¿Nephilim o Mundana? (Jace Wayland y Tú) EN PROCESO DE EDICIÓN

49: La Sorpresa de Simon Lewis II

- Por aquí - indicó el hombre que nos trajo.

Todos pasamos a través de las viejas puertas de roble oscuro, y entramos en un gran salón. El piso era el mismo que en todo el restaurante, solo que aquí, los pétalos de rosas rojas estaban esparcidos sobre este. Las luces eran tenues, y lo único que alumbraba la habitación, era la hilera de velas que se hallaban sobre la gran mesa de algarrobo en el centro, la cual, estaba rodeada de elegantes sillas del mismo material. El ambiente hubiera sido caluroso de no ser porque en el fondo del salon, había un hermoso vitral de tonos rojos y anaranjados.

Vimos como Simon y Raphael se acercaban a nosotros con una sonrisa, y Simon traía un ramo de lilas. Raphael vino directo hacia Jace, Alec, Magnus y yo, mientras que Simon aparto a Izzy.

- Hola! - dijo Raphael, y nos saludó a todos.

- ¿Raphael que es esto? - pregunté algo asombrada, pero con una sonrisa dibujada en mi rostro.

- Bueno, eso ya lo verán más tarde,  pero por ahora, vamos a sentarnos - dijo, y nos llevó hacia la mesa.

Jace se sentó a mi izquierda, y luego Izzy a mi derecha. Frente a mi se encontraba Magnus, frente a Jace, Alec, y frente a Izzy, Simon, que la miraba con una sonrisa en el rostro. Raphael estaba justo en la cabecera de la mesa.

[...]

La cena paso entre bromas, risas, y coqueteos por parte de Iz y Simon. Ya habíamos terminado el plato principal, y estaban por traer el postre.

- Izzy - le susurré.

- ¿Si? - me dijo.

- ¿Que pasa entre tú y Simon? Han estado toda la noche coqueteando y apenas llegamos te apartó y te dió un ramo de flores - le dije burlona.

- Bueno, no lo sé. Pero te aseguro que los nervios que tenía cuando llegamos, se fueron. Cuando Simon me apartó, me entregó el ramo de flores, y me dijo que era muy especial para él, y que esta noche sería especial para ambos y no tengo ni idea de que se trae entre manos, pero estoy segura de que me enamoré completamente de él - me dijo con una tonta sonrisa de enamorada. Yo reí.

- Wow, esto es algo serio. Pero sea lo que sea sabes que siempre te apoyaré Iz - dicho esto, ella tomó mi mano y la apretó fuertemente. Ambas nos miramos y luego de unos segundos me soltó. Yo me voltee a Jace, y este me miraba curioso.

- Nunca pensé ver a Iz enamorada - dijo mientras tomaba un sorbo de su copa de vino.

- Oye! Eres un chismoso Herondale - dije fingiendo estar enfadada.

- ¿Que te hace decir eso? - dice fingiendo estar ofendido, y yo no puedo hacer más que reír.

Estaba por contestar algo, pero Simón me interrumpió.

Narra Izzy

- Muy bien, escuchen me todos - dice Simon poniéndose de pie, y yo no hago más que mirarlo estupefacta.

El silencio se hizo presente en el gran salón, y yo estaba atónita aún¿Que demonios estaba haciendo Simon?

- Bueno, quería agradecerles por venir antes que nada. Probablemente se esten preguntando que pasa aquí, la razón de todo esto. Y, saben? Solo es una - me miro sonriente¡Por el Ángel! ¿Que va a hacer? - Es una una bella razón - por cada palabra, avanzaba un poco más hacia mí - Ven - tomó mi mano, y me condujo en frente de todos. Yo no podía hacer nada, estaba totalmente petrificada - Esta mujer - comenzó a decir - es la culpable de robar mi maldito corazón. - yo sonreí ampliamente - Desde el primer momento en que la ví, supe que era especial. Supe que pondría mi mundo de cabeza y... Vaya que lo ha hecho - unas risas se escucharon por parte de todos - Hace años que ya ninguno sabía nada del otro, más que lo necesario. Toda esa... oleada de sentimientos parecían haberse esfumado, pero hace unos meses - me miro a los ojos - al verla de nuevo... Todo eso cambio. Volví a sentirme un adolescente, mentalmente hablando por supuesto, - todos rieron nuevamente, incluyéndome - volví a mirarla a los ojos, y a darme cuenta de que esos sentimientos que creí perdidos, no lo estaban. De alguna u otra forma, esta bella mujer me revivió, y revivió algo en mí que ni siquiera sabía que existía. Me devolvió la mejor parte de mí - rebuscó algo en su bolsillo y saco una pequeña caja de terciopelo¡Por el Ángel va a pedirme matrimonio! - Y desde ese momento, solo he querido hacerle una pregunta. - se arrodilló frente a mí, y abrió la caja. Pude divisar un pequeño corazón azul, hecho en una piedra preciosa, con una fina cadena de oro. Mis ojos en ese momento se aguaron, y sentí una lágrima de felicidad, recorrer mi mejilla - Isabelle Sophia Lightwood ¿Me harías él subterráneo más felíz de todos, y me harías el honor de convertirte en mi novia? - en ese momento me sentí que iba a caerme, ya que mis piernas eran como gelatina.

- Si-Simon yo... - reí con lágrimas en los ojos - Si!¡Por el Ángel!¡Si quiero ser tu novia! - dije, y en ese momento ví como sus ojos se cargaron de ilusión, y ahora si que iba a caerme, si no fueron porque Simon me tomó por la cintura. Yo enrolle mis manos detrás de su cuello, y rápidamente unimos nuestros labios en un beso apasionado. Sus labios se movían al compás de los míos, y sentía como mis piernas temblaban y mi piel se erizaba con tan solo un roze de sus manos. La falta de aire hizo que unieramos nuestras frentes, y sonríeramos como idiotas enamorados.

Definitivamente esta era la mejor noche de mi vida.