fantasma podría ser tancomprensivo? Te acuerdas entonces de la vez que se materializó en tus brazos, en su cálida piel y su atractivo color canela. Cortas un tallo que no debía ser cortado. Otra vez estás teniendo esos pensamientos tan raros, pero qué ideas tan incomodas. No habría ningún problema si la dueña de tales escenas no estuviera, pues, ¡muerta!
—¿Cuánto falta para la competencia de declamación?— Tratas de distraer a tu cerebro.
—Es el lunes—. Responde Nara.
—¿Y ya pensaste cómo decirlo?
La chica niega con la cabeza.
—Preferiría no hacerlo, pero tengo que...Ya se me ocurrirá algo.

Sueltas un suspiro y el frío metal de tu dije toca tu piel. Dasom. Si la comparas con Yuri, son polos totalmente opuestos. No solo físicamente, pues tu amiga de la infancia posee una piel de porcelana, ojos inocentes, cara algo redonda y su cuerpo no tiene las curvas que posee el de Yuri. En la forma de ser tampoco podían ser más diferentes, mientras que Yuri exige lo que quiere, Dasom prefiere mantener en calma las cosas y callarse si algo le molesta; por decir un ejemplo.
Tu amiga de la infancia te ha acompañado desde que eras un/a niñ@. Si bien desapareció por un tiempo, la verdad no resentiste su ausencia, siempre la tuviste en tu pensamiento con un genuino cariño y, a decir verdad, sientes que al no abrirte con ella como lo hiciste con el espectro; te alejaste de ella, aunque haya sido un poco.

Terminas de arreglar el ramo, aquel tallo que cortaste sin querer no fue ningún problema; tus habilidades de decorado lo ocultaron bastante bien.
—¿Qué te parece?— Preguntas.
—¡Es precioso!— Suelta Nara con emoción.
—¡Bien! El día del concurso lo llevaré a la escuela. Dahye ha estado practicando, ¿verdad?
—Sí, pero no me ha comentado mucho al respecto.
—Ya veo...
—¿Cuánto será del arreglo?
—Mañana te digo, ¿de acuerdo?
—¡De acuerdo! En ese caso ya me voy. ¡Muchas gracias, TN!
La muchacha sale del local con genuina felicidad.

—¡Ya volví!— Avisas al entrar a tu hogar.
—¿Cómo les fue?— Cuestiona tu abuela, quien está en la sala viendo una telenovela.
—¡Muy bien! Vendimos varios arreglos y nos contrataron para los adornos de una boda.
—¡Maravilloso!— Sonríes, te diriges a la cocina para servirte un vaso de agua. Tomas el recipiente y la jarra con el líquido—. Contacté a tu papá.
—¿Y qué te dijo?— Pides saber, con algo de temor.
—Que estará aquí, después de que salgas de la escuela.
Dejas la jarra en la mesa, presionando fuertemente el vaso.

GHOST (Imagina con Yuri/ Yuri y tú) <Por: Kirari Ai>Where stories live. Discover now