Capítulo 5

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Por la tarde, todos se juntaron y quedaron en una sala de relax que había al fondo del pasillo de las habitaciones. Era una sala grande, con muchos sofás, una tele gigante y una gran mesa con sillas alrededor. Era perfecta para pasar las tardes en compañía. Ana, Roi, Cepeda, Mimi, Amaia y Aitana se encontraban en la mesa jugando al "UNO". Ana no paraba de distraerse mirando hacia la zona de los sofás, donde se encontraban Miriam, Raoul, Nerea, Mireya y Agoney viendo una película. Miriam estaba tumbada en el sofá abrazando a Nerea por la espalda. Ana sonreía mirándolas, lo que le gustaría estar ahora mismo en la posición de Nerea... con Miriam abrazándola por la espalda.

Cuando se dio cuenta de lo que acababa de pensar, sacudió su cabeza. ¿Por qué había pensado en eso? Mimi le dio un codazo a Ana.

-Joder, Ana, tía. Deja de mirar tanto para allá y céntrate en el juego. Es que no me extraña nada de que pierdas todas. - se quejó Mimi.

-Lo siento, me distraigo muy fácilmente. - dijo Ana.

-¿Pero a qué miras tanto? - pregunto Aitana, mirando em dirección a donde Ana miraba.

-Más bien yo preguntaría a quién... - dijo Mimi mirando sus cartas. - Le ha dado un buen flechazo con la gallega.

-¿¡Con Miriam!? Pero si es mi vecina del pueblo. - rió Roi. - Si quieres te la presento encantada, Ana. Seguro que le caerás muy bien.

-Gracias, Roi, pero ya la conozco...

-Pues entonces no se a que tardas tanto en lanzarte a por ella. - dijo Mimi con una sonrisa pícara.

-¡Mimi, joder! ¡Qué no me gusta Miriam! - dijo Ana poniéndose roja.

-Buah, pues molaría un montón ser la novia de Miriam... Con lo guapa que es. - dijo Amaia.

Todo el mundo la miraron y después todos rieron. Amaia no tenía filtro ninguno. De repente, Ricky entró en la sala gritando.

-¡CHICOS! ¡El sábado hay una fiesta en un pub que hay cerca de la uni! ¿Quién se apunta? - gritó Ricky.

-¿Cómo te has enterado? - preguntó Raoul.

-Me lo han contado por ahí... - rió Ricky.

-¿Habrá alcohol? - preguntó Cepeda.

-Hombre, y tanto. - contestó Ricky.

Muchos se apuntaron. En cambio, Ana dudaba en ir o no. Mimi susurró a Ana:

-Ana, ve conmigo a la fiesta. Además así tendrás alguna oportunidad de ligarte a la gallega... - susurró Mimi levantando las cejas.

-Mimi, que pesada eres. No me gusta Miriam.

-Sí, bueno. Luego cambiarás de idea en la fiesta. - rió Mimi.

Mimi cogió la muñeca de Ana y levantó su brazo.

-¡Ana y yo también nos apuntamos!

Ricky aplaudió.

-Sabía que tú no te perderías esta fiesta, Mimi. Ana, lo vamos a pasar en grande. - dijo Ricky, guiñándole un ojo.

🐾🐾🐾🐾

El resto de días antes de que llegara el sábado se hicieron eternos. En las clases, Ana y Miriam cruzaban sus miradas más de una vez, pero cuando se veían, las apartaban rápidamente y sus mejillas se ponían rojas. Mimi y Mireya las veían y todos los días las preguntaban haciendo que Miriam y Ana se incomodaran. Ana cada vez pensaba más en Miriam y a veces pensaba que al final Mimi iba a acabar teniendo razón.

Miriam no volvió a hablar más con Pablo. No quería hablar con él porque si lo hacía se sentía mal al no sentir ya nada hacia él. Se lo dijo a Mireya y esta la dijo que es que a lo mejor la canaria era la responsable de eso. Miriam no la hacía ni caso. Ana solo era una chica normal que acababa de conocer, no pasaba nada más.

Mi vida no es la misma sin ti | WariamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora