Capitulo 39

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-¿Pero que clase de persona es él?-preguntaba exaltado Maximino

-No lo sé, pero me da miedo-

Momentos después reunieron a todos los empleados de la empresa.

-¡Buenas tardes!- Saludó Maximino- El motivo de esta reunión es para comunicarles que la ingeniero Mendoza encontró una cámara de video en su oficina, una pésima cámara por cierto-

-Quiero decirle al creador de esto que confiese de una vez, porque sino de todas maneras lo encontraremos- Decía Kenny.

-¿Qué piensan hacer?- preguntó Marino

-Revisaremos computadora por computadora de ser necesario- explicó Maximino.

-Yo los ayudaré-

-La tuya también se revisara Marino-

-¿La mía por qué? ¿No creerás que fui yo?-

-Vamos Marino, es solo para demostrar a los demás que aquí todos somos iguales, tú, Kenny y yo iremos con otros técnicos a revisar e Isis se quedará aquí con los demás-

Kenny, Marino y Maximino se dirigieron a los pisos de arriba, comenzaron los técnicos a revisar las pertenencias de otros empleados para no despertar sospechas en Marino, cuando llegó el turno de él este hizo todo lo posible por evitarlo.

-Aquí está la cámara- indico un técnico. Kenny y Maximino observaron con enojo a Marino.

-Yo… puedo explicarlo-

-Esperamos que si- le decía Maximino mientras tomaba su computadora- Te quiero en mi oficina en cinco- le terminó de decir mientras salía.

-¿Qué pretendías con poner una cámara en mi oficina?-

-No lo entiende Kenny- le dijo Marino mientras la jalaba hacia él- Me interesas, me interesas como mujer no como compañera de trabajo-

-Suélteme, usted en cambio no me interesa en lo más mínimo-

-¿Por qué? ¿Por qué no tengo ojos verdes y un cuerpo musculoso?-

-¿Qué está tratando de decir?-

-Que yo no le intereso porque no soy como el rulitos ese, pero déjeme decirle que yo la puedo hacer más feliz que él, yo le puedo proporcionar más placer- En ese momento Kenny le dio una bofetada.

-Haber si así aprende a respetar a sus superiores, y será mejor que pase a la presidencia sino quiere que le vaya peor- Marino se dio la vuelta y se fue.

Una hora más tarde Kenny salió de la empresa en su coche, iba en dirección a su casa pero de pronto dio una vuelta a la derecha yendo en dirección contraria. Siguió manejando hasta que vio la palabra Cinco-0  escrita.

-¡Buenas tardes!- saludaba Kenny a la recepcionista.

-¡Buenas tardes! ¿En qué puedo ayudarla?-

-¿Podría hablar con el detective Steve Magarret?-

-¿De parte de quién?-

-De Kenny Mendoza- La recepcionista se comunicó y momentos después Kenny entraba a una oficina amplia y bonita, algunas paredes eran de cristal.

-¡Que extraño tenerla por aquí Mendoza!-

-¡Buenas tardes comandante!-

-¡Buenas tardes! ¿A qué debo su agradable visita?- Dijo con sarcasmo mientras la hacía sentarse.

-Necesito su ayuda- Magarret frunció el seño- Necesito que me ayude a investigar sobre un ex empleado de la empresa-

-¿Problemas amorosos?-

-No juegue por favor, era el vicepresidente de la empresa pero lo acaban de correr porque colocó unas cámaras en mi oficina, pero lo a que a mi me inquieta es que tenga fotos mías donde estoy… con mis hijos- A Kenny se le comenzó a quebrar la voz

-Discúlpeme- Le decía mientras se echaba aire en el rostro con sus manos- Pero es que no sabe como me preocupa el saber lo de mis hijos-

-No sabía que fuera madre-

-Debería saberlo, ¿Me investiga no?- le preguntó con voz suave

-Si, pero investigo sobre su vida laboral y antecedentes penales, no sobre su familia-

-Bueno, pues si soy madre- A Magarret le causo mucha ternura el ver a Kenny, pero no supo porque.

-¿Cuántos hijos tiene?-

-Dos. Dos hermosos mellizos-

-¿Niños?-

-Un niño y una niña-

-Vaya, jamás me lo imaginé… ¿Cómo descubrió lo de las fotografías?- Magarret tenía que cambiar de tema, no podía dejarse llevar por los encantos de Kenny, aunque si hubiera ido en plan de seducirlo no iba vestida de la manera apropiada con ese pantalón y ese saco, pero no podía negar que se veía hermosa.

Kenny comenzó a narrarle como había encontrado una cámara en su oficina  y como Maximino había iniciado la revisión. Sería muy tonta si le confesaba que había entrado a su oficina y revisado sus cosas.

-¿Tiene las fotografías?- Kenny sacó de su bolso unos papeles con las fotografías impresas y se las dio.

-¡Yo pensé que eran unos bebés!- le dijo asombrado.

-Tienen cuatro años, pero para mi  son mis bebés- Magarret no se podía explicar porque de pronto esa ternura por Kenny, ¿Sería porque no estaba en su papel de vicepresidenta general sino en el de madre preocupada?

-Yo investigaré y en cuanto sepa algo le avisaré-

-Gracias- le dijo Kenny regalándole una hermosa y tierna sonrisa, se despidió y salió de allí para dirigirse a su casa.

***Hola wapas!!! Se que es corto :(, pero es que estoy pasando algo que se llama sin inspiración y me joden mucho los maestros jajajaja, pero me ha encantado y motivado el saber que tengo lectoras nuevas!!! ehhhhhhhhhhh.... asi como demasiados votos más *Se va a un rincón a llorar TTwTT* y por eso mañana les subo capi.... y si veo que varios lo leen hago maratón!!!!  Mil gracias a todas las personitas hermosas que leen mis noves las amo!!! 

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La gran mentira (Harry Styles y Kenny)  EDITANDOWhere stories live. Discover now