Villainous- Brillante estrella fugaz

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Durante toda esta historia nos hemos centrado únicamente en la historia familiar de Flug y Black hat, la misteriosa persona infiltrada, sus intenciones, su relación con Flug, y como olvidar a la organización que hay detrás. Dejemos todo ello a un lado por un momento y centrémonos en un problema que nadie ha planteado.

¿Qué hay del otro empleado?

Sabemos que la persona infiltrada tiene unos intereses, un objetivo, que cuando Black hat o el resto le descubra, morirá entre terribles sufrimientos. Su identidad hasta ahora es un misterio aunque cada cual tiene su candidato. ¿Pero el otro asistente es un mero secundario, plano y sin motivaciones?

Si la persona infiltrada es Namor ¿qué ocurre con Belén?

Si la persona infiltrada es Belén ¿qué ocurre con Namor?

Vamos a dedicar un pequeño capítulo a este misterioso personaje que no ha tenido nuestra debida atención, que no conocemos sus intereses y ha aprovechado para hacer de las suyas fuera de escena.

Para no confundirnos, vamos a ser directos. En su vida antes de entrar en Black hat Organization se hacía llamar Copycat, o bueno, ahora también pero vayamos por partes.

Copycat es un misterio, no se sabe si es hombre o mujer, ni su nacionalidad, ni un poco de su aspecto, pero como el masculino se usa como neutro usaremos el masculino (pero que esto no te haga sacar conclusiones). Copycat es un villano conocido por tomar mil identidades. Es un imitador especializado en todo tipo de disciplinas. Podría pasarse por cualquier persona sin importar la dificultad, con la preparación adecuada, ningún trabajo es imposible. Su trabajo de impostor va unido a la venta de falsificaciones y secretos. Cualquier robo de información que se haya llevado a cabo en los últimos diez años en aquel mundo, es obra de Copycat. Héroes, villanos, personas de a pie, políticos, policías, servicios secretos, etc. todos tras Copycat, bien por sus servicios bien para terminar con su vida.

En cada trabajo era una persona, un repartidor de correos, una profesora de inglés, un vecino amigable, una anciana ricachona antipática, y un largo etcétera. Cada estafa, cada timo, exigía un papel adecuado y especial, y estaba en plena misión.

Todo su trabajo por poco se fue al traste en esa ocasión. Llevaba un año estudiando a Black hat y a su empresa, todo para que al último segundo se les agregara la persona infiltrada, estuvo a punto de destruirlo todo, su aparición podría ocasionar que no contrataran a ninguno de los dos. Todos sus acuerdos, sus chanchullos, sus chantajes, su pase para una jubilación digna, la entrada a la historia, todo destruido por alguien que no se le esperaba y de la que no tenía información alguna por más que tratara de averiguar.

Pero ahí estaba, tecleando frenéticamente en el súper ordenador de la mayor empresa del mal jamás hecha, el epicentro de tantísimos negocios, misterios y secretos. Conforme encontraba información relevante la iba copiando a su USB en forma de cabeza de gato. Lo que de verdad ansiaba era lo jugoso, cuanto más en peligro pusiera la vida de Copycat, más lo quería, haría que el mismo Lord Black hat se humillara a pedir un acuerdo para no revelar su información.

Hizo crujir sus nudillos, deleitándose con su sonido y ampliando su sonrisa. Era de noche y no había nadie despierto en toda la mansión, era su momento, tanto tiempo esperando una oportunidad así, carta blanca para robar a gusto y sin prisas, fácilmente podría poner una excusa si le descubrían.

—Este plan me hará ganar una fortuna. —susurró mientras se frotaba las manos. —¿Cómo no lo pensé antes? Ya puedo imaginarme en la playa de mi propia isla o mejor aún, mi nombre enmarcado en la historia como Copycat, la única persona capaz de dar semejante golpe.