Capitulo 41

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Entraron al restaurant pero Harry se topó con una desagradable escena.

-Harry por favor no hagas una locura, menos frente a Jack- le decía Gemma mientras trataba de calmarlo.

-¡Mírala! Aún no nos hemos divorciado y me pasa en las narices a cuanto hombre puede-

-Por favor compórtate- Harry asintió y los tres se dirigieron a una mesa.

Los tres pidieron su cena pero Harry nunca quito la mirada de Kenny, ni ella ni Magarret habían notado su presencia por lo cual siguieron charlando animadamente riéndose todo el tiempo.

-Vaya  Kenny, jamás me hubiera imaginado que su vida fuera así-

-A veces juzgamos mal a las personas-

-Lo dice por mi ¿Verdad?-

-También por mí, jamás me imagine tener una charla agradable con usted-

-Steve-

-¿Cómo?-

-Que me diga Steve, usted me hace sentir muy viejo-

-De acuerdo, Steve- le dijo Kenny sonrojándose.

-Siempre es tímida, no lo creo-

-A veces, depende la situación, en el trabajo no lo soy, lo sé manejar más, pero socializando, al principio lo soy y mucho-

-No aparenta ser una mujer tímida-

-Antes lo era demasiado- le dijo Kenny transportándose inmediatamente a una escena del pasado.

-Quiero que te toques- Kenny miro extrañada a Harry.

Estaban los dos desnudos acostados sobre la cama, Harry abrazaba a Kenny mientras ella le acariciaba el pecho y el vientre.

-¿Cómo?- Preguntaba Kenny

-Quiero que te des placer- Ella apartó su mirada de él y se sonrojo, entonces le tomó la mano que lo seguía acariciando.

-No se hacerlo- Le contestó momentos después en un tono de voz apenas audible.

-Yo te enseño-

-¡Harry!- El tono de Kenny estaba mezclado entre protesta y pena.

-Vamos nena- Le decía Harry llevando con su mano la de ella hacia su parte intima.

Comenzó a acariciarla con la mano de ella, suave, muy suavemente mientras la miraba a los ojos con ternura, Kenny comenzó a respirar más rápido mientras cerraba los ojos.

Harry aparto su mano de la de ella para que continuara sola, pero no continuó.

Harry volvió a tomar la mano de ella y volvió a repetir la caricia, pero esta era un poco más intensa.

Kenny dejó escapar un gemido, entonces Harry la besó.

-Continua tú sola- Le dijo en voz baja, Kenny negó con la cabeza.

-Vamos no tiene nada de malo-Continuó Harry- Solo quiero que te tomes y me tomes más confianza- Cuando Harry terminó de decir esto la volvió a soltar, Kenny dudo unos segundos pero lo siguió haciendo.

Momentos después Kenny se estaba acostumbrando y comenzó a dejarse llevar por el placer. Empezó a gemir más frecuentemente y se retorcía en los brazos de Harry hasta que paró mientras lo miraba con vergüenza. Harry solo sonrío y la besó mientras su mano comenzaba a realizar lo que hasta hace poco hacía la de ella.

La gran mentira (Harry Styles y Kenny)  EDITANDOWhere stories live. Discover now