Klein Durm // Erik Durm (TERMINADA)

Capítulo 37

Pero no me lo pidió, y miento si digo que no me fui de Alemania nuevamente con el corazón roto al igual que la última vez, Erik me fue a dejar al aeropuerto después de que fuéramos por Leo a la casa de sus padres, y esperé hasta el último minuto que me pidiese que me quedara, incluso pensé que lo haría luego de despedirse de Leo y que este comenzara a llorar, vi lágrimas en los ojos de Erik. Pero cuando fue el turno de despedirse de mí, fue totalmente frio, un Erik completamente diferente al que había visto en mi estadía, y quizás ya se había aburrido de jugar a la familia conmigo.

Había llegado hace dos horas a Madrid, Leo había llorado todo el camino a casa, el único momento en que no lloró fue cuando se durmió por casi media hora en el avión, pero tan pronto como abrió los ojos comenzó a sollozar, y había hecho de casi todo para calmarlo, y finalmente lo había logrado. Ahora la que quería llorar era yo, pero no podía hacerlo porque siempre que Leo me ve llorar, se pone a llorar conmigo y me había costado demasiado el calmarlo.

Vir había venido, y ella junto a Anna estaban realmente sorprendidas de que yo haya vuelto, ya que estaban al tanto de cómo estaban las cosas en Dortmund, y también pensaban que me quedaría allá a formar una linda familia con Erik.

Anna salió con Sául, parece que todo iba totalmente bien entre ellos, y me alegraba montones por mi amiga, parece que la única que no está hecha para el amor soy yo.

Paso la tarde deprimida en mi habitación, y la semana que sigue a mi llegada no me ayuda mucho, no tengo cosas que hacer, y pensar que volveré a la rutina me deprime aún más. Las chicas tratan de animarme llevándome a una práctica de los chicos, y ahí veo a Hannah, la novia, ex-novia, amiga, no sé qué de Durm, y parece bastante cariñosa con uno de los jugadores de Atleti, al parecer la chica había cambiado la carne alemana por la Española. Me alegra que al menos no haya sido la amante de su relación con Erik.

Por parte de Durm, he recibido un par de textos preguntando por Leo, pero parece que la misma frialdad que tenía cuando me reencontré con él en España ha vuelto, y no hemos tenido una conversación más larga que un par de textos, es increíble que todo lo que vivimos en Alemania ahora se reduce a esto, lo cercanos que llegamos a ser, para estar aquí ahora, casi sin hablarnos y separados por kilómetros y kilómetros de tierra.

Leo pregunta todos los días por Erik y me rompe el corazón cuando se da cuenta de que no está aquí.

Pasa así otra semana, y es la primera semana de universidad, y es como la puta mierda, he estado tan fuera de mí, que parece que no me he estado alimentando realmente bien y he estado realmente mareada, lo que me ha hecho trabajar horriblemente mal, y ganarme bastantes regaños de mi jefe, y me asusta el perder mi trabajo.

Pero aparte de los mareos, una de las principales razones por las que no estoy comiendo muy bien, es que cada vez que huelo la comida, me dan unas tremendas ganas de vomitar, y lo único que he sido capaz de ingerir ha sido pan.

Las chicas comenzaron a notarlo, y también se dieron cuenta de que estaba increíblemente pálida un día que llegué a casa desde la universidad con Leo junto a mí.

"Mierda Tam, ¿Qué te pasa?" me dice Vir.

"Creo que me estoy enfermando" Respondo sentándome en el sofá y todo comienza a dar vueltas a mi alrededor.

"¿Estás bien?" Pregunta la voz de Anna ahora, creo.

Mis ojos dejan de enfocar correctamente y comienzo a ver unos puntitos, cosa que hace que me maree aún más y cierro los ojos. En estos momentos, agradezco que llegué a casa y que no me puse así en la calle, estando sola con Leo.

"Estoy algo mareada" susurro las palabras y me trato de poner de pie para ir por algo de comer, pero tan pronto como me paro todo se va a negro y escucho el grito de Leo, diciendo mami.

Despierto en una habitación blanca, Anna está en la silla junto a mí, puedo ver a Vir en la distancia, mi boca está seca y tengo una aguja inyectada en mi brazo, que lleva a una bolsa de suero, hay un monitor que toma mi pulso y emite un ruido, me muevo y me duele la cabeza, me la toco y tengo una venda, el zumbido de la máquina que controla mi pulso me da aún más dolor de cabeza. Las chicas están platicando así que no se percatan de mi despertando.

"¿Y Leo?" Es lo único que sale de mi boca y las dos chicas se giran para verme.

"Al fin despiertas bella durmiente" Me dice Vir.

"¿Dónde está Leo?" Pregunto ahora alterándome un poco.

"En la guardería del hospital, cálmate ¿ok? ¿te sientes bien?" Me dice Anna sentándose en la cama y trato de asentir, pero el dolor de cabeza ataca nuevamente.

"Me duele la cabeza, ¿cuánto tiempo estuve desmayada?"

"Cerca de 2 horas, está haciéndote análisis para ver que tienes, estarán listos dentro de una hora o algo así entendí" dice Vir.

"Llamaremos al doctor, espera aquí" dice Anna

"No es como si me pueda mover" susurro y las chicas ríen. Vir va por el doctor. Anna decide quedarse por si necesito algo en el transcurso que pasa desde que Vir sale.

Menos mal la española se quedó conmigo, porque al segundo de que Vir se fue, mi celular comienza a sonar en alguna parte de la habitación. Tan solo por el sonido me doy cuenta de que es un mensaje. Anna va por el teléfono y me lo pasa, es un mensaje de Erik.

"¿Cómo está Leo?"

"Bien." Le respondo lo más cortante que puedo y no obtengo ninguna respuesta.

Vir llega con el doctor, quien revisa mis signos vitales y me examina. Pero me dice que no me puede dar nada para el dolor hasta que los análisis estén listos y estén seguros de lo que tengo. Así que deja la habitación, yo suspiro, justo cuando sale el doctor, entra Saúl seguido por Lucas con cara de preocupados pero que se alivia al ver que las chicas están bien, lo que provoca un poco de dolor, pero a la vez alegría por ellas. Comienzan a hablar de distintas cosas, claramente no queriendo tocar el tema de Erik o de cualquier cosa que tenga que ver con Alemania.

Al cabo de casi 2 horas más tarde el doctor vuelve a entrar en la habitación, el suero me lo han cambiado 2 veces ya que parece que estoy un 'poco' deshidratada, por el hecho de no estar comiendo estos últimos días. El doctor luce sorprendido de que haya tanta gente en la habitación ya que solo se permiten unas pocas a la vez. Pero parece que es del Atleti, ya que cuando nota quienes son los chicos, los deja quedarse, aunque hubiese preferido que se fueran por las preguntas que me tenía que hacer el doctor.

"Bueno, los resultados dieron positivo a embarazo, ¿Está utilizando pastillas anticonceptivas? si lo hace le sugiero que las deje de inmediato, ahora la trasladaremos a otra habitación para realizar un ultrasonido y verificar que todo esté bien" dice y yo no salgo del shock.