Tengo Sed de Ti - II

Capítulo 27

Capítulo 27

La tensión en la sala de emergencias podría dejar asfixiado a cualquiera. Mantuve mi cabeza apoyada en la mayólica, en frente se encontraba Lucian sentado, enterrando su rostro contra las palmas de sus manos, su camisa estaba desaliñada, su cabello alborotado y movía sus pies con nerviosismo y angustia. A mi lado se encontraba Dereck quien parecía estar en todos lados menos aquí, estaba cabreado, demasiado cabreado de que yo estuviera aquí, sabía que estaba haciéndose un lío en la cabeza, debido a que Nina se encargó de informarle que Lucian y yo llegamos juntos por lo que supuso que estuvimos juntos desde antes.

Hablando de la susodicha se encontraba más alejada hablando con Enzo y dándome de vez en cuando miradas desaprobatorias, Bee y Daniel fueron por cafés para todos.

Después de unas largas horas, la mujer de hace un rato volvió a salir de la otra sala y se acercó a Lucian.

— Lo han regularizado, han hecho una limpieza interna; sin embargo, hay posibilidades de que hayan quedado algunas partículas cerca al corazón.... — continuó diciendo, a penas lograba escuchar y entender que era lo que decían. — La lesión ha sido muy grave pero al ser de linaje puro se podrá recuperar más rápido del promedio...

— Pero. — la interrumpió él.

— Pero deberá estar en observación, no sabemos cuánto va a tardar en reaccionar, si da buenos resultados significa que está limpio, sino, debe haber algo de plata en su sistema. Es muy raro que traigan vampiros heridos, tu hermano ha sido afortunado.

— Eso creo.

Ni siquiera me percaté cuando había caminado y me encontraba a escasos centímetros de él. Lucian volteó a mirarme regalándome una pequeña sonrisa para tranquilizarme.

— Te dije que saldría de esta. — pasé saliva.

Sus ojos brillaron detenidos en mi persona hizo el ademán de tocarme pero se detuvo en cuanto la sombra de alguien apareció detrás mío. Su semblante se tornó serio y supe que se trataba de Dereck.

— Creo que debemos irnos, tienes que descansar Margaret. — tomó mi mano tirando de mi hacia él.

La sensación y situación era tremenda, quería justificarme diciendo que me encontraba así solo por Ethan, que mi preocupación radicaba en él y no en Lucian. Pero sería como mentirme de forma descarada.

— Quizás deberíamos esperar a que despierte. — titubee.

— Él tiene razón Maggy, debes descansar, tu organismo no es igual al de un vampiro, necesitas dormir. — mordí mi labio inferior y asentí.

Tomé la mano de Dereck y juntos salimos de aquella sala, podía sentir su enojo, su cuerpo irradiaba calor y tensión por donde lo vieras y su mano se aferraba a la mía con fuerza.

Entramos al ascensor y Dereck ni siquiera me miró, no había hecho nada malo más, era consciente que había respetado está especie de relación que tengo con Dereck, porque la verdad era que jamás dejamos en claro si esto era una especie de noviazgo.

— Dereck. — tiré de la manga de su camisa.

— ¿Lo estás viendo? ¿Lo estás viendo a escondidas? — sus preguntas me pillaron por sorpresa, parpadee repetidas veces tratando de asimilarlas.

— ¿Disculpa?

— ¿Se están viendo a escondidas, Margaret? Tú y él. — apretó los dientes clavando sus ojos grisáceos en mí, yo negué al instante algo ofendida de que si quiera lo pensara.