32: Con el Alcohol no Vas a Llegar a Nada

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✓Editado✓

Narra Jace

Daba vueltas y vueltas en la cocina, no podía dejar de pensar en lo que debería estar sufriendo _____, algo que era evidente, ya que sus gritos eran cada vez más y más fuertes.

- Oye hermano cálmate, estará bien. Magnus sabe lo que hace - dijo Izzy compasiva.

- No lo sé Izzy.  - me detuve frente se ella - Tal vez si no la hubiera dejado. - hablaba desesperado - Por el Ángel, ésto es mi culpa - dije dando una vuelta sobre mi lugar.

- Jace no empieces con eso de nuevo. Ni tú, ni yo, ni nadie es culpable aquí. Únicamente Jason - no pude descifrar las palabras al instante. Los nervios no me permitían pensar con claridad.

Los alaridos de _____ me desconectaban del resto del mundo. En ese momento no lo resistí y me dirigí a la puerta a paso firme, pero Alec bloqueó  mí camino en el intento por salir de allí.

- Alec enserio quiero verla,  lo necesito - dije en un tono elevado.

- Hermano,  Magnus dijo que...  -.

No pude terminar de oír la frase porque utilicé mi agilidad para apartarlo y salir de la cocina. Había tomado la llave y los encerré para que no pudieran hacer nada para impedir que  viera a la mujer que amo. Cuando entre en la sala, ví se Magnus sorprendido, y a _____ aún desplomada en el sofá, pero estaba despierta y parecía agotada. Yo me acerqué lentamente a ella, y pude notar como sí me reconoció. Oí salir de sus labios un pequeño susurro. Mi nombre. Ella me quería ahí, me necesitaba tanto como yo a ella. Me senté junto a Magnus, quien aún parecía un poco sorprendido, y tomé la mano de ____ sequé un poco de sudor de su frente, y le dije a Magnus:

- Necesito quedarme con ella, tengo que quedarme aquí - dije al ver su expresión.

- Bien, - dijo un poco cansado, supongo que no tendría fuerzas para disgustarse - solo no interrumpas, ni aunque sientas que es demasiado dolor. Todo es para que se reponga.

Yo a sentí con la cabeza y apreté la mano de ____ con fuerza, pero no demasiada como para hacerle daño. Sentía como ella la apretaba cada vez que chillaba, lo cual era reconfortante en cierto modo, sabía que yo estaría por y para ella, pero a la vez sentía como si metal demoníaco quemara mi piel una y otra vez, al verla sufrir de tal manera sin poder hacer nada más que tomar su mano y esperar. Los minutos se convirtieron en horas, y Magnus logró que _____ tomara el antídoto, el cual volvió a dejarla inconciente. Dejé salir a todos de la cocina, y Magnus nos explicó que ____ podría estar en ese estado por una semana, algo que no me tranquilizaba. Esperamos unos minutos para ver si había alguna reacción o algo por su parte. Pero nada. Pasadas las horas,  Magnus dijo que sería mejor llevarla al Instituto. Creó un portal, yo la cargué en mis brazos y pasamos a través de él.

Una semana después

- Jace, hermano... - Alec entró a la enfermería para ver a ____ que se encontraba allí hace casi una semana - Deberías descansar. Hace una semana para lo único que sales de aquí es para tomar una ducha, y no son ni cinco minutos.

- Alec, no estoy de humor, ¿Acaso no escuchaste a Magnus? - dije en tono serio. Magnus pasaba cada día por el Instituto para controlar a ____. Hace unos días había dicho que si para hoy en la noche no mejoraba, dudaba mucho que fuera a sobrevivir.

- Lo sé. Pero tal vez deberías salir un poco, no lo sé, aclarar tu mente - dijo amablemente.

- Es que si hoy no da alguna señal... No lo sé, Alec. Podría enloquecer. La amo. Es la única mujer que he amado en años, y no quiero perderla - dije con unas pocas lágrimas asomándose en mis ojos.

- Lo sé, hermano - dijo Alec, dándome una palmada en el hombro.

De pronto Magnus entró en la habitación. Tenía que hacerle un chequeo a _____ para ver si avanzaba o no. Pero había estado igual desde que la trajimos hace una semana. Nos dejó quedarnos en la habitación por esta vez, y comenzó a hacer su magia sobre ____. Al terminar nos miro decepcionado y negando con la cabeza baja. Imagine que era lo que iba a salir de su boca, pero no quería oírlo.

- Lo lamento mucho.  - bajo la mirada hacia el suelo - He hecho todo lo que pude, pero sabíamos que había una posibilidad de que no funcionara. - caminó hacia la puerta, y luego volvió a vernos a mí y a Alec - La mantendré hasta la medianoche - dicho esto se retiró, y Alec salió corriendo tras él.

Yo todavía no podía creerlo. Me hallaba frente a la mujer que amaba y, una vez más, estaba por morir. Yo me acerqué a ella, a paso lento. Mi incredulidad se mantenía aún. La admire por unos pocos segundos, y luego le di un tierno y corto beso en los labios. Caminé hacia la puerta de la enfermería, y susurre medio para mis adentros - Adiós, mi mundana - y sin decir nada más, salí disparado a la puerta del Instituto.

[...]

Una vez que entré al bar mundano, una oleada de recuerdos y alcohol me cubrió de los pies a la cabeza. Me dirigí rápidamente hacia la barra, me senté en una de las altas banquetas, y ví cuando el barman se me acercaba.

- ¿Qué te sirvo amigo? - dijo este.

- Dame lo más fuerte que tengas, y que sea doble - dije sin ánimos. Ya no quería pensar en nada, solo quería perderme en el alcohol.

Luego de varios tragos ya estaba muy ebrio, pero mi plan no funcionó. Cada día, cada momento, cada discusión con ____ se vino a mi mente, como una mala pelicula. Y no por su contenido, si no por lo que significaba para mí. Días y días de felicidad en vano.

No sé cómo, me paré de mi asiento y me encamine hacia el Instituto, no sin antes lograr que me betaran del bar por alguna idiotez que había cometido, la cual en esos momentos no recuordaba. Una voz se vino a mi cabeza, era ____.

Con en alcohol no vas a llegar a nada Jace.

Una vez un demonio mayor había atacado a Alec, y estaba muy mal. Yo me embriague como lo hacía en ese momento, y ____  me había encontrado en el Instituto. Recordar eso solo hizo que me deprimiera más, y volvieran al Instituto casi arrastrandome.

¿Nephilim o Mundana? (Jace Wayland y Tú) EN PROCESO DE EDICIÓNKde žijí příběhy. Začni objevovat