Capítulo XXVII

1.4K 84 26
                                    

Seguía de pie, con el profesor aun a mi lado. Estaba nerviosa porque no sabía exactamente que tenía que hacer en este momento. Y eso solo me hacía querer salir corriendo y desaparecer ahora mismo de aquí.

Matteo se sentó justamente al frente, haciendo que mis nervios se profundizaran aun mucho más. ¿Era necesario que tomará lugar ahí? ¿por qué no en el fondo?

-Nina y.... ¡Tú!-dijo señalando a Jorge, quien estaba justamente a la derecha de Matteo -. Ven, ¿Cual es tu nombre, chico?

-Jorge- sonrió haciéndose a mi lado.

-¿Entendieron lo que tienen que hacer?- pregunta acomodando sus gafas. Ambos asentimos y pregunto por última vez ; -. ¿Seguros?

-Sí.

-Bien. Adelante- dijo para luego ir a sentarse en una de las sillas. Contemplando que hacíamos nosotros. Mire a Jorge y luego a los demás.

¡¿Qué carajos hago yo aquí?!

Pensé bien que decir para no cometer una estupidez y me di cuenta de que Jorge y yo no habíamos entablado nunca una buena conversación. No lo conocía, eso estaba claro. Y las dos únicas veces que compartimos no tengo mucho que resumir, sin embargo, me armo de valor y me dejo llevar por lo que salga de mi boca sin hacerme responsable.

-Oye, ¿acaso te ha dolido el golpe que te diste?- venga, no se si lo estaba diciendo igual que aquella vez, pero lo estaba intentando. Jorge soltó una risita traviesa y me miro con diversión -. Dime, preciosa.

Si, estoy agregando texto.

Claro que si.

-Perdón ¿me hablas a mi acaso?- dijo, agudizando su voz como una mujer, haciendo que una sonrisa se estampara en mi rostro porque en definitiva me  causaba gracia -. Dime, guapo.

Lo mire achicando mis ojos.

¡Te estás pasando Ramón! Eso nunca salió de mi boquita.

-Claro que te lo digo a ti- intente seguir con lo que sea que estábamos haciendo -. Y bien, dime, ¿te dolió acaso?- intente, imitar su voz pero vaya que su acento se me complicaba como mil demonios. Además, de que ahora sabía que la voz varonil no era mi fuerte.

-¿Cual golpe?- fingio demencia y coloco sus manos a la altura de su cintura.

-El golpe que te diste cuando caíste del cielo hermosa-  dije, pasando la mano por mi cabello como cual hombre lo haría. Intentando mostrar coquetería.

-¡Ay!- suspiro con ilusión -. ¿Y a ti te dolió el golpe cuando caiste del cielo, muñeco?- enarque una ceja y mire  a los demás.

Mire a Matteo por unos segundos, hasta que él aparto la vista.

-¿Te parece?- pregunte coqueta -. Supongo que es porque la cigueña me ha dejado caer de cara  contra el pavimento.

Escuche risas en el fondo.

-Pero como me encanta, que te me tires encima con esa cara- dijo con autosuficiencia y rodé mis ojos.

-¡Eso no es cierto!- bramé.

-¡Por supuesto que no lo es!- soltó exasperado -. Solo intentaba seguirte.

-No lo has sabido hacer.

Se escucharon unos 《uhhh》 al fondo y mire al profesor.

-¿Puedo ir a sentarme ya?- este asintió -. Gracias.

-Excelente. Estuvo muy divertida su presentación- comrnto poniendose de pie, -. Aunque un tanto confusa pero no mal.

Camine hasta mi lugar, al final con las chicas y las mire.

-Lo hiciste super padre amiga ¡Te botaste!- enfatizo Luna, aplaudiendo.

-¿Tú crees?

-Si, lo hiciste muy bien.- le interrumpió Ámbar.

-¿No hice el ridículo?

-Para nada bonita lo hiciste bien a pesar de ser muy mala actriz.- sonrió Simón.

-¡Simón!- me queje soltando una risita -. Lo intente.

-Lo hiciste muy bien, Nina- sonrió Gastón -. Aunque le adulteraron un poco a esa escena, ¡eh!- bromeo.

La tarde se paso en divertidas escenas que recreaban los demás. Todas fueron buenas y nos hicieron divertir  muchísimo. Mucho más cuando Ámbar tuvo que dramatizar la suya con Matteo que termino siendo un tanto chistosa, hasta la de Luna con Ramiro.

-¡Chicos, presten atención a esto, por favor!- hablo el profesor, colocandose una vez más de pie -. Para nuestra siguiente clase haremos una pequeña obra y dramatización- comento, caminando de una de las esquinas a la otra -,  he decidido que cada uno de los escogera cual quiere dramatizar y luego si no concuerda con la de su pareja, harán elección de manera mutúa para no tener desacuerdos. ¿bien?

Todos asentimos, de manera efusiva. Mire a Luna, y ella me miro a mi. No era necesario hablar para saber que esto iríamos juntas.

-Sobre mi escritorio podemos contar con algunos libretos. Cabe resaltar que, no serán originalmente los verdaderos. Pues, hoy mi idea es dramatizarlos de  una manera más innovadora. Y con eso me refiero a que, quiero que sea mas divertido. Para pasar una buena tarde. Así que hay comedia en ellos. ¡Vayan por el suyo, y  tomenlo-finalizó.

Luego de tomar  mi libro, volví a mi ligar habitual y mire a los demás, caminar energicamente por uno. Tomarlo y volver a su lugar. Cuando ya todos estaban sentados nuevamente, el profesor se  dispuso a hablar, sacando algunos papeles del portafolio que traía con él.

-Bien... Supongo que ya todos tienen el suyo en sus manos y no me queda más que informarles que seré yo quien elija las parejas.

Lo mire de golpe, interpretando aquello que había dicho.

-Disculpe, ¿qué?- pregunte alarmada. No quería tener que hacer esto con alguien más que no fuera Luna. No podía ser posible que mi suerte fuese tan detestable.

-¿Algún problema con eso, Simonetti?-pregunta de manera autoritaria y no me queda más que negar en repetidas ocasiones -. ¡Eso está muy bien! Los iré nombrando y tomaran lugar  junto con su compañero de obra.

****

¿Con quién quieren que quede Nina en la obra?

••• 

Mirén mi intento fallido de dibujo del shipp más lindo y tierno del mundo ♥♥♥

Mirén mi intento fallido de dibujo del shipp más lindo y tierno del mundo ♥♥♥

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Si, si, ya , mejor sigo con mi novela. Soy muy mala en esto

Amor Oculto,  Mattina SLWhere stories live. Discover now